Atardeceres a tu lado

°•Capítulo-18•°

Los últimos días habían pasado bastante atareados. Grace había salido del hospital y estaba viviendo en casa con Thoni. Yo los visitaba a cada rato y me pasaba parte de la tarde ayudando con todo lo relacionado a la recuperación de Grace.
Con mi madre no habia vuelto a hablar y realmente no sabía el motivo, me dolía mirar a mi padre y saber que le estaba mintiendo en relación con lo de mi madre y tal. Amy tenía problemas con Matt, pero eso es algo que era mejor tratar después.
Ahora mismo, me encontraba acostada en mi cama mientras hablaba con Thoni por teléfono, y todos los papeles con los que estaba estudiando estaban sobre la cama.
–Veo que mejora–me dijo y toqué mi rodilla con el bolígrafo que tenía entre los dedos–Estamos siguiendo la dieta que nos indicó el doctor aunuqe creo que debería comer más vegetales.
–¿Has probado hablar con el doctor? De seguro que sabría decirte.
–No estoy seguro, también es algo que estoy considerando yo, no puedo decir realmente que es lo que necesita o no.
–Eres su hermano Thoni–dije lo obvio–Sabes lo que necesita y lo que no, si no estaría contigo.
–Jum, tienes razón. ¿en serio no te molesté? Dijiste que tenías un exámen.
^¿Así que recuerdas que tengo un exámen eh?, Bien Thoni bien^
–Si lo tengo, pero no es algo tan complicado, este tema en las mate se me da bastante bien.
–Entonces estás lista.
–Eso creo; ¿cuándo volverás al trabajo?
–Aún no sé, mi padre–sentí un poco de rencor cuando mencionó a su padre, las cosas estaban bastante mal desde aquel día–me mandó un mensaje esta tarde, necesita el eslogan de la cafetería y necesita que vuelva pero...
–... pero tú no lo harás hasta que Grace esté bien.
–Esa fue mi respuesta.
–Lo imaginé. Solo, podrías, ir trabajando desde casa–se quedó callado–¿Thoni?
–¿Podrías hacer el segundo eslogan?
–¿Qué?¿Estás loco?
–No, hablo en serio. El primero fue estupendo, puedes hacerlo otra vez.
–No creo poder hacerlo.
–Hazlo por mi pequeña, confío en ti.
Aquí es el lugar y el momento en el que muero y paso a mejor vida. Anthoni Brooks me estaba diciendo que confiaba en mí y eso, créanme, no se escuchaba todos los días.
–¿Lo harás?
–Puedo intentarlo.
–Me quedo más tranquilo–suspiré mientras me mordía el labio.
–Ahora si tengo que colgar, terminaré de estudiar.
–Vale, te llamo más tarde.
–Claro, mañana irás a hablar con el doctor ¿ok?
–Si, lo iré a ver temprano.
–Vale.
Luego de conversar un rato más, colgué al teléfono y me dediqué a estudiar un poco mas de mates. Pasé la tarde allí, hcaiendo apuntes y resumiendo todo lo que sabía. Papá pasó a decirme que la cena estaba lista y que saldría un rato, así que bajé y terminé de cenar lo antes posible ya que quedaría con Chris en una cafetería. Me terminé de arreglar y bajé las escaleras mientras le mandaba un mensaje con la dirección. Papá ya se había ido y había dejado todos los platos en su lugar. Cerré la puerta y me dirigí a la cafetería que le había dicho a mi hermano. Cuando llegué ya estaba allí, lo saludé con dos besos.
–¿Cómo estás?–pregunté.
–Bien, ¿Tú que tal estás?
–Estoy liada con los exámenes que se vienen arriba, pero por todo lo demás estoy bien.
–Saldrás de eso, ya verás–me dedicó una sonrisa–¿Pedirás algo?
–No, apenas acabo de cenar.
–Vale, ¿Cómo está aquel chico?
–Ehem...¿Thoni?
–Si supongo–asentí lentamente.
–Bien, su hermana se está recuperando.
Callé mientras jugaba con mis dedos.
–Pensé,.. qué no querías verme, ya que llevo semanas sin llamar.
–Bueno, supe cual sería tu reacción al saber lo de mamá.
Se me hizo un nudo en la garganta cuando mencionó eso que había estado evitando todos los días anteriores.
–Yo no supe como reaccionar.
–Emma, si te insistí para que hablaras con ella es porque se como se sentiría sin no te veía por última vez–las lágrimas llegaron a mis ojos.
–¿Por qué?¿Por qué no me buscó antes?
–No sé Emma, solo te pido que pases con ella unos días, que dejes que te conozca, se ha pasado toda una vida hablando de ti, de como sería volver a verte.
–¿Y no crees que yo no me siento así? He sufrido los últimos años cuando no la tuve.
