El Diablo SHOWKI/CHANGKI

°Cuarto Deseo°

Un lago precioso se entonaba ante mi vista, él había cumplido mi deseo, un día soleado y fresco de ensueño acompañado de una manta de cuadros rojos y blancos repleta de fruta fresca, comida, bebidas y pasteles que se veían deliciosos, y girando mi cabeza justo a mi lado un hombre espectacular que 5 años de mi vida me había robado suspiros, sentimientos y sueños húmedos, simplemente ROMANTICO, pero... Por supuesto que había un pero, ya todos esos sentimientos por el habían desaparecido.

Lo acepto Son Hyunwoo era capaz de enloquecer a cualquiera, solo bastaba con medio mirarlo, más de 1.80 de estatura, delgado pero puro músculos duros y bien formados, varonil en su máximo esplendor y aunque no se lo propusiera encantador con esa mirada y sonrisa cálida, al fin y al cabo desde el día uno que lo vi hasta hace un mes estaba empeñado en quedarme con él, en aprovechar la oportunidad que se me había brindado.

Pero él jodido demonio se encargó no solo de abrirme los ojos ante la situación de mierda que vivía con mis supuestos amigos y con el que yo consideraba que era el amor de mi vida, sino en enamorarme hasta la medula con su mirada y sonrisa descarada, con esos cambios de personalidad que me cagaban pero que extrañaba de él, con su forma peculiar de joderme cada deseo para que abra los ojos y por una puñetera vez entienda que todo acto trae consecuencias, que el amor y afecto de las personas no los podemos obligar o someter, simplemente hay que ganarlos y cuidarlos como tesoros, pero sobre todo me enseñó a amarme y valorarme a mí mismo algo que jodidamente me faltaba por montones y que él, Im Changkyun, me regalo a punta de besos y ese temperamento tan de mierda que tenía, que me encantaba.. Porque yo tenía uno igual y que peculiarmente solo salía a la vista con él.

-Disculpa Kihyun, pero aun no comprendo que hacemos aquí y que es todo esto- Dice Hyunwoo a mi lado en forma interrogativa. Le había enviado un mensaje diciéndole que si me regalaba media hora de su tiempo saliendo de la universidad y dándole la ubicación de donde nos encontrábamos ahora mismo.

-Solo es algo que debo confesar Hyunwoo y por favor solo déjame hablar y después haces o dices lo que te apetezca, ahhh y todo esto- hice un gesto con mis manos exagerado tratando de señalar todo lo que IM había preparado para nosotros.- fue idea de un amigo para ayudarme, pero él es así un poco apasionado con cada tarea que se propone- Dios se me revolvió el estómago, extrañaba a Changkyun.

-Hace 5 años aproximadamente choque contigo entrando a toda prisa por el pasillo que debía tomar para poder llegar a mí primera clase del día y oh wow pensé que habías salido de una revista de deportes o algo así y desde entonces Hyunwoo hasta hace un mes eh suspirado y soñado contigo, enamorado solo y en silencio, añorando como un tonto adolescente una mirada o una atención de tu parte. Pero 5 años han sido superados en un mes, solo basto una persona y un mes para hacerme entender que no podía dejar que estos sentimientos me consumieran y más si no eran correspondidos, tenía que aprender aquello del amor propio y punto.-

Hyunwoo se espabilo por supuesto que estaba sorprendido, yo también lo estaría en su lugar.

-Ohhh Ki no sé qué decir, no tenía idea de verdad. Eres guapo, inteligente y realmente fascinante pero lo siento tienes razón no puedo corresponderte. Ya sabes eso de que en el corazón no se manda y el mío está empeñado en alguien que me la ha puesto difícil pero no eres tú-

-Tranquilo- sonreí, aliviado de haber soltado todo esto y que Hyunwoo me dijera la verdad en la cara, no me amaba y lo mejor no me dolía no me importaba. Ya no. – Lo menos que quiero es que se haga incomodo Hyun, bueno ya casi terminamos la universidad así que probablemente no nos veremos más pero de verdad solo quería soltar ese peso y ser franco contigo, me lo debía-

-Ven acá- Hyunwoo me estrecho contra él en un abrazo cálido y amistoso, nada más había, esa era su naturaleza amable sensible, pero los PEROS no dejaban de llegar a en esta no cita... Jodida vida.

-Es mejor que apartes tus manos de él sino quieres quedar sin tus preciados brazos-

Y ahí estaba esa boca descarada...