Preferences The Wanted en Español

#95-. Van a la iglesia

TOM: Tu y Tom habían ido por el fin de semana a casa de su abuela. El día sábado se fueron a dormir muy tarde, ya que Tom se reencontró con algunos de sus primos y amigos. "T/N, despierta..." oíste muy a lo lejos la voz de Tom. "¿Qué hora es?" preguntaste sin abrir los ojos. "Las 10... Levántate..." "es temprano Tom , déjame dormir..." giraste en la cama cubriéndote con la sabana. "¡No!, levántate o la abuela vendrá a tirarte de los pies... iremos a misa al medio día" abriste los ojos quitándote la sábana. "Que, ¿qué?" sonrió. "La abuela va cada domingo a misa y si no vamos, se enojará mucho... créeme..." "¿es enserio Tom?" asintió, finalmente te tocó levantarte. Fuiste sin ganas a la ducha y luego bajaste a desayunar. Hacía mucho tiempo que no ibas a la iglesia, quizás por falta de tiempo o porque en realidad no encontraras que fuera necesario ir para estar en paz con dios... La misa ya llevaba unos cuantos minutos, y te habías sorprendido que aún recordabas cuando ponerte de pie o que decir... como era la misa "familiar" habían muchos niños en el lugar. De pronto comenzaron a cantar y Tom comenzó a hacer el loco. "Tom, cállate o nos echarán a todos..." "no pueden echarme de la iglesia... yo sólo estoy cantando" siguió haciéndolo. Hasta se sabía las 'coreografías' que hacían los niños chiquitos con algunas canciones, intentaste no reír pero se te hacía difícil, Tom no dejaba de ser un payaso ni en los momentos más necesarios. "Deberías entrar al coro Thomas..." le habló su abuela cuando iban saliendo. "No sé si le gustaran mucho mis improvisaciones pop en sus canciones abuela..." ella rió, contagiándote a ti también. La verdad es que no imaginabas a Tom en un coro de la iglesia, no cuando sabías la forma en que se comportaba cada día.

SIVA: Mientras Siva y tú caminaban por la ciudad pasaron por una iglesia, por lo regular ustedes no entraban a esos lugares y no por que no creyerán simplemente no consideraban necesario ir a esos lugares. Ese día era un día caluroso así que fueron a un pequeño parque, compraron un helado y se sentaron en el pasto a platicar un poco "¿Sabes qué Seev?" "¿Qué pasa?" "Creo que debería de ir a la Iglesia" le dijiste y dejo de comer su helado "¿Por?" "Hace unos meses tuve un accidente..." "Ni me lo recuerdes" "Creo que debo de ir a... ¿Agradecer?" "Bueno..." "Si no quieres ir tú puedes esperarme aquí prometo que no me tardaré" "No T/N iré contigo" Cuando terminaron de comer su helado fueron directo a la iglesia por la que habían pasado hace unos minutos, entraron tomados de la mano, el lugar estaba en completo silencio y había unas cuantas personas rezando. Los dos tomaron asiento en una de las bancas que estaban casi al principio, se pusieron de rodillas y comenzaron a rezar, Siva estaba muy concentrado. Minutos después ustedes comenzaron a recorrer el lugar "Hola muchachos" les dijo un padre "Buenas tardes" contestaron los dos "¿Vienen a pedir informes?" "¿Informes?" le preguntó Siva "Sí ¿No son ustedes lo que quieren saber sobre los requisitos para una boda?" Siva y tú comenzaron a sonreír "No, no somos nosotros" le dijiste al padre "Lo siento, los confundí" el padre se fue y salieron de la iglesia aún riéndo "Tal vez en un futuro no muy lejano vendríamos a pedir esos informes" te dijo él y lo abrazaste.