–Lo siento–bajó la cabeza–sé que engañaba a tu padre, mucho antes de que nacieras, pero no puedo pedirte otra cosa, es mi madre.
–La veré una vez más, en el fondo también quiero conocerla, pero...mi padre no puede saber nada.
–Esa será tu decisión.
–Vale.
Terminamos de tomar el café y nos quedamos conversando un rato más. Me gustaba la sensación de tener un hermano, teníamos algunas cosas similares, aunque no concordamos en algunas cosas: color favorito, comida favorita, y a la hora de escoger un libro. La tarde fue bastante agradable y la terminé sentada en mi cama leyendo nuevamente un libro.
Me gustaba el tiempo así, tranquilo. Ese silencio que te ayuda tanto a pensar; aunque se siente a veces desolador, es tan tranquilo, respirar y ver como el mundo pasaba frente mi. El tiempo se hace eterno pero la vida tan tranquila. Termino durmiendome sobre los libros y me levanto un poco aturdida ¿qué hora es?
Bajo y veo que son las 10 y algo. Todo está oscuro y enciendo la luz del comedor. Me paso las manos por la cara, odio estos momentos en los que me duermo la tarde, ahora mismo no me entrará el sueño tan fácilmente. Me preparo un sándwich de queso y me siento en la encimera mientras tomo jugo. Mi teléfono suena y me doy cuenta de que está sobre el refrigerador.
Es Thoni quien me llama. ¿A esta hora?
–Si–contesto con la boca media llena.
–Ya veo que no te desperté.
–No, ya estaba despierta.
–Pues entonces.... ¿puedes salir? Estoy fuera.
^¿En serio?^ me asomo rápidamente por la ventana y veo que si, está parado allí fuera. Analizo mi ropa y alizo mi pelo en un moño flojo. Abro la puerta con sumo cuidado y salgo silenciosa.
–¿Por qué sales tipo un ninja?–dice cerca de mi mientras le doy un beso en el cachete. Al separame me agarra la muñeca y hace una mueca.
–No esperarás dejarme así–sin aviso me toma por la cintura y une sus labios con los míos. Ok esto no me lo esperaba. Su mano va de mi muñeca a mi cuello y hace cosquillas en mi cuello. Ok aquí es donde muero. Se separa lentamente mientras deja un beso en mis labios.
–¿Qué haces aquí? A esta hora.
–Grace se ha quedado con Helen y yo he salido a dar una vuelta–me colocó un mechón de pelo tras la oreja–quise venir a verte.
–Pues aquí me tienes...
–¿Emma?
Oh oh
–¿Qué haces aquí fuera?
–¿Papá?¿Qué haces aquí fuera tú?
–Vengo de caminar un rato, soy yo él que quiere saber que haces tú a esta hora aquí afuera con...¿Thoni?
–¿Lo conoces?
–Claro que lo conozco...es un cliente, muy amigo mío.
–¿Amigo?
–Emma...–trató de hablar Thoni.
–Espera, ¿lo conocías?–lo miré–¿Conocías a mi padre?
–Si, pero no sabía que eras su hija hasta hace unos meses.
–Espera espera–ese fue mi padre–¿Ella es la chica?
Thoni asintió lentamente
–Ahora mismo no hablaremos de esto. Quiero saber Emma, ¿por qué has tenido comunicación con tu madre?
Esto iba de mal en peor. De saber que todo esto pasaría nunca me hubiera levantado de la cama.
–¿Cómo lo sabes?–pregunté en un hilo de voz.
–Así que es cierto–se pasó las manos por el pelo y eso solo lo hacía cuando estaba nervioso–¿Por qué?
–Papá....
–¿Estás loca? Como hablas con la mujer que te abandonó. Eras conciente de todo lo que hizo, ¿cómo pudiste dejar todo eso al lado?
–Papá tú no entiendes.
–¿Qué debo entender? Qué Alicia te abandonó y cuando viene de buenas a primeras le abres los brazos y la recibes. Me estabas engañando en mis narizes. Christopher es tu hermano y me mentiste todo el tiempo.
–Yo no quería...
–Eres una ingrata, te dije que nunca te perdonaría que perdonaras a tu madre.
Las lágrimas amenazaron con salir y no tardaron en hacerlo. Thoni a mi lado seguía de pie, sentí el tacto de su mano cuando vió que comenzé a temblar. Mi padre nunca me había hablado así.
–Me decepcionaste Emma.
Salí corriendo y entré a casa. Sentí los pasos de mi padre tras de mi. Cerré la puerta  tras de mi y me recosté en la almohada a llorar.

Thoni:
Toqué el cristal de la ventana hasta que se percató de que estaba allí.
–¿Estás loco–habló entre las lágrimas.
–No podía irme sin saber como estabas.
–¿Cómo es eso que conoces a mi padre?
