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4 años después.

___ no había superado del todo la situación que vivió con Bill, había sido todo tan erróneo para ella que deseaba volver en el tiempo para aferrarse a él y nunca dejarlo solo, tirado y herido por una bala de la arma que prometió destruir.

Cada día pensaba en él, tratando de convencerse de que lo que hizo su madre funcionaria, que la pequeña porción de su poder que le devolvió curaría sus heridas y mataría a todos los que intentarían hacerle daño, incluso a su propio padre.

___ siguió las palabras de Bill y convenció a Elizabeth de que se fueran lejos del pequeño pueblo en donde vivían, yéndose a otro estado más lejano y utilizando el dinero de Tyrone, también con un poco de ayuda económica de parte de Mabel.
Rentaban un pequeño departamento, dormían en la misma habitación y siempre comían lo justo en un restaurante barato