NATHAN: Este fin de semana sería la boda de una de tus primas, tenías que ir obligatoriamente además de que era tu prima favorita eras una de las damas de honor. "Ay pero que guapo" le dijiste a Nathan en cuanto llego a tu casa vistiendo un traje "Gracias aunque tu serás la dama de honor más hermosa" te sonrojaste,él comenzó a reírse y te dio un beso "Bueno vámonos que no quiero llegar tarde a la ceremonia y ni debo" lo tomaste de la mano y comenzaste a caminar pero él no lo hizó "¡Nathan se hace tarde!" "T/N creo que yo mejor no voy a la iglesia" "¿Qué?" "Tiene mucho tiempo que noy voy y además esos lugares no son para mí" "Nathan,es un lugar... especial además siempre dicen que la iglesia es un lugar para cualquier persona" "Mejor te veo en la fiesta" lo miraste un poco molesta "Bueno, iré pero lo hago por tí" te dijo y le diste un beso. En una hora ustedes ya estaba en la iglesia, te daba mucha risa como Nathan no sabía que tipo de "ritual" o cosas se decía en una misa, tú tenías que decirle que guardara silencio o en que parte hasta hincarse cuando la ceremonia terminó, Nathan y tú salieron y mientras salía toda la demás gente él te tomo de la mano y te abrazo fuertemente "¿Sabes? Creo que tendremos que venir a misa más seguido" "¿Qué dijiste Nathan?" "Lo que oíste necesito saber eso que se hace en cada misa por que lo necesitaré en un futuro" "¿Te vas a hacer padre o qué?" comenzaron a reírse "Podría ser pero básicamente lo necesito para poder saber que hacer el día de nuestra boda" "Awww Nathan" inmediatamente lo abrazaste y le diste un tierno beso.

JAY: Cuando Jay te contó su historia religiosa no pudiste parar de reír con sólo imaginarlo en su confirmación o en la iglesia cada domingo y todo lo que conllevaba estar en la iglesia. "No te sigas burlando, dejé de ir hace años" "Es que verte a ti, cómo te conozco, en la iglesia, es muy gracioso" "Dime que tú no has entrado a una iglesia, alguna vez" "Sí, pero ya sabes que soy una santa" "Si claro" esta vez él reía. "Piensa lo que quieras, no voy a la iglesia para no contaminar mi pureza". Una vez que fueron de visita en Nottingham, decidió mostrarte el lugar en el que hizo su confirmación. "¿Así que aquí te exorcizaron? -te asesinaba con la mirada– epa, es la casa de Dios, respétala" "Bueno, entonces entremos para que te exorcicen a ti" "¡Jay!" "Shhh..." "Oye y ese milagro que no caminas por el techo" le susurraste y dejó escapar una pequeña risita, se sentaron en un banquillo cerca del altar. "No crees que es tranquilizador estar aquí" "Ok, ¿quién eres y dónde dejaste a Jay?" "Creo que lo tuyo no son las creencias" "Y lo tuyo tampoco, sólo viniste turisteando" "La verdad sí, pero por lo menos no está tan mal" te abrazó. "¿Vendremos más seguido?" sonrió. "¡Shhhh!" miraron hacia atrás una señora los hacía callar.

MAX: Una de tus amigas iba a bautizar a su hija, y te había escogido como madrina desde hace ya mucho, estabas feliz por eso, pero te preocupaba un poco ir a la iglesia. "Hace mucho tiempo que no voy, ¿que le diré al padre cuando me pregunte cuando fue la ultima vez que me confesé?" hablabas con Max una mañana, pues al otro día te tocaba ir a confesarte, era un requisito de la ceremonia. "Pues dile que hace mucho, porque eres una pecadora" abriste los boca exageradamente, tomaste una almohada y comenzaste a pegarle con esta. Max de inmediato tomó otra y te siguió el juego. "Bien, ¡me rindo!" te dejaste caer en la cama cansadísima, Max se puso sobre ti. "Acompáñame... ¿si?" lo atrajiste a ti y lo besaste. "No lo creo..." "Anda, acompáñame, no seas malo..." rodeó los ojos, inmediatamente sabías que había cedido, iría contigo. Se vistieron y fueron a tomar desayuno, tenías 'cita' a las 4 de la tarde así que nada los apuraba. Cuando tu turno llegó comenzaste a entrar en pánico, tal cual lo habías hecho la última y única vez que te habías confesado. "Tranquila..." te dijo Max tomándote de la mano. "Entra tú entonces... esto no me gusta, ¿por qué tengo que contarles las cosas que hago o dejo de hacer a un extraño? Aparte tu no me lo haces nada fácil... me haces hacer cosas que - se abrió la puerta y te callaste, el padre te llamó- Ya regreso..." le dijiste poniéndote de pie. "Ok, me quedaré por aquí..." Se sentó en una de las bancas, frente al altar, entraste con el cura... saliste después de unos minutos, después de todo no fue tan complicado. "¿Y usted?" el padre le habló a Max. "No, yo no soy el padrino..." medio sonrió, lo notaste, estaba nervioso. "No le pregunté si lo era... ¿no va a confesarse?" Max te miró. "Anda Max, no es nada del otro mundo..." dijiste en tono de broma. Estabas segura que si no fuera por la presencia del padre, te hubiera dado una mirada asesina... No le quedó de otra que obedecer, casi dejaste escapar una risita, pero gracias a dios, literalmente gracias a dios, recordaste de donde te encontrabas.