Somewhere Only We Know (TOH Saga, Libro #5)

16 - Aliados

Narra Damian

Bufo con pesadez pasando mis manos por mi rostro, no podía pegar un ojo con todas las preguntas que se creaban en mi cabeza respecto a la que la versión adolescente de mi padre es un agente malvado del tiempo que borro las memorias de los padres de mis amigos, tiene una misión de espiar a la madre de la chica por la que estoy comenzando a sentir cosas y por si fuera poco, el también porque mi padre no me dijo nada sobre esto, de que era un viajero del tiempo.

Me levanto de la cama con cuidado y procedo a salir de la habitación con cuidado de no despertar a nadie. Bajo las escaleras yendo hacia la cocina por algo de agua cuando me detengo en seco encontrando a Jasmine Alvarez con una taza de café, una pijama que consiste en pantalones de cuadros y una camisa cuatro tallas mas grande que ella, su cabello esta atado en una coleta despeinada, sin una gota de maquillaje pero con una mirada triste y apagada.

Sin querer choco con un banco haciendo que se sobresalte y maldigo por lo bajo, pensaba en irme dejándola sola metida en sus pensamientos. Sus ojos marrones chocan con los mios a lo que me paro derecho y me mira de arriba a abajo.

- Me haz asustado, Damian - dice acomodando un poco su camisa enorme, rasco mi nuca y siento mis mejillas arder.

- Yo lo siento, parece que llegaste primero y te dejo el lugar, no podía dormir y yo... estoy hablando demasiado rápido - digo nervioso, eso hace que suelte una risita y de palmadas en una silla.

- No seas tonto, acércate, sirve lo que quieras y te comparto mis galletas, al parecer ambos estamos en la misma pagina de no poder dormir - dice medio sonriendo, inclino la cabeza aun lado y ella insiste - En serio esta bien que te acerques, no hay problema, puedo compartir contigo - finaliza señalando una silla al lado suyo, me encojo de hombros y me acerco.

- Oreos, genial - digo tomando una galleta, sonríe un tanto victoriosa y parece que por un momento su tristeza se ha ido.

- Son oreos, es obvio que serán genial, espera aquí - dice sacudiendo mi cabello como es costumbre en ella, rió un poco y se levanta mientras sigo sus movimientos en la cocina.

Toma una taza llenándola con algo que creo que es chocolate caliente para luego volver a sentar a mi lado dejando la taza frente a mi y vuelve a despeinar mi cabello haciéndome reír.

- Ahora si es la combinación perfecta, oreos acompañados con una rica taza de chocolate caliente y una cosa especial que tenia con mi mamá hace muchos años - dice sonriendo, me mira y se acerca a mi oído derecho - Shh, no le digas a Max, se ofende - finaliza en un susurro, niego con diversión y alzo mi dedo meñique.

- Lo prometo por la garrita - digo sonriendo, sonríe y levanta su meñique enredándolo con el mio.

- Por la garrita - dice divertida, nos miramos y soltamos una risotada.

No era la primera vez que compartíamos de hecho a veces conversábamos y era muy buena escuchando, dando consejos junto con contar buenas anécdotas para solo hacerme reír porque según ella, desde que me conoció noto que era una persona que casi no reia o sonreia de manera verdadera.

- Entonces, pequitas - dice acomodándose en su lugar, la miro alzando una ceja y aprieto los labios evitando reír.

- En serio, ¿Pequitas? - digo burlón, me saca la lengua y ruedo los ojos.

- Shh, eres pequitas, punto - dice señalándome, me encojo de hombros y tomo una galleta bañándola un poco en mi chocolate para darle un mordisco - ¿Que te trae por aquí? - finaliza carraspeando y se coloca un poco seria.

Noto como la tristeza se asoma de nuevo en ella y no me gustaba ver esas expresiones en ella. Sin duda es una chica muy especial, en la que digo que Alexia es una chica con suerte de tener una maravillosa madre con lo es Jasmine, se nota que es una persona que da mucho amor, se preocupa por los suyos y siempre estará para ti hasta en los momentos mas oscuros de la vida.