cap 15 el día a día.

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en la mansión chimenea hogar de la descendencia de cierto albino, el día de hoy bell jugaba en el patio con su hija renard quien estaba jugando con una pelota.

metería solo podía empujar la pelota frente a ella usando sus dos manos, haruhime que estaba detrás de ella, se aseguraba de que la pelota una vez devuelta por el padre esta no se fuera muy lejos aun que con la delicadeza que usaba bell para devolverla realmente no hacía mucho más que ayudar a su hija a empujar la pelota.

el juego era tranquilo aun que se tenía que tener cuidado con metería ya que debes en cuando esta se resbalaba con la pelota cayendo al suelo asustando a bell quien estaba muy preocupado de que su hija se dañara aun que esta solo se levantaba y reía mostrando una sonrisa a su padre que estaba preocupado.

meteria empujo nuevamente la pelota para seguir jugando con su padre, aun que sus sentidos auditivos hicieron que escuchara el lloro de un bebe de dentro de la mansión, meteria giro su cabeza hacia la mansión un momento, después el lloro del bebe fue más audible escuchándose desde el patio.

una vez que meteria volvió a girar su cabeza para seguir jugando con su padre pero esta se quedo confusa al ver como el llano estaba.

meteria: pa..pa? –señalo a donde bell estaba hace un momento-

haruhime: tranquila pequeña, solo está preocupado por tus hermanos el volverá en unos momentos.

meteria solo gateo hacia la pelota que debió ser atrapada por bell, una vez llego a ella vio a su madre quien solo le sonrió.

haruhime: está bien, yo jugare contigo.

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dentro de la mansión chimenea, en la cocina una elfo estaba alimentando a sus dos bebes o mejor dicho había terminado, ambos de sus bebes estaban en sus brazos aun que su hija lloraba mientras que su hermano era más tranquilo ya que solo miraba a su hermana llorar.

lefiya: ya ya pequeña, no llores.

lefiya intentaba tranquilizar a su hija quien lloraba, aun que apenas conseguía tranquilizar un poco a su hija disminuyendo el volumen de su lloro.

bell: QUE PASA? –dijo algo exaltado-

el albino había llegado a la cocina donde estaba la elfa con sus dos hijos.

lefiya: filvis no para de llorar, y no sé que tiene.

bell se acerco a su hija quien lloraba, tomándola en sus brazos bell cuidadosamente empezó a acariciar su cabello tranquilizándola un poco, filvis empezó a callar su lloro siendo mimada por su padre, filvis empezó a acurrucarse en el pecho de su padre metiendo su cabeza por encima de su hombro.

lefiya estaba un poco celosa de ver como su hija podía usar a su padre como una especie de peluche mientras que ella tenía que esperar su turno para estar a solas con el albino mientras que sus hijos solo tenían que llorar para ser mimados y pasar tiempo con él, mientras que las madres de sus hijos tenían que esperar su turno para estar con él y ser mimadas por este.

bell: creo que ya está, -bell miro a su hija quien paró de llorar- ven creo que tienen que descansar.

bell levanto su mano hacia lefiya, esta tomo la mano del albino y caminando hacia su cuarto, estos al llegar se sentaron encima de la cama para recostar a sus hijos encima de la cama.

mientras que leo fácilmente quedo encima de la cama jugando con la sabana que lo cubría fácilmente, en cambio filvis parecía no querer dejar a su padre ya que cuando bell la quería dejar en la cama esta envolvía sus bracitos en su cuello y se sujetaba fuerte al cuello del albino.

esta mal querer ser un buen padre mientras soy un heroeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora