Capítulo 31

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P.D.V Jessy

Desperté en un sofá exactamente a las 3:00 AM. Y esta vez no me pregunte "¿Cómo llegue aquí?" Lo sabía absolutamente todo.

*Flashback*

"Recuerda, los vigilo"

Eran las últimas letras de la carta. Seguía tirada en el suelo, el auto ya se había ido y mi suerte no mejoraba. Trate de pararme como pude, camine hacía mi auto como los zombies de the walking dead y entre dando un portazo.

Maneje hacia la casa y cuando trate de abrir la puerta, estaba cerrada. Mire al suelo y vi una piedra, pensé "¿No pasara nada si le tiro una piedra a la habitación de Mark a altas horas de la noche?" Ñe, YOLO.

Al final no salió tan bien como esperaba, Mark grito como niña, llamo a la policía y me arrojo una piedra. Se ve todos los días...

Luego de todo el percance pude entrar sana y salva a nuestra casa. Pero estaba muy cansada para subir escaleras, así que decidí dormir en el sofá.

*Fin del Flashback*

Ya eran las 10:00 AM y me pareció lo correcto darles la noticia.

-Hola, en verdad siento mucho decirles esto pero...

-¿Y Rose? – Pregunto Mark

-Ese es el tema – Trague saliva – Ayer en la noche secuestraron a Rose y a Peyton.

****

P.D.V Rose

Estaba encerrada, otra vez.

Al menos me dejaron sopita, y a una taradupida. Si, Peyton.

-Esto es una estupidez – Hable y se me callo la sopa en mi camiseta – Puta vida.

Ella negó con la cabeza divertida – Me pregunto si algún día serás normal.

-Lo seré cuando Stefan Salvatore sea mi esposo – Conteste

-Espero que pronto – Achino los ojos. Aseguro que le estampare una lechuga en la cara.

-Rose – Balbuceo Peyton

-¿Qué? – Gire la cabeza como la niña del exorcista – Ah, James ¿Qué tal has estado?

Recalculando...

-Santa cachucha – Grite de alegría - ¿Qué haces aquí?

-Parece que no has entendido, pequeña – Lo mire sin entender – Estoy en el mismo caso que tu.

-¿También te secuestraron?

-Rose, yo me encargo – Peyton me empujo lentamente.

-¿La drogaron? – Pregunto con los ojos bien abiertos

Nos giramos a ella que jugaba con sus manos y aplaudía como foca – Yo digo que sí.

*30 minutos después*

-¿Saben por qué están aquí? – Nos pregunto Taylor

-No ¿Tú sabes? – Le pregunte mientras jugaba con mi cabello

-Pues claro, yo los reuní.

-¿Entonces qué quieres? – Grito frustrada Peyton

-Venganza – E hizo un extraño movimiento con las manos

-El solo te rompió el corazón. A mí me han roto el corazón, a Peyton seguramente también...

-¿Pero a ti no, verdad James?

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