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Simple era su petición, poseía libertad para ser más exigente, nadie le reprocharía ni lo molestaría por ello. Él, apodado el "Símbolo de la Paz", estaba en su total derecho a ser caprichoso, desde su infancia siempre creció siendo alguien admirado, fue bendecido con un quirk poderoso y dotado con grandes habilidades, pero, por alguna razón, parecía estar luchando por no dejarse llevar. Su propuesta inicial surgió de una confusa impulsividad, las respuestas que por costumbre llegaban velozmente parecieron quedarse en algún recóndito lugar de su mente—. Quiero comer una rebanada de pastel de fresas y café... —pedir aquello podía lucir como una mera humilde recompensa, como héroe simplemente negarse a recibir cualquier retribución por haber efectuado un servicio en momento de crisis hubiera sido una elección sensata, no obstante, ello significaría romper un algo que deseaba tomara forma.

Siendo quien era, los medios constantemente jugaban con su imagen, intentar desmentir cualquier rumor resulto una tarea que Bakugo poco tardo en dar por perdida, seguir el juego en ocasiones resultaba ser más fácil y menos problemático. Como alguien a quien su vida privada prefería mantenerla en riguroso secreto, en los medios se empezaron a efectuar teorías sobre cuales podrían ser su tipo ideal de chica, el cómo sería salir con él o cuales comportamientos tendría con su novia; muchas incluso llegaban a puntos donde sus fantasías se entremezclaban con sus realidades. Si bien dichas situaciones por momentos resultaban problemáticas, Bakugo siempre lograba que sus propias seguidoras lo librarse de tales situaciones. Si pensaba en ello, ahora podía encontrar divertido que nadie acertara. En diversas publicaciones y medios pudo escuchar cómo la gente decía que su tipo de chica ideal sería una de aspecto tierno, pero con cierta elegancia.

Cierto podía ser que gustaba de un aspecto tierno y la elegancia no salía sobrando, sin embargo, quizás lo divertido podría estar en que todo ello solo estaba presente en una persona, y ese era el chico de cabellos duales que estaba luchando contra un enorme agotamiento—. Será mejor que te vayas a descansar —comento—. No ha debido ser normal para ti tener que lidiar con tanta gente —apoyándose sobre una de sus rodillas, Bakugo pudo darse cuenta que el chico frente a él ya daba signos de haberse quedado dormido. Con algo de duda, paso uno de sus brazos por debajo de las piernas y sujeto la espalda de Shouto y lo alzo cuidadosamente. Yendo hacia la cafetería lo recostó en una de mesas con sillón procurando dejarlo en una posición lo más cómoda posible. Recostándose en el asiento siguiente, su vista se mantuvo sobre la dormida figura a su lado, teniendo tiempo para reflexionar Bakugo inicio por meditar las impulsivas acciones de su corazón, aunque los motivos no le eran del todo claros y sus sentimientos tampoco parecían del todo definidos, era innegable que existía algo en Shouto que despertaba más de una emoción en él, sin embargo, sin poder conocer más de lo que el propio Shouto le permitiera su única opción viable era intentar establecer su presencia en la vida de alguien a quien la palabra "Héroe" parecía poseer un significado diferente al de la mayoría.

—Mi duele todo —fueron estas las palabras con las cuales todos despertaron, la luz ingresaba por entre las cortinas mal cerradas de los ventanales. Dándose su tiempo para despertarse uno a uno fue sintiendo los dolores musculares propios de las malas posiciones que inconscientemente eligieron para dormir. Mientras continuaban medio dormidos el sonar de la campana hizo despertar a Bakugo—. ¿Qué no vio el jodido cartel de "CERRADO"? —pregunto irritado, para cuando su vista se aclaró se sorprendió por ver a una de sus antiguas compañeras de clase, Yaoyorozu Momo—. ¿Qué demonios haces tú aquí?

—¿Bakugo-san? —la azabache se veía claramente sorprendida por ver al compañero que menos pensaba ver en una cafetería como aquella, y tal emoción pareció incrementarse cuando se dio cuenta que había más de sus compañeros héroes en el lugar—. ¿Por qué están todos ustedes aquí?

—Ayudamos con una jodida crisis —respondió Bakugo mirando con irritación a la recién llegada que muy seguramente tenía algo importante que decir.

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⏰ Última actualización: Jun 11, 2024 ⏰

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Tardes de Pastel con fresas y Café [BakuTodo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora