PEQUEÑO RABANITO Y OTROS CUENTOS [MXTX AU]

Cuento N°2

「POR LA SONRISA DE MIS NIÑOS」

Hace algunos años, el esposo de Madam Yu, Jiang Fengmian, llegó a casa con un pequeño niño delgado, sucio y asustado, afirmando que desde ese día Wei Wuxian era parte de la familia. Al principio Madam Yu no supo como tomárselo y miraba con algo de recelo al niño, recia a dejarlo permanecer en su casa. Hasta que un día, en medio de una discusión con su esposo, se entero de las situaciones por las que el niño pasó.

Wei Wuxian, un niño huérfano que vivía en las calles con no más de cinco años, paso hambre y frío, fue golpeado por tomar un trozo de pan, huyó de los perros en los días de lluvia, fue ridiculizado por andar sucio y casi fue llevado a un prostíbulo. Si no fuese por la llegada a tiempo de Jiang Fengmian el niño estaría siendo abusado o de plano ya estaría muerto.

Los ojos de Madam Yu estaban rojos y su cuerpo temblaba de la impotencia. Recordó a ese niño sonriente que conoció, aquel que siempre bromeaba y no supo cómo no preguntó antes las condiciones del niño. Sintió su corazón afligido y sus ojos cristalinos. Y con toda la emoción que junto en el momento, buscó a Wei Ying desesperadamente hasta que lo encontró y lo envolvió en sus brazos. Había pasado mucho tiempo desde la última vez que el pequeño recibió un abrazo tan maternal, su madre solía llenarlo de mimos a toda hora al igual que su padre; pero la vida fue dura con él y se los llevó a ambos, dejándolo solo en esta sociedad cruel. Wei Ying no notó las lágrimas que salían de sus ojos, e instintivamente se acurrucó en los brazos de Madam Yu, quien finalmente lo tomó en sus brazos repartiendo pequeñas caricias con la mano que tenía disponible.

Jiang Fengmian y Yu Ziyuan son un matrimonio relativamente joven que cuenta con 2 hijos: Jiang Yanli de siete años, y Jiang Cheng de cuatro años. Ambos provienen de familias de renombre, casados por conveniencia más que por amor. Han sabido llevar su relación en buenos términos a pesar del carácter complicado de Madam Yu, aunque la llegada del pequeño de cinco años causó un pequeño caos en la casa de los Jiang. Por suerte todo se arregló.

Madam Yu es de esas personas que pueden quererte mucho, pero que no siempre sabe como expresarte su cariño. Sin embargo, desde el día en que tomó a Wei Wuxian en sus brazos y lloró junto a él, se prometió a sí misma que daría todo su esfuerzo para ser una buena madre. Claro, eso no quitaba el hecho de que debía educarlos correctamente, pero habría más cariño expresado para su familia.

Aceptó a Wei Wuxian como su propio hijo y se alegraba al ver los lazos que este tenía con sus otros dos pequeños. Se sentía orgullosa de lo madura que era Yanli y de lo inteligentes que eran sus dos terremotos más pequeños. Jiang Fengmian solía llamarlos "Los orgullos de Yunmeng" que es el nombre que le dieron a la empresa que crearon juntos, "Yunmneg Company".

A veces, pasaba los fines de semana en la sala de estar con sus tres pequeños viendo alguna película, conversando sobre la escuela o comiendo algún postre preparado por ella, solía intercalar los favoritos de los niños, así que cada un mes aproximadamente comían su postre favorito.

Los pequeños se mostraron sorprendidos con el cambio de la señora Yu, pero de a poco vieron que les gustaba ser consentidos por mamá y elogiados por papá. Claro que en cuanto a enseñanza,  la señora Yu seguía siendo muy estricta y dudaban que eso cambiara, pero realmente no importaba mucho, eran todos muy inteligentes.

Wei Ying solía llamarla mamá muy rara vez al comienzo. La primera vez fue un día después de la escuela, A-Xian tenía seis años y era extraño verlo tan sonrojado y callado como ese día. Eso encendió su radar de alerta. Su sorpresa fue grande al ver que no tendría que sacarle información.

—M-Mamá... ¿puedo hablar contigo?

Yu Ziyuan casi lloró al ser nombrada de esa forma, con ese tono tan tierno que Wei Ying tenía cuando estaba por decir algo importante.