Capitulo 10

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María.

Poco a poco volvía a recobrar el conocimiento, sentía que todo me daba vueltas y un fuerte dolor punzante en ella.

Aún más me asusté en dónde está, era una habitación que nunca antes había visto, traía puesto un uniforme de color azul.

La puerta se abrió y por ella entro una enfermera.

—Señorita en dónde estoy?-Dije algo desorientada.

—Usted está en el Centro Psiquiátrico San Rafael.-Contesta amablemente.

—Que? Pero si yo estoy bien, no tengo nada.-Contesto aún algo aturdida por el fuerte dolor de cabeza.

—Mmmm no señorita en su expediente marca que usted padece de un trastorno depresivo y ansiedad, incluso tentó contra su vida.- Dice mirando unos papeles en una tabla que tenía en sus manos.

—No señorita usted se equivoca debe ayudarme a salir, quien me trajo?.Comencé asustarme.

—No puedo proporcionarle esa información y si no se tranquiliza tendré que ponerle un calmante.-Dice algo molesta.

—No, no, ya me calmare.-Me recuesto mirando hacia el techo.

Solo espero que el chino le cuente todo a Vicente para que me saque de aquí por que al menos con mi padre no cuento en este momento.

En casa de los Zambada.

Patron la señorita Elena está bien, todo lo que le dijeron es mentira.-Pronuncia el chino.

—Yo le creo a mi ahijado, no me vengas tu con pendejadas y de esto ninguna palabra a Vicente, lo tengo ocupado con unos negocios en Colombia que ahorita no lo quiero aquí.-Contesta el mayo.

—Lo dejo a su criterio, pero de mi se acordará cuando vea que todo lo que dijo María es verdad, puedo retirarme.-Dice serio el chino.

Vete, tampoco ninguna palabra de esto ni a serafín ni Ismael.-Finaliza, sentándose en su escritorio, revisando unos papeles restándole importancia a la presencia del chino.

Rodrigo Aréchiga Chino.

Tengo que investigar a dónde se llevaron a Elena. Ella es la indicada para hablar con su padre por qué yo le creo a todo lo que me dijo y nunca me ha dado confianza ese vato del Ernesto.

Intenté contactar a Vicente pero nunca me contestó, se que por esto me podría meter en problemas con Don mayo, pero espero después vea que no me equivocaba.

Salí de aquella casa, a lo lejos mire que algo reflejaba el sol me acerque y era un teléfono estaba un poco estrellado de la pantalla debió caerse, lo encendí y era el teléfono de María, subí a mi camioneta solo, deje el teléfono de María en la guantera y tome mi teléfono, empecé a marcar a un compa que trabaja para el Ernesto, debe saber donde está María. Teclee el nombre en la lista de contacto y llame, sonaba hasta que contesto.

—Que paso compa, cómo está?-Tome iniciativa algo nervioso de lo que fueran a decirme, jugando con las llaves de mi camioneta.

—Excelente día compa bien, bien y usted viejo?-Contesto el.

—Bien trabajando, no queda de otra, quería preguntarle algo y pues por la amistad que tenemos espero me diga la verdad.-Hable un poco más serio.

—Claro viejon que pasa?-Contesto algo preocupado.

—Ocupo saber a dónde se llevó el Ernesto a la señorita María.-En cuánto pregunté eso un gran silencio se escuchó, decidí proseguir.- Lo que sepas será importante.

—Mira Chino la verdad exactamente no lo sé, por qué el patrón ha andado algo raro y es información que a nosotros no nos da, pero por ahí escuché el rumor hace rato que llegaron los que lo andan escoltando que se había llevado a la señorita María a un tipo loquero o algo así..

—A una clínica Psiquiátrica? Mire viejo le encargó si sabe algo más me avise, necesito encontrar a la señorita María, solo le pido discreción por fa.

—Dejame ver qué más puedo investigar, pero no creo servirte de mucha ayuda y no hay pedo no diré nada.

—Ora ya estás Rubio, me marcas a cualquier hora que sea no importa, nos vemos. -Cuelgo la llamada.

Encendí la camioneta directo a unos mandados que me encargaron, el celular de Elena aún enciende pero presiento que no aguantará mucho ya que en la pantalla se ven demasiadas rayas.

Después de un rato mi teléfono volvió a sonar, lo tome y en la pantalla observe que era el Vicente así que le contesté.

—Que rollo chino, solo para avisarte que ya no llegaré hoy si no hasta la próxima semana, ya está enterado mi apa.-Menciona.

—A si está bien, no te preocupes. Me avisas cualquier cosa.-Contesto.

—Ora cabron, cómo está María? Le he enviado mensajes y no le llegan...

—Ammm fíjate lo que pasa chino es que andaba montando a caballo y se le cayó su teléfono, bueno ya sabrás lo que pasó el chiste es que quedó inservible.-Conteste, este wey no le dirán nada y por el momento hasta no tener noticias de María tengo que apurarme.

—Con razón, no estás ahí con ella, hoy toca que la fuera a ver mi apa...

—Ah no la he visto, eso me lo conto tu papá no más y ya.

—Bueno, le compras un nuevo teléfono ya sabes el más nuevecito.-Menciona Vicente.

—Sii no hay pedo compa, oiga usted la quiere un chingo verdad.-Le digo.

—Nombre yo la amo esa morrita, no más que regrese se lo confesaré así en persona y me la voy a llevar conmigo, bueno claro si ella quiere.-Dice emocionado.

—Me parece bien compa, es una buena muchacha y se ve que igual siente lo mismo por usted, bueno lo dejo su apa me mandó a unos encargados.-Intento corta la conversación.

—Sale chino nos vemos la próxima semana.-Se despide.

—Va cabron, cuídate.-Cuelgo.

Vicente va hacer un desmadre en cuanto se entere por todo lo que paso y no se por que tengo el presentimiento que no le perdonara a su padre a verle echo caso al Ernesto y no a María.






UNA DISCULPA POR A VERME AUSENTADO PERO ESTUDIO POR CUATRIMESTRE Y TENIA PERIODO DE EVALUACIONES. 

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"La Mujer De Mi Vida" [Vicente Zambada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora