Las marcas de un corazón(versión en español)✅

La Morena

Hola gente, ¿cómo estáis? ¡Espero que estéis bien! Bueno entramos en la segunda fase de la historia... y sí es shortfic y pronto se acabará. Es un placer escribir esta historia que está siendo muy diferente. A partir de ahora nuestra historia toma otro rumbo, el vídeo del final del capítulo es un spoiler de lo que está por venir.....

Dionisio se quedó mirando y la morena, era una profesora del colegio de su hija, intentó acercarse, pero no pudo. El horario de salida de los alumnos mayores era diferente al de los menores, por lo que el ajetreo en el pasillo de la escuela le impidió entrar en el estudio, y la vio coger una bolsa y salir de la habitación por el otro lado. Caminó hasta el lugar donde su hija se paró al salir de la clase, allí muchos alumnos corrían y jugaban esperando a sus padres.

El local estaba lleno de niños, sonrió cuando Leyla salió con la clase de Dinorah, la niña en cuanto vio a su padre corrió a su regazo.

- Hola cariño, papá está aquí para recogerte.

- Hice ballet... -dijo sosteniendo la cara de su padre.

- Eres la bailarina de papá. - afirma y le besa la cara. - Vamos a casa, hoy tu Dada vuelve de un viaje.

- ¿Dada viene a ver a Didi?

- Sí, ya viene, ¿vamos a casa?

- No, deja que Didi se vaya. - la chica empieza a forcejear en el regazo de Dionisio, quería tirarse al suelo, él la soltó y la vio correr hacia el otro lado.

- Dinorah no tiene hija. - la llamó y fue en vano, la chica corrió hacia donde había alguien a quien quería abrazar.

Dionisio vio a su hija dirigirse hacia un grupo de profesores, cuando la morena cogió a la pequeña en brazos se detuvo, respiró profundamente, era ella, era su morena. Caminó lentamente hasta acercarse, Clarisse lo vio venir y sonrió.

- ¿Quieres escuchar mi corazón, pequeña? - preguntó Cris sonriendo con Dinorah en brazos.

- Sí, el canta a mi. - dijo la niña.

- Siempre dice eso, que mi corazón canta. - Cris habló sin mirar atrás, la escuchó y sintió una calma en su alma en ese momento.

- Hija, ven con papá. - dice detrás de Cristina, que se gira y le mira. - Hola, soy Dionisio, padre de esta niña traviesa, ven aquí, mi amor.

- Hola, soy Cristina, a esta joven le gusta mi regazo...

- Cristina, nuestra hada tranquilizadora para estos niños. - dijo Clarisse.

- Escucha papá, aquí oh, haz tum - tum y canta.

- Llegó a casa diciendo que, entendí, lo contó y no cantó. - estaba realmente encantado con la morena que les sonreía.

- Cris, fuiste la profesora que calmó a Dinorah cuando llegó aquí.

- Muchas gracias por hacer eso, mi chica es un poco genio... - no terminó su frase. Dinorah se acurruca en el regazo de Cris y cierra los ojos. - Dormirá en tu regazo, puedes dármela.

- Déjala, me gusta cuando se queda así, dice que mi corazón canta. Si no te importa, por supuesto, puedo llevarla a tu coche.

- Es pesada... - Sólo hablaban entre ellos, sin preocuparse de los demás presentes, y Clarisse se dio cuenta y sonriendo se fue al otro lado junto con los demás profesores a los que les encantó la idea de Chris, por primera vez desde que la conocían mostraba interés por alguien.

Dionisio le cedió el paso y señaló hacia su coche. Caminó lentamente hacia el aparcamiento y cada vez que podía le miraba de forma diferente, era una sensación de que le conocía.

Cristina caminaba y él la seguía, el corazón de Dionisio se aceleraba, podía verla completamente, era hermosa, se veía serena, su hija en su regazo lo hacía estar más tranquilo, la niña no era así con nadie, pero con la morena hasta dormía en su regazo, aún con la agitación y los gritos del lugar donde estaban.

- Mi coche es ese negro. - señaló y la vio sonreír y comprendió. - Realmente, casi todos son negros.

Le puso la mano en la espalda para guiarla hacia el lugar, Cristina sintió un intenso escalofrío recorrer su cuerpo, abrió la boca, separando los labios, era algo que nunca había sentido, su cuerpo reaccionó a su tacto, respiraba con dificultad.

- Realmente dormía, esa pequeña bailaba mucho en la clase de ballet. - dijo tratando de contener lo que sentía.

- Eres su maestra de ballet.

- Sí, hace tiempo que no practico, ya que sólo es para la actuación del día de la familia, así que lo cogí.

- Ya dármela, puedes dármela y la pondré en el asiento del coche.

- No hay problema, sólo hay que abrir la puerta, ella está dormida en mi regazo, mientras dice que mi corazón canta.

- Es una figurita, loquita de remate. - abre la puerta y Cris coloca a Dinorah en la silla del coche, pero no puede apretar el cinturón, Dionisio se da cuenta de que no puede, se acerca a ella. - Puedes dejarme ajustar esto, siempre es así". - gira su cara y Cristina y él están frente a frente, sus respiraciones se vuelven intensas, sin compasión, sus corazones laten fuerte, él sentía su aliento caliente al igual que ella sentía el suyo. Ella levanta la vista y le mira intensamente, Dionisio siente que su mundo se detiene por un momento.

No, I don't want to fall in love

(This girl is only gonna break your heart)

No, I don't want to fall in love

(This girl is only gonna break your heart)

With you