Lobo rosa

Capitulo 2 - Un panda atrevido

Capitulo 2
Llegamos al hotel, el cuarto que alquila es algo pequeño, tiene un olor a lavanda, hay un baño privado, una cama, una cómoda, una mesa, sobre ella están una toalla y un pequeño jabón, por último una silla a lado de la cama. La cama tiene un edredón color carmesí y un par de almohadas.
Dejo la mochila que traía en la mesa, nos sentamos en la cama uno al lado del otro, el me ofrece su mano para que la agarre, en un momento el me da un beso en la mejilla, me llegó a asustar un pico;
- Perdón, te asusté?
- No te preocupes, solo me sorprendió solo eso
- Podrías darme uno a mi -lo dice mientras gira la cabeza dejando de fácil acceso su mejilla.
Yo me acerco para besarle, luego me pide otro, esta vez me acerco más lento, cuando estoy or llegar a su mejilla el gira el rostro para quedarnos viendo de frente, me muestra una sonrisa, nos quedamos un rato así hasta que el me da el beso, mi primer beso.
Después saco de mi mochila un portafolio, con todos los dibujos que traje para mostrarle, el se admira al verlos;
- Tienes talento para esto!!
- Gracias
- Aunque se ven como que gays
- Como así?! -pregunto con algo de curiosidad por su comentario-
- Lo digo por las facciones en los rostros de los personajes, dan esa sensación.
Dejamos el portafolios sobre la mesa, el se dirige a la cama y se recuesta, me invita a recostarme a su lado, lo hago, estamos de lado viéndonos de frente, y otra vez nos besamos, siente bien, sentir los labios de alguien, como me dejo guiar por él para este acto, en un momento me empieza acariciar el abdomen, eso me genera una sensación placentera y no puedo evitar soltar unos pequeños gemidos.
Después de un rato así le pregunto;
- Lo estoy haciendo bien?
- Porque preguntas eso? -respondo-
- Es que nunca bese a alguien antes -digo temeroso-
- Pues ahora lo estás haciendo conmigo
Seguimos con el beso hasta que en un momento dado me levanto, se siente bien, pero no es algo a lo que esté acostumbrado y necesito un respiro, además aún tengo algo de miedo, tomo un respiro. El me vuelve a invitar a recostarme a su lado, en esta ocasión nos abrazamos en cucharita, cuando él empieza a hacerme cosquillas, no aguanto y me pongo a reír, esto es muy cómodo, me agrada este acto de él.
Al rato me volteo para verlo de frente otra vez, y nos volvemos a besar, un beso largo y apasionado, sentir está calidez es gratificante, se siente tan bien esto, empiezo a desear más.