Give Me Love {YoonSeok}

tres

Tan pronto como el Alfa rubio salió del lugar, Hoseok corrió.

Había pasado un momento tan desagradable y lamentablemente sería un suceso difícil de olvidar, es decir, el omega estaba acostumbrado a los odiosos susurro y a que le criticasen a donde sea que vaya, pero nunca había experimentado tal cosa.

Salió del baño tratando de disimular su gran llanto y su mal caminar.

Cuando llegó a la mesa en donde se suponía que su mejor amigo le estaba esperando se encontró con una notita que Jungkook había dejado.

Hobi Hyung ¡lo siento!
Jimin me llamó de emergencia
y tuve que irme rápido.
No se preocupe por la cuenta,
ya está pagada:)
Lo quiero Hyung
Cuídese mucho.

Att: Jungkookie ^_^

Hoseok en cierta forma agradeció que Jungkook se hubiese ido, no quería contarle lo ocurrido. Era humillante.

Salió del lugar y subió a su coche, conduciendo directo a su casa. Llegó a su casa y sabía que Yoongi no estaría, siempre trabajaba hasta tarde.

Cuando llegó a la recámara que compartía con su Alfa, lo primero que hizo fue tirarse a llorar, se sentía mal física como emocionalmente, todo le dolía, la cabeza, el estómago, su cintura por los fuertes apretones. Le dolía el corazón por todo lo que él rubio le había dicho porque lo peor de todo es que Hoseok sabía que era verdad, era verdad que era feo, que estaba gordo y que nunca nadie le iba a querer así, pero no era necesario repetirlo.

Lo único que necesitaba en ese momento era un gran abrazo,pero... No tenía a nadie.

Se decidió por ir a darse un baño, porque sí, el Alfa rubio lo había dejado impregnado con su repugnante olor. Cuando levantó su camiseta para meterse a la ducha pudo ver en su cintura moretones verdosos que sabía que después serían morados.

Cuando se vió al espejo inmediatamente se dió asco ¡Por Dios! ¡¿Cómo alguien podía estar tan gordo!?
Inmediatamente desvío la mirada y se metió a la bañera, no quería seguir viéndose. Mientras se duchaba siguió llorando, seguía muy asustado por lo que había ocurrido recientemente en los baños de aquella cafetería, la manera en la que le golpeó, la manera en la que lo insultó, la manera en la que se refirió a él...

Tiempo después salió de la ducha y se vistió con ropa cómoda de su Alfa, necesitaba oler su aroma para lograr tranquilizarse y relajarse,precisamente en esos momentos lo extrañaba demasiado, solo quería abrazarlo y hacer un nido con el. Su aroma a cítricos siempre lograba relajarlo demasiado.

Alrededor de las cuatro de la tarde se acostó en su cama dispuesto a tomar una siesta, se sentía tan agotado de llorar y llorar.

Se levantó al rededor de las nueve de la noche ya un poco más tranquilo y recordó que no había comido, pero así estaba mejor ¿no?

Recordó que en un rato más regresaría su Alfa y la cena aún no estaba lista, así que, se dispuso a ir a la cocina y poner manos a la obra a pesar de su fuerte dolor de cabeza.
Una hora después la cena está lista y calientita para cuando su Alfa llegase.

Una hora más pasó y el Alfa aún no llegaba, supuso que ya no tardaría así que decidió esperarlo en el sofá.

Una y media de la mañana y su Alfa aún no regresaba, ciertamente no era la primera vez que su Alfa regresaba tan tarde a casa pero hoy día lo extrañó más de lo normal.

Se acurrucó en el sofá con una manta calientita encima.

No mucho después de haberse quedado dormido su Alfa regresó a casa, tenía un aspecto cansado y malhumorado, sin mencionar que ya era muy tarde y no había comido nada en todo el día y como no si no descansó ni un minuto para que las gráficas de las ganancias ganadas quedaran bien y presentables para los nuevos inversionistas.