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─ ¿Estás bien ahí? ─ Le preguntó JeNo a AeRin que se estaba cambiando en su camerino.
─ Sí, ¿puedes ayudarme con algo? ─ Dijo, abriendo la puerta y volviendo a la habitación de JeNo ─ ¿Puedes... subirme la cremallera?
JeNo se sonrojó ante la petición -todavía es un adolescente después de todo-, AeRin se giró, deslizando su cabello hacia un lado. Las manos temblorosas de JeNo alcanzaron la cremallera mientras sus mejillas se calentaban más y más.
─ Gracias. ─ Dijo, dándose la vuelta y echándose el pelo hacia atrás. ─ ¿Dónde está tu corbata?
─ Todavía estoy tratando de resolver eso ─ respondió JeNo, sosteniendo su corbata.
─ ¿Cómo puedes no saber cómo hacer esto después de todos estos eventos elegantes? ─ Suspiró AeRin, tomando la corbata de su mano y colocándola alrededor de su cuello.
─ Bueno, estoy acostumbrado a que alguien más lo haga por mí.
─ Sé un hombre independiente. ─ Ella puso los ojos en blanco, ajustando la corbata para él.
─ Gracias, vámonos ahora. El Sr. Min nos está esperando. ─ JeNo agarró suavemente su mano y tiró de ella mientras salía de su habitación. AeRin agarró su bolso en el camino sin soltar su mano, que se sentía muy bien en la de ella.
Los dos seguían tomados de la mano cuando llegaron al baile, ambos entraron al edificio y el ambiente cambió de inmediato. La sala estaba llena de personas ricas que vestían hermosos vestidos y trajes elegantes con una música suave pero elegante que sonaba como fondo para sus conversaciones.
─ ¡Hijo! ─ Los dos giraron hacia la dirección de donde venía la voz.
─ ¡Mamá! ─ Sonrió al verla.
─ Buenas noches, señora Lee. ─ Saludó AeRin cortésmente con una pequeña reverencia.
─ Oh, veo que no viniste con SoMin esta noche. ─ Dijo su madre, mirando a la niña de pies a cabeza.
─ Mamá, ya hablamos de esto. Yo-.
─ Ven conmigo. Hay algunas personas con las que necesitas hablar. ─ Lo interrumpió su madre antes de alejarse.
─ Estaré en- ─ Comenzó AeRin, pero JeNo la interrumpió.
─ No, ven conmigo. Por favor.
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─ ¡Oh, Dios mío! Nunca volveré a hacer esto. ─ Dijo AeRin mientras JeNo y ella caminaban hacia sus amigos.
─ ¿Hacer qué otra vez? ─ Escuchó preguntar a su hermano.
─ ¿Mark? ¿También te atraparon? DongHyuck te arrastró a esto, ¿no? ─ Le preguntó a su hermano antes de volverse hacia su novio. ─ ¿Por qué trajiste a mi hermano aquí en lugar de una cita real?
─ Le dije que vendría. ─ Aseguró Mark a su hermana.
─ ¿Por qué harías eso?
─ Porque no quería que mi novio se sintiera solo y aburrido durante esta cosa elegante.
AeRin y RenJun fingieron vomitar cuando JaeMin, JeNo, JinHee, ChenLe y JiSung se estremecieron ante la vergüenza de la pareja. ─ Oh, por favor, detente o voy a vomitar de verdad. ─ Advirtió AeRin con cara de disgusto.
─ Estoy vomitando internamente. ─ Dijo DongHyuck, mirando a su novio con ojos de corazón.
─ Está bien, voy a tomar un trago. ─ Dijo, encogiéndose internamente por su amigo y su hermano.
─ Sabes que aún somos menores de edad, ¿verdad? ─ Dijo JeNo antes de que pudiera irse.
─ Estaba hablando de esta cosa chispeante de litchi. ─ Dijo en un tono de 'duh' y caminó hacia el 'bar'.
El cantinero le dio un vaso lleno de un líquido rosado muy bonito y con pequeñas burbujas. Tan pronto como tomó un sorbo de la bebida, sus ojos se abrieron ante el sabor de la bebida azucarada. ─ Maldita sea, esa mierda es buena.
De repente, su hombro se sacudió hacia atrás porque alguien chocó contra ella, haciéndola derramar la mitad de su bebida sobre sí misma. AeRin se dio la vuelta para mirar a la persona y, 'Por supuesto, eres tú', pensó.
─ Uy, mi culpa. ─ Dijo la persona con la sonrisa más falsa que jamás haya existido.
─Jo Somin, ¿por qué no estoy sorprendida?
─ Veo que JeNo bajó de categoría para el baile de este año. ─ Sus ojos recorrieron el cuerpo de AeRin mientras decía eso.
─ Sin embargo, él no puede ir más bajo que tú.
─ Sabes que no importa cuánto te esfuerces, nunca podrás ser uno de nosotros, ¿verdad? Estoy seguro de que tus amigos también se darán cuenta pronto.
El grupo fue testigo de toda la escena y cuando vieron a SoMin hablando con AeRin, que sostenía su bebida con mucha fuerza, rápidamente se dirigieron hacia los dos, de pie junto a AeRin. ─ ¿Sabes qué? ─ Cuando esas palabras salieron de la boca de AeRin, todos sabían, sabían lo que iba a pasar.
─ Aerin- ─ Llamó JeNo, casi en un susurro.
─ ¿Qué? ─ Le espetó a JeNo.
─ No hagas una escena, por favor. Vamos a limpiarte. ─ Dijo, tomando el vaso medio vacío de su mano y poniéndolo en la bandeja de un mesero que pasaba.
─ ¿Hablas en serio? ¿De verdad esperas que me quede callada mientras la señora soy-bonita-y-rica básicamente me está acosando? ─ Miró a JeNo con incredulidad.
─ Lo sé, lo sé pero no estamos en la escue- ─ Casi la apresuró, mirando a las personas a su alrededor.
─ Oh cierto, es porque estamos en la elegante gala de tus padres. ─ Dijo en un tono decepcionado y enojado.
─ La gente como nosotros se comporta educadamente aquí. No lo entenderías. ─ SoMin se rió entre dientes.
─ Sí, tienes razón, la gente como tú debería comportarse cortésmente en público. ─ Sonrió AeRin con un toque de picardía. Agarró un vaso de ella-no-sabía-qué en la bandeja de un mesero y dijo: ─ Pero yo no soy como tú. ─ Antes de arrojar el líquido a la cara de SoMin y hacer que la chica dejara escapar un grito agudo.
Algunas personas a su alrededor se detuvieron en su conversación para mirar la escena. AeRin miró a JeNo por última vez antes de salir de la habitación.
─ ¡Aerin, espera! ─ Gritó Mark, siguiendo a su hermana.