–Hablaremos otro día sobre eso vale–le sequé una lágrima–¿Estás bien?–pasé la mano por su cabello.
–Si tranquilo.
–¿Segura?
–Si, no te preocupes–hice una mueca.
–Vale ven...–la abrazé y hundió la cabeza en mi cuello.
–Y este abrazo.
–Ay pequeña, aún no has aprendido a mentir.
Se separó de mi y me miró a los ojos;
–No pensé que encontrarme con ella le dolería tanto, todas esas cosas que me dijo...
–Emma, quieres que hable con él?
–No, quedate conmigo esta noche, no quiero estar sola.
–Siempre estaré para ti, peque, incluso en los días que no nos entendamos.
    Emma se quedó dormida en mis brazos, eran apenas las once de la noche pero no podría quedarme luego de lo sucedido.  La acomodé en su cama, la tapé y le besé la frente.
Bajé a por un  poco de agua porque realmente la necesitaba; la cocina estaba en silencio y vacía. Ya estaba bebiendo cuando sentí la puerta de la entrada cerrarse. Tras de eso Noah apareció en la cocina.
–¿Estás aqui?–preguntó un poco confundido.
–Si, Emma me necesitas–asintió.
–Ya lo sabías, verdad–fruncí el entrecejo–que veía a Alicia y su familia–me encogí de hombros.
–Conocimos a Christopher por accidente nada fue planeado, que se encontrase con su madre ya fue su decisión, y yo si, lo sabía y la apoyé en todo.
–Alicia la abandonó, se fué.
–Emma veía tus mensajes con ella, supo que Alicia se preocupa de cierta forma por ella.
–Ya me lo ha dicho, me ha echo quedar como tonto todo este tiempo.
–Puedo hacerle una pregunta–asintió–¿Por qué nunca le dijo que estaban en Madrid y no en New York?
–No quería que viniera, la convenciera y la llevara con ella.
–Emma nunca lo dejaría. Lo quiere demasiado.
–Si me quisiera no hubiera aceptado hablar con ella.
–Creo que estás siendo un poco egoista.
–Thoni, es mejor que no te metas...
–Alicia está enferma–le corté. Pude ver la confunción en su rostro.
–En..ferma.
–Le detectaron un cáncer de huesos, hace meses..
–¿Cómo fue que no me dijo?–bebí un poco de agua.
–Noah, le dije esto para que pensara en como se sintió Emma al saberlo y Alicia al pensar que no vería más a sus hijos.
–Yo...no pue...puedo entenderlo.
–Hable con Emma mañana. Yo debo irme ya–miré mi reloj–es demasiado tarde. Luego hablaremos
–No, tú quedate, se que Emma te necesitará.
–¿Estará bien?
–Si, solo necesito pensar.
–Vale, buenas noches.   
Desperté muy temprano y amanecí pegado a Emma. No me gustaba dormir muy pegado a ls gente pero con ella se sentía tan bien. Su piel era tibia y suave, pasaría toda la mañana así.
Suavemente me desperté y la dejé durmiendo allí, tan tranquila. Se veía hermosa incluso durmiendo. Bajé las escaleras resando por no toparme con Noah pero mis rezos fueron en vano ya que él se encontraba leyendo el periódico sobre un silla en el comedor.
–Buenos días–saludé.
–Buenos días Thoni. Ven siéntate.
Eso fue un poco raro pero igual me senté.
–Fue extraño saber que la chica que te estaba cambiando era mi hija.
–Noah, quiero...
–No espera. Otra persona en mi lugar hubiera mandado a matarte, pero yo no lo haré porque se que me hija es buena para ti, como tú ayer me demostraste ser bueno para ella. Quizás me esté equivocando en está elección pero es lo que siento, solo te pediré que no la hagas sufrir.
–No está en mis planes créame.
–Ayer dijiste algo que aún me tiene aturdido, Emma, ¿ya despertó?
–No, he querido salir temprano mi hermana está enferma en casa.
–Ve tranquilo, y gracias por todo Thoni.
–Somos amigos Noah–nos abrazamos y salí directo hacía casa.
Noah se tomó aquello como lo mejor posible, nunca pensé que reaccionaría así. Pero había dicho algo: "sé que mi hija es buena para ti" ^¿era eso cierto?^ Acaso Emma me estaba cambiando, para bien quizás. Todo era muy raro, esto que estaba sintiendo y como era cuando estaba con ella, si, definitivamente me estaba cambiando. Ahora la pregunta era si yo realmente quería cambios.

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Hola hola... después de casi dos meses volví.
Ha sido muy difícil seguir escribiendo por muy tonto que suene, pero lo bueno es que seguí y pues...un capítulo más lector@s :D
Espero y les guste, en privado espero los comentarios y como siempre...
buen provecho, os kiero <33