- ¿Qué estás haciendo aquí?- pregunté al momento de verla acercarse a mí-
- Vine al funeral de mi esposo- traía un pequeño velo negro cubriendo parte de su rostro- ¿Acaso no puedo?-
- No, él ya no es tu esposo, yo no soy tu hijo, para mí tú ya no existes- dije mientras la encaraba
- Malcom, luego hablemos de eso, estamos de luto todos los que están aquí- me dijo y la tensión comenzó a sentirse por todo el lugar-
- Vete de mi casa- le susurré-
- Oh no, Aleck también debe despedirse de su padre- ¿Qué?-
- ¿Después que lo ocultaste por 10 años? No lo creo- le dije y me fijé en el pequeño- Yo sé que no quieres esto, quieres estar en casa tomando chocolate caliente mientras ves las caricaturas, si gustas te puedo llevar a mi habitación mientras le pido a Bertha que te prepare chocolate ¿qué dices?- sus ojos grises chocaron con los míos, se veían...
Vacíos
- Está bien Malcom- me dijo y tomé su mano, me enderece y encare a Sara nuevamente- Puedes venir por él mañana, Aleck puede quedarse pero tú no-
- Bien, me iré pero me verás en la cláusula del testamento- dijo para después comenzar a caminar hacia la salida nuevamente-
- ¿Vamos?- le pregunté a Aleck y ambos subimos las escaleras hacia mi habitación, al entrar el pequeño se tiró a la cama y abrazo mi almohada- ¿Aleck?-
- Malcom, sé que ni tú ni papá me quieren, no me conocieron hasta hace un año, ya no soy tan pequeño y que de seguro me sientes un intruso- que niño tan listo- Pero quiero que sepas que siempre te quise conocer-
- Lo sé pequeño- me acerqué y me sente a su lado, lo abrace y le bese la cabeza- pronto todo mejorará, ten paciencia-
- Malcom, mamá no me quiere, ella me dijo que pronto estaría viviendo contigo pero que ella no estará, quiero quedarme contigo Malcom- le di un beso en la cabeza -
- Todo se solucionará- le dije y en eso tocaron la puerta de la habitación-
Era Nancy
- Malcom, les traje chocolate- dijo y puso la mesita donde traía los chocolates-
- Gracias Nan, en un momento bajo-
- No te preocupes cariño, quédate con tu hermano, hablaré con el abogado ambos sabemos lo que deseas hacer-
- Así es Nancy, quiero seguir con lo que papá estaba haciendo-
- Mañana hablaré con Carlos, no te preocupes- dijo y salió de la habitación-
- ¿Qué caricatura quieres ver chaparro?- le pregunté
- ¡Los supersónicos!- gritó a lo que se calló cuando se dio cuenta del llanto de la tía Bere-
Estábamos viendo los supersónicos cuando no se en que momento, nos quedamos dormidos.
Estaba caminando por el sendero hacia nuestra casa de vacaciones, flores por todos lados a pesar de ser Junio las olas se escuchaban a lo lejos y el silbido del viento hacia compás con el vacío que sentía en el pecho. Llegué a la casa y era como cuando recién mi papá la estaba contrayendo, completa madera. Abrí la puerta y se escuchó el rechinido de está tal cual película de terror. De repente sentí como una ráfaga de viento soplaba ante mí. Pero se sentía cálido, era como si algo me dijera que todo estará bien aunque no sea así. El rostro de mi padre apareció tras el espejo del pasillo principal, tan hermoso como el día en que lo vi por última vez con vida.
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La Sortija Del Destino
Teen FictionÉl sufría por su amor Su padre murió y con él, el amor Su madre lo dejó y con él se quedó el silencio Él es Malcom Pemberton Él un chico pidiendo ayuda para salir del pozo