capítulo 4

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Las miradas entre ellos dos, pusieron incómodo a Jungkook y aún más cuando se presentó como su esposo, y la cara de Jimin de disgusto fue muy evidente.
Parecía otra persona completamente diferente de la cual él se había enamoró, las sonrisas y miradas cómplices hacia Taemin eran demasiado notorias, pero lamentablemente no le quedó otra que permanecer allí hasta que todo acabara.

Dos días habían pasado del reencuentro de aquella noche, y a pesar de confiarle a sus amigos lo mal que se venía sintiendo, la manera de actuar de Jimin cada día lo alejaba más de él.

- Suga: no digo que sea fácil lo que nos acabas de contar, pero debes tratar de comprender que a Jimin también no le está siendo fácil. Tú conoces a Jimin, sus gustos, lo que le gusta comer, la música, donde ir, trata de ver como puedes hacerle notar eso.

- Jungkook: actuaba tan diferente al que conocí. Esa noche que salimos el parecía el novio de Taemin y no mí esposo. Siento que lo estoy perdiendo de a poco, y que ya nunca volverá a ser nada como antes.

- Jhope: no digas eso por favor, no pierdas la fe, tiempo mí querido amigo.
Dale tiempo y pronto todo volverá a ser como cuando lo conociste.

- Jungkook: lo intentaré, y gracias por ser mis pilares, no se que haría sin ustedes cinco.

- Jin: solo piensa en positivo y déjalo fluir.

Mientras tanto Jimin paseaba por el centro de Seúl, recordando donde Taemin trabajaba, decidido lo fue a visitar.
Al llegar al edificio y pasando por el lado de sus secretarias, sin que éstas lo pudiesen anunciar, directamente a la oficina de él se dirigio.
Tal fue la sorpresa que Taemin se llevó al verlo allí, que dejando de hacer lo que lo tenía ocupado, mirándolo y esbozando una sonrisa lo invitó a sentarse al frente suyo.

- Taemin: ¡hola!

- Jimin: hola - con dulzura y mirándolo con un brillo especial en sus ojos.
Recuerdas aquella noche en la cabaña, que me dijiste que me apoyarías sin importar que.

- Taemin: sentados y abrazados luego de hacer el amor, frente a la fogata, como olvidarlo.

- Jimin- si esa misma noche, pero...necesito que me digas que pasó entre nosotros.

- Taemin: solo tú puedes dejar a un novio y luego pedir explicaciones.

- Jimin: entonces...fui yo quien terminó nuestra relación?

- Taemin: de manera cruel y despiadada. Terminaste todo, dos días antes de nuestra boda.

- Jimin: ¿por qué?

- Taemin: lo mismo me pregunté por años yo. Mí familia y amigos, no comprendían nada y yo mucho menos.

- Jimin: no puede ser, tiene que haber una razón, dime que te dije, alguna explicación debo haber dado.

- Taemin: Jimin, tú cambiaste de la noche a la mañana. De repente no querías estudiar más arquitectura, algo te había pasado, porque hasta te vestias distinto, y a mí ya no me amabas.

- Jimin: ¿te devolví el anillo?

- Taemin: así es y nadie por el momento le he dado uno, a pesar que hace dos años estoy de novio.
No podía esperar a que cambiaras de opinión, yo siempre te amé Jimin.

- Jimin: podrías haber esperado un tiempo más, ya ves estoy aquí porque la verdad la necesitaba saber.
Es mejor que me vaya y te deje continuar con tú trabajo.

Luego de ponerse de pie lo abrazó, y mientras se iban separando lentamente sus labios se unieron en un dulce beso, lleno de recuerdos vividos.

- Taemin: lo siento, no debí hacerlo.
- aún con sus manos en su cintura y mirándolo a los ojos.
Es que...tampoco esperaba eso.

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