#13-. Su primera cita

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TOM: Él te había insistido desde hace un tiempo que aceptarás a tener una cita con él, te hiciste la difícil pero ya no pudiste más y le dijiste que sí. Fueron a un conocido restaurante de la ciudad, algo caro y por esa razón tu no querías entrar. Él te convenció y dijo que todo estaba bajo control y que tu solo te divirtieras cosa que hiciste, ya que durante toda su estancia en el lugar no paraste de reír por las acedotas que tu acompañante te contaba. Tom pidió la cuenta, le dio su tarjeta al mesero, pero regreso diciendo que no tenía dinero. "T/N no traigo efectivo, creo que tendremos que lavar platos" dijo él preocupado, pero tu sacaste tu tarjeta y se la diste al mesero. La cuenta se pago y salieron del restaurante. Llegaron a tu casa y Tom estaba muy apenado por haberte hecho pagar "Tom, en verdad esta bien para la próxima invitas tu" "¿Cómo te lo pagaré? Fue una cantidad considerable" Te acercaste a él y le diste un beso en los labios "Con unos cuantos de esos podrías saldar la cuenta" le dijiste, comenzaron a sonreír y volvieron a besarse.

SIVA: Viernes por la noche y tendrías tu primera cita oficial con Siva. Te sugirió vestir semi formal, por lo que te pusiste un hermoso vestido negro hasta las rodillas. Pasó por ti puntual a las 7:30. "Estás hermosa" dijo al verte cuando te encontraste con él en el lobby de tu apartamento. "Gracias - te sonrojaste - Tu también estas muy guapo." Sonrió con autosuficiencia exagerada, logrando sacarte una risa. Te abrió la puerta del coche y cuando ya estuviste adentro corrió hasta su lado. Te llevó a un hermoso lugar, era un restaurante al aire libre, sobre la cima de un edificio, podían ver todo Londres desde ahí. "Que hermoso se ve todo desde aquí..." Siva asintió mientras tomaba su copa. "Sin duda es una muy buena primer cita, no puedo imaginar lo que serán las próximas" "¿Habrán más?" preguntó ansioso. "¡Claro que sí!" respondiste como si eso fuera obvio. "Bien, porque soy una caja de sorpresas" te dedicó esa hermosa sonrisa suya, la cual te dejaba en las nubes cada vez que lo veías. Tomó tu mano y siguieron cenando mientras tenían una agradable charla.

NATHAN: Saliste de tu casa muy nerviosa ya que tendrías una cita con Nathan, era la primera y bueno como cualquier otra chica estabas nerviosa al estar con el chico que te gusta. Nathan y tu acordaron en encontrarse en una paletería, cuando llegaste no lo viste por ningún lado así que pediste un helado y te sentaste en una mesa a esperar, no pasaron más de 5 minutos cuando viste a Nathan llegar, cuando estuvo cerca de ti te saludo con un beso en la mejilla, pidió un helado y se fue a sentar a la mesa. Comenzaron a platicar de cualquier cosa, películas, libros, sus gustos, contaron chistes, en fin te la estabas pasando muy bien a su lado. En un momento de risa Nathan por error se mancho sus labios con helado él no se dio cuenta, empezaste a reírte "¿Por qué te ríes?" pregunto él sin decir nada. Te levantaste de la silla y te acercaste a él. Le limpiaste el helado con una servilleta pero quedo un poco, que se lo limpiaste dándole un beso en la comisura de los labios. Nathan se sonrojo "Creo que no fue bueno hacer eso" dijiste "Claro que si" Nathan se coloco más helado en sus labios y te dijo "¿Crees poder limpiarme, yo no puedo'" comenzaste a reír y se dieron un beso.

JAY: estabas ordenando tu armario, cuando recibiste un mensaje. "Llevamos texteándonos mucho tiempo, ¿por qué no hacemos algo mejor? Paso por ti en una hora" con eso moriste, era obvio que quería una cita, desde que se conocieron iba a ser ¡LA PRIMERA CITA! Gritaste como loca corriendo de un lado a otro. Miraste fijo tu armario y te lanzaste a él sacaste un montón de ropa, te probaste cada una de ellas. Pensaste en ocupar pañuelos en el cabello, cintas y todo tipo de cosas, luego de seguir experimentando con tu look, te maquillaste y saliste, él ya estaba en la puerta y con un gran ramo de rosas. "Hola" te dio un beso en la mejilla. Comenzaron a caminar. "¿Dónde vamos?" le preguntaste ansiosa. "Sorpresa" fue lo único que dijo y siguieron en silencio hasta que llegaron a un parque. "¿Te puedo vendar los ojos?" asentiste y colocó un pañuelo sobre tus ojos. Comenzaron a caminar lentamente, obviamente él te guiaba. "Espérame dos segundos... Ya" te quitaste la venda de los ojos. Había preparado un picnic, todo era detallistamente hermoso y cuidadosamente preparado. Si este hombre era así de dedicado, no podías imaginar más adelante.

MAX: Max y tu habían sido siempre amigos y desde hace unas semanas algo más estaba surgiendo entre ustedes, por lo que no te sorprendió cuando te pidió salir a una cita. "Estuve pensando toda la mañana en algo que ya no hubiéramos hecho" Sonreíste tímidamente. "Pero de pronto pensé, cualquier cosa que hagamos será como nueva, porque las circunstancias son distintas...-estaban llegando al lugar y lo reconociste de inmediato- pero recordé lo bien que lo pasamos cuando vinimos aquí, así que. ¿Qué opinas?" Max te había llevado a una cancha de patinaje. "¡Me encanta Max!" Se bajaron del coche y él te tomó de la mano, se sentía extraño, pero te gustaba. Buscaron los patines y al fin bajaron a la pista. "Bueno, espero no caerme y hacer el ridículo esta vez" reíste al recordar la visita anterior, Max se la había pasado más en el piso que de pie. Anduvieron uno cuantos metros y Max tropezó, por querer ayudarlo terminaste tu también en el piso. "Mala idea el venir aquí..." comentó mientras intentaban ponerse de pie. "Me parece perfecto Max, no importa donde esté, si es contigo será perfecto" se quedó mirándote unos segundos y luego acarició tu rostro. "Eres tan tierna T/Y" te besó. Con un gran esfuerzo lograron ponerse de pie, el resto del día pasó sin mayores percances, pero si con muchos preciados recuerdos.

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