I. Prólogo

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❝...Una vez hubo un pequeño niño.

El chiquillo no podía sentirse amado, ni un poco.

Sintió que todo el amor hacia él era falso, inexistente.

O así fue, hasta que conoció a su hermanito...❞

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Kim Rok Soo recuerda lo que pasó...

Recuerda cómo vio morir a todos sus amigos.

Recuerda cómo se convirtió en el nuevo líder de equipo.

Recuerda cómo murió.

También recuerda hablar con un dios o más dioses, pero no puede recordar lo que se dijo en dicha conversación.

Recuerda como todo se torno negro a su alrededor.

Recuerda todo eso y muchas cosas más.

Y ahora, lo único que puede es recordar.

Siente una lágrima caer por su mejilla, seguida de otra, y otra, y otra más.

Trató de no llorar; pero era inevitable.

Su vista era borrosa, y no podía enfocar su mirada para ver lo que estaba sucediendo a su alrededor; pero tenía algo claro, él acababa de renacer.

¿Cómo no tenerlo claro?

Después de todo, podía sentir que su cuerpo era más pequeño que antes; al igual que podía sentir como lo cargaban.

Ese día Kim Rok Soo lloró, lloró de manera alta y hasta más no poder; lo tenía permitido.

Tenía permitido llorar sin que nada o nadie le reprochara, después de todo, era ahora un bebe recién nacido.

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El hombre que una vez se llamo 'Kim Rok Soo', renació en otro mundo; adoptando el nuevo nombre de 'Aleph Henituse'

Justo ahora tiene la edad de 7 años, y las personas del condado Henituse le llaman genio.

Es un pequeño que aprende rápido, y además, tiene buena memoria.

A pesar de su 'corta edad', es bastante serio e indiferente; tampoco lloro ni una sola vez desde que había cumplido 2 años.

Al pequeño no le gusta estudiar, pues ya sabe todo lo que le enseñan; sin embargo, lo hace porque su madre se lo pide.

Prefiere dormir o leer todo el día, pero aún así entrena para al menos poder protegerse a sí mismo.

Ese mismo pequeño, se encontraba justo ahora leyendo un libro sobre distintos idiomas de los reinos; o así era, hasta que una mucama interrumpió su lectura.

La mucama respiraba de manera apresurada, dando a entender que había corrido hasta la biblioteca.

Aleph solo la miro en silencio, antes de hablar en un tono calmado.

The Light in the Void.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora