Las marcas de un corazón(versión en español)✅

Un abrazo diferente

Con el tiempo de recuperación Cristina volvió a su rutina de clases de preescolar, fue turno completo ese año, ya que su adaptación con el nuevo corazón fue normal sin muchos cambios.

- Hola Clari, ¿va todo bien? - Cris la miró con curiosidad.

- Hola Chris, vamos a recibir algunos alumnos de kinder de otra escuela, ellos tuvieron que reducir el tamaño de sus clases porque van a remodelar y estoy aprensiva.

- Por qué eres así, esta es una escuela infantil de primera clase. - dijo riendo.

- La escuela en cuestión es Montesoriana.

- Vamos, sabes que podemos hacer adaptaciones, aunque sea una escuela pública, haremos arreglos especiales para adaptarnos a la escuela pública.

Un poco más tarde, Clarice hablaba con el director de la otra escuela y llamaba a Cris y a otros dos profesores.

- Mylena, estos son los profesores de los que te hablé que se encargarán de las dos clases que vendrán aquí. Cristina Maldonado, también tiene técnicas montesorianas y trabaja bien con las clases. - Cris sonrió amablemente. - Estas son Mirela y Leyla de la guardería y el jardín de infancia, tienen formación magistral y ya en el jardín de infancia, damos las bases para cuando los niños vayan a la escuela infantil. - ambos sonrieron.

- Genial, tengo dos niños especiales y uno que requiere un poco de atención, porque aún no sabemos si tiene algún problema, bueno la pequeña nació prematura y el mismo día perdió a su madre, lamentablemente no resistió el accidente.

- Qué triste. Mirela puede quedarse con ella en su clase y Leyla con las dos especiales, Cris se queda con las demás, ¿vale?

- Eso está bien. - Después de la conversación con los profesores, el director salió del colegio, Cris estaba delante esperando a su colega para ir juntos al centro de la ciudad.

- Hola Cris, gracias por esperar y ofrecerme un viaje.

- Está bien, vamos al mismo sitio.

- ¿Sabe cuántos alumnos tendrá el lunes?

- Sí, 6.

- Bien, dos estudiantes de Leyla vendrán por mí. - se dirigieron al centro de la ciudad, Cris fue a los lugares que necesitaba y luego volvió a casa. Su abuela la esperaba para cenar.

- Vaya, Cris tardó mucho tiempo. - dijo Miranda sentada en el sofá.

- Hola, vocecita, he ido a comprar algunas cosas para mi clase de la semana que viene.

- Hoy estoy de guardia, ¿estarás bien?

- Siempre, ¿quieres que te lleve?

- No, las chicas vienen por mí hoy. - dijo la señora sonriendo.

- ¿Cuándo vas a salir a buscar un novio?

- Mira quién habla, ¿cuándo vas a dar una oportunidad al médico?

- Miranda, mira esto, no puedo salir con mi médico.

- Cris, le gustas, lleváis tres años saliendo y sólo sois amigos.

- Me gusta, abuela, pero como amigo, no siento ese escalofrío por él, es sólo amistad.

- ¿Vas a ir al concierto de la escuela con él?

- No. Dije que no lo haría.

- Cristina, juega limpio con él.

- Hablo claro con Paco, siempre dice que quiere algo más, y me dijo la última vez que fuimos al cine que si no deja de decir que me quiere, ya no lo veré ni como mi médico. Y pongamos fin a eso.