XXV

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Ya pasaron varias semanas de aquel día en el que decidí volver a dejar la comida.

Hasta ahora nadie se había percatado de nada, ya que todos estaban muy ocupados en sus asuntos.

Algo que a menudo sentia era que estaba rota por dentro, y no sabía el porqué, tenía la vida perfecta, tengo un techo donde vivir, familia y amigos que me adoran, tengo una novia que me ama sobre todas las cosas. No sabía porque odiaba tanto mi vida al punto de querer quitármela, eso no sería justo para nadie. Abeces de tanto pensar esto me falta el aire y ni que hablemos de las calificaciones, si no consigo un número de dos cifras en mi tarea, siento que decepcionaré a mis padres.

No se que es lo que me sucede, solo se que algún día de estos me quedaré en el camino de la vida y nadie sabrá porque, solo yo.

En este momento me encuentro sentada en mi balcón con las piernas colgando, con el aire en mi rostro, con la mirada hacia el frente y debes en cuando mirando hacia abajo.

Alguien entró sin golpear la puerta de mi habitación y me espantó, tanto que casi caigo de un quinto piso.

- Hija que haces ahí, por favor ven para aquí - dijo papá asecercandoce a mi

- Que sucede, por qué entraste sin tocar? - pregunte limpiando las lágrimas de mi ojos

-  Quería saber como te encontrabas - dijo asercandoce a mi y sentándose a mi lado

El silencio se apoderó del lugar por unos minutos.

- Se sentiría muy bien tirarse desde aquí, ¿no? - dije con una sonrisa

- Hija por favor, no digas eso - dijo algo preocupado

- Tranquilo papá no cometeré ninguna locura, no sería capas de dejarlos de esa forma - dije mientras lo miraba y sonreía

- Si quieres puedes tirarte - dijo con una sonrisa

Yo lo miré súper confundida, no podía creer lo que había escuchado.

- Con la condición de que te pongas mi traje - dijo con una sonrisa

- Le sacas lo divertido a todo - dije bromeando

Me levanté de mi lugar y me dirigí al interior de mi habitación.

- Hija nos tienes muy preocupados a todos, incluso a tus maestros, te quedas dormida en clase - dijo parancoce enfrente mío

- Tranquilo papá, estoy bien, solo un poco cansada porque me quedo hasta tarde estudiando

- Sabes que no te creo ni un poco, Kate a venido tres días seguidos y en ninguno de esos días has querido verla, que te sucede? Sabes que puedes contarme cualquier cosa que te suceda

- No me sucede nada papá, estoy bien, solo es falta de sueño

- Hija, enserio? No has comido casi nada en una semana, estas adelgazando muy rápido, eso no es normal - dijo preocupado

- Papá, me pudes dejar sola? Me duele un poco la cabeza de tanto pensar, necesito descansar - dije mientras fruncía el seño

- Tu papá y yo estamos muy preocupados por ti hija, sabes todas las noches que hemos pasado sin dormir por estar atentos a ti - dijo mientras aguantaba las lágrimas

- Papá, sabes que los amo demaciado, yo estoy bien no es nesesario que se preocupen por mi, no quiero que sufran por mi culpa - dije llorando

|Pov Tony|

Me acerque a ella para intentarla abrazar pero no me dejo.

Ella levantó la mirada y vio hacia el gran ventanal que daba a el balcón y luego me miró a mí con lagriamas en los ojos y una sonrisa.

- No... hija por favor... solo quédate aquí - dije casi llorando

- Lo lamento papá, dile a todos que los amo y a Kate que le debo nuestro último beso - dijo con una sonrisa

Corrió hacia el balcón y se tiró, yo corrí detrás de ella y mientras corría activé mi traje, cuando pude usar mis propulsores me inpulce hacia ella y la teme en mis brazos.

No paraba de temblar y de llorar, estaba tan débil que se desmayo apenas la sostuve.

Aterrice delante las puertas del complejo y entre corriendo para dejarla en el sofá.

Rápidamente desactive mi traje y la acomode mejor en el sofá.

- Hija, por favor despierta, no te vallas - dije llorando

- Cariño que sucede, porque lloras? - dijo Stive saliendo de la cosina

- Madie se tiró desde el balcón de su habitación, la pude atrapar antes de que impactara contra el piso, pero de lo débil que está se desmayo - dije llorando

Stive corrió enseguida y vio a Madie.

- Llamaré a Banner, ya regreso cariño no te preocupes - corrió hacia el laboratorio de Banner

Y en menos de cinco minutos ambos regresaron corriendo.

Bruce la reviso rápidamente y le dio un medicamento.

- Ella está bien, solo está un poco débil por no haber comido como se debe - dijo Bruce mirándonos

|Pov Madie|

Lo último que recordaba era volar por los aires mientras que mi vida corría delante de mis ojos.

- Que sucedió? - pregunte algo confundida por la situación

- Tranquila hija estás bien, y a salvo - dijo papá con una sonrisa pero también con sus mejillas empapadas por las lágrimas

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Espero que les allá gustado este capítulo.

Que opinan de papá Tony rescatista?

Hasta aquí mi reporte byeeee👋🏻

Soy una Stark RogersDonde viven las historias. Descúbrelo ahora