Capítulo 8: Jefe

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Bria se despertó en una cama en una habitación extraña. La habitación olía a velas y alcohol. Lentamente se levantó de donde estaba acostada en un charco de su propia sangre empapada en sábanas blancas. Su cuerpo dolía con cada movimiento que hacía.

"Bria", saltó y miró de inmediato hacia la esquina de la habitación donde Lydia  estaba sentada, sonriendo de oreja a oreja. "¿Te sientes bien?"

Bria suspiró y la miró. "Lydia, estoy bien, ¿tú estás bien?" ella preguntó.

"¿Porque no lo estaría?" Lydia se rió.

Bria casi comenzó a llorar. "Él te atrapó,  ¿no es así?"

Lydia se encogió de hombros. "No sé, me duele mucho el estómago, pero Kyle me entregó y me dijo que te mantuviera en mi habitación".

Él borró sus recuerdos.

Bria sintió rabia en su corazón. Lydia siempre tendrá la sensación de vacío dentro de ella y nunca sabrá porqué.

"Te ves enojada, ¿estás bien?" Lydia cuestionó.

"Kyle es simplemente un idiota". Bria susurró.

Lydia jadeó. "Bria, no digas eso. Mira la increíble vida que nos ha dado. Estaríamos muertos sin él".

Bria la miró a los ojos. "¿Oh, si? ¡Mira lo que me hizo!" Bria se puso de pie, cubierta de sangre y moretones.

Lydia se burla. "¿Estás culpando a él de esa pelea en el bar?"

"¿Pelea de bar? ¿Es lo mejor que puede hacer?" Bria negó con la cabeza. "¿Qué tal cuando literalmente arrancó a un niño vivo de tu útero y le rompió el cráneo justo en frente de ti?"

Lydia inmediatamente fruncio el ceño.

"Tenemos que mantenernos unidos, Lydia. Kyle es un loco". Bria derramó lágrimas. "Nos lastima de manera que no podemos recordar. Obviamente".

Bria miró la hora y se dio cuenta de que tenía que volver a la nave del UNSC para una reunión. ¿Cómo iba a ir ella, con todos estos eventos locos?

Salió de la habitación dejando a Lydia con sus pensamientos. Bria logró darse una ducha y cubrir los moretones en su cuello con maquillaje. Se puso el traje blanco, se cubrió los brazos y se recogío el cabello en una cola de caballo desordenada. No quería parecer profesional o adecuada. Decidió no usar la cola de caballo y se soltó el cabello.

De vuelta en la nave del UNSC:

Bria caminó por los pasillos de la tienda  hasta la sala de reuniones. Trató de ignorar que cada paso que daba era más doloroso que el anterior. Se las arregló para dejar de temblar y actuar con calma y que no solo jugaron con ella anoche.

Al entrar en la habitación con una mesa redonda, vio un par de rostros familiares. Thel y Cassie. Se preguntaba porqué Cassie estaba allí, pero decidió no hablar al respecto.

"Ah, el fugitivo". Dijo el hombre de la cabecera de la mesa. Su etiqueta de nombre decía "Price"

"¿Usted me llamó?" Bria dijo sarcasticamente mientras se cruzaba de brazos. Iba a darle a Kyle un mal nombre, incluso si eso significaba darse un mal nombre a sí misma.

"¿Te importaría sentarte?" Él más ordenó que pidió.

"Prefiero estar de pie". Bria se apoyó contra la pared detrás de donde estaban sentados Thel y Cassie.

"Muy bien." Se aclaró la garganta. "Nuestra misión especial debería estar aquí en cualquier..."

Cassie se volvió y le susurró a Bria mientras todos los demás estaban enfrascados en una pequeña charla. "¿Estás bien, chica? Te ves un poco pálida".

Halo: Dejarlo Morir (Libro 4, Inquisidor x Serie Humana Femenina)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora