Tardes de Pastel con fresas y Café [BakuTodo]

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El día había llegado a su fin, nada había cambiado. Algunos arrestos, firmar unos cuantos autógrafos y una que otra entrevista. Un típico día más. Durante los últimos dos años tal monotonía seguía inalterable. Extrañar sus primeros años como héroe novato se convirtió en algo inevitable, ¿Cómo no podría echar de menos todas aquellas emociones y el vaivén de adrenalina recorrer su cuerpo?, sus primeros arrestos, la satisfacción del demostrar su destreza y mandar volar a todo bastardo que pudiera. Todo ello ahora se sentía tan lejano, como si hubieran pasado años desde esos días donde encontraba alegría incluso en dar un pequeño consejo.

Siempre fue su más grande meta convertirse en el héroe n°1, superar al llamado "Símbolo de la Paz", sin embargo, nunca pensó que hacer cuando alcanzara tal objetivo.

Mientras se encontraba quitándose su traje de héroe, pensó en algunos de los héroes con los cuales habitualmente coincidía durante las patrullas. Todos ellos poseían un motivo para haberse querido convertir en héroes; dinero, familia, algún ser querido, fama, cualquier motivo era suficiente para darles un motivo con el cual salir y arriesgar su vida. Si lo pensaba, siempre tuvo como motivación superar a All Might y demostrar ser mucho mejor héroe que su estúpido amigo de la infancia, más nunca contemplo cuál sería su próximo objetivo. Vivía atrapado en una monotonía que nunca supo cuando comenzó a envolver sus días.

Irritado, opto por salir a dar una vuelta, tenía demasiado en su cabeza como para siquiera poder mirar la televisión. Mientras caminaba hacia la puerta, se quedó mirando un viejo portarretrato colgado en la pared, en él estaba retratado junto a varios de sus compañeros frente al dormitorio que fue su hogar por casi tres años. En aquel tiempo realmente le resultaba irritante convivir con tanta gente, pero, de alguna forma, encontró como disfrutar todo el alboroto que día a día había hasta altas horas de la noche. Suspirando, termino por ponerse sus tenis para dar algunas vueltas por el vecindario.

Tomándose su tiempo, Bakugo decidió ir un poco más lejos de su vecindario para ver si encontraba alguna tienda en donde pudiera comprar algo de cenar. Ese día no se encontraba con suficiente paciencia para cocinar algo. Habiendo terminado temprano sus patrullas, no le debería ser muy difícil encontrar un sitio que estuviera abierto. Pasando frente a dos cafeterías y un restaurante, ninguno logro persuadirlo de entrar.

Una poseía buen café, más sus comidas no poseían gran sabor. La otra ofrecía buenas comidas, pero sus bebidas apenas podían ser consideradas como tal. El último no se destacaba en nada.

Una opción era ingresar a ambas cafeterías y comprar comida en una y bebida en otra, más su intención era poder tener todo de un mismo sitio y poder irse a casa. ¿Era mucho pedir un buen lugar donde tener una buena cena y bebida decente?, en esos momentos si parecía estar siendo exigente. Andando un poco más, su paciencia estaba por agotarse, si en los próximos diez minutos no encontraba otro restaurante, compraría la primera comida que viera en la tienda de conveniencia.

Llegando al penúltimo minuto de su caminata, al doblar una esquina, unas chicas pasaron a su costado sumergidas en una animada platica sobre la gran cena que había tenido, incluso ambas llevaban consigo bolsas con algunos postres. Interesado, Bakugo camino por aquella vereda hasta ubicar una cafetería que no recordaba haber visto antes.

Una amplia terraza se extendía bajo un techo de cristal sostenido por vigas de madera. Seis juegos de mesa se hallaban meticulosamente ordenadas; tres a la derecha, una larga al a izquierda y dos pequeñas al frente del local. Todo rodeado por arbustos adornados por flores de diversos tonos pasteles. Largas secciones de fotos recorrían las vigas ofreciendo luz. Aproximándose, observo un tablón escrito a mano con lo que seguramente debía ser el menú. Tan pronto llego al final su expresión se tornó en una irritada. "Deku's lemon Shaved Ice". Repentinamente un tintineo interrumpió el grito que estuvo a poco de emerger de sus labios.