Domingo 2 de febrero del 2,020.
— ¡Buenos días! — se escuchó un grito en la puerta, era lo característico de Ana.
— ¡Voy! — respondió Alison desde el sofá de la sala.
— por fin te dignas abrirme — protestó Ana, encogiendo los hombros.
— Lo siento, me había quedado dormida — se disculpo Alison.
Ana iba vestida con un enterizo color celeste, con los listones formando una corbata al lado de la cintura, unos caites a la moda color negro, uñas acrílicas en blanco, con adornos de mariposas en azul, una cartera en un tono morado pálido y su iPhone en mano.
Alison por su parte la salió a recibir en pijama color rosa y con estampados de cometas en color azul, llevaba puestas sus pantuflas rosa.
— Que manera de despertar por Dios — volvió a quejarse mientras entraba.
— Lo siento, pasa adelante — dijo Alison con una sonrisa amable.
— necesito una explicación a esto, ahora recién desperté vi tu mensaje y no sabes lo fatigador que es para mi levantarme un domingo a las 8 de la mañana — seguía protestando Ana mientras tomaba asiento.
— Sorry, es que ahora estoy sola en casa y como ayer Dylan se lastimó el tobillo no tenía con quién pasar el rato — dijo Alison sonriendo mientras tomaba asiento en el otro sofá y cruzaba los pies.
— O sea que solo me escribiste para pasar el rato, esto es indignante — volvió a quejarse Ana.
— Claro que no, no me malinterpretes, además le dije también a Madison que viniera.
— ¡Prepárate Ali, el día de hoy será de shoping! — exclamó Ana.
— Para nada, verás, quiero que intentemos pasar un rato agradable en casa — dijo aún manteniendo la sonrisa.
— ¡Que aburrido! Ya me había emocionado — respondió desconsolada.
— Tranquila, la pasaremos muy bien, no tardará en llegar Madison, me iré a bañar.
— No debí hacerme las uñas, de seguro querrá cocinar.
Pasada una media hora llegó Madison — ¡Buenas! — saludó en la puerta.
— Adelante — contestó Alison abriendo la puerta.
Madison, la chica de lentes, vestía una blusa de tirantes en amarillo, un pantalón azul con unos pequeños rasguños en las piernas, Unos Adidas Negros, cartera Azul, reloj de señorita y en mano su Teléfono Samsung.
Esta vez Alison estaba usando una blusa azul, un pantalón de pijama en cuadros azul con negro y sus pantuflas.
— Bien, esta vez quiero conversar — dijo mientras se tumbaba en el sofá.
— ¡Ahhh! — respondieron ambas, con cara de asombro.
— ¿sobre qué cosa? — preguntó Madison
— Si o sea, explícate Amix — añadió Ana
— Alison suspiro desde el sofá viendo al techo de la casa y dijo — Sobre el amor.
—¡Ahhh! — volvieron a exclamar.
— Como sabrán yo no he tenido novio a diferencia de ustedes que ya han estado en una relación, quiero que me den una idea que es el amor — Dijo Alison.
— En primer lugar el amor es una pérdida de tiempo — respondió Ana con el ceño fruncido.
— ¡Heee! Tampoco te pases — contradijo Madison — yo estoy en una relación y me va muy bien, mi chico es super encantador y se porta super lindo conmigo.