Entre Tinta, Teclado Y Una Mente rota

Remanente Bi-color

     En el pasaje al abismo se pierden los colores, todo lo que por concepto era. Domina en el reino de los cobardes el color blanco, luz de la salida y del borde iluminado que te guía al final... Y el negro monocromático del abismo, es todo lo que rodea. Te limita a dos colores Blanco y Negro.

     Esa es la razón por la cual me visto mayormente con esos colores, lo único que vi en en aquel paraje desolado, y en mi memoria estaba el pelaje de un ser que me acompaño durante mi estadía y ausencia entre la nada.  

- Ahora lo extraño, pero eso es irrelevante por ahora -

En esos mismos colores se pintan los sueños, recuerdos y pensamientos, de esos dos años en los que estuve no tan perdido, pero si desconcertado en mi mente. En esos mismos colores esta el simbolo Yin-Yang con el que tanto te representas, también curiosamente resultan ser las dos libretas en las que tarde o temprano - aunque al tiempo esto le de igual - terminaras por leer, o llegado al caso la copia en la pantalla

Acepto tu egoísmo, aun así la promesa de no irme será rota, ahora puedo hacerlo ya que logre mi objetivo

     ¿Dije alguna vez, que tarde o temprano la gente suele alejarse de mi?. Disculpa, por primera vez daré la razón del ¿porque?
Cuando llega el aprecio, y aparece una mejor fuente de felicidad, me vuelvo obsoleto, inútil y un lastre para el progreso. Provoco el odio, hacia mi ser y recuerdo con el único motivo de poder marcharme, siempre funciona, solo quede el olvido. Escucho con cautela, observo los detalles de cada cosa que detestan y lo aplico, solo porque, al final de las circunstancias, siempre le he querido a esa persona, lo suficiente como para saber cuando alejarla de mi y que procure no volver mas...

- perdonen ustedes tres, damiselas -

     Funciono en todos los casos, espero solo triunfos y progreso en sus vidas, recordando como olvidarme, quizá aborreciendo la imagen y palabras escuálidas. Pero recordando que estuve allí.

Señorita de mis sueños sin sentido
Permita que el dueño este rollo
Malgastado por el peso del olvido
Y grabado con amor, eso y un poco de embrollo
Se queme en el fuego desvivido 
Alimentado por el remanente Bicolor.