Capitulo 5

6 0 0
                                    

Capitulo 5
Pasa los días conversando con el por WhatsApp, un día llega un mensaje distinto, el dice que se tendrá que ir a otra ciudad por trabajo, yo le pido si podemos hacerlo otra vez, el acepta, nos vemos el viernes de la misma semana.
Ese día, espero en donde me deja el transporte, el llega, es de noche y la verdad no estoy seguro, no me gustaría llegar tarde a mi casa;
- Hola, ¿Cómo estás?
- Hola, estoy bien y tu ~respondo con voz algo preocupa~
- Te preocupa algo?
- La verdad si, es tarde y no quiero regresar tarde a casa.
Nos damos unas vueltas por las cuadras, el logra convencerme de que no tardaremos, al final acepto, regresamos a la avenida principal y tomamos un taxi para ir al hotel.
Ya en el cuarto el me pregunta algo
- ¿Me podrías esperar a que regrese?
- No se, si no tardas mucho si -respondo-
- Pero que!! -dice el algo atónito-
La conversación no sigue y continuamos con lo nuestro, terminamos, salimos del hotel tomamos un taxi para regresar, en el trayecto le muestro unas canciones que acababa de encontrar.
Nos despedimos, yo me apresuró a tomar el autobús de regreso a mi casa, pienso otra vez, ¿Esta bien todo esto? ¿Enserio estoy bien?
Llega el día en el que se va, me despido de él por chat, me pregunto ¿Si volverá? ¿Vale la pena esperar por él? Digo, ahora estoy libre, puedo hacer cualquier cosa, tal vez unos encuentros como quería inicialmente, no estaría mal, no somos nada, y no le prometí nada.
Pasan los días, estuve hablando con un chico, quiere un encuentro fugaz conmigo, al inicio no acepte, pero luego pensé que no tendría nada de malo y acepto. Justo esa día despierto a media noche, no suele pasarme eso, veo mi móvil, reviso si Cucho está en línea, si lo está, le envío un mensaje:
- Porque estás despierto tan tarde?
- Llamada entrante – contesto –
- Hola, que tal?
- Como que “que tal”? Es tarde, que haces despierto? – me dice con tono de regaño –
- Me pregunto lo mismo – le sigo el juego – es que me desperté
- Oh bueno, no es tan bueno ello.
- Si, es la primera vez, por cierto, como te va?
- Bien, el trabajo algo pesado, pero ya estoy acostumbrado.
- Que bueno que esté todo bien.
- Oye, podemos hablar así una vez a la semana, por las noches?
- Si claro
Nuestra conversación dura media hora, está llamada me hace algo feliz, mi gusto oír su voz otra vez, además lo haremos cada semana.

Lobo rosaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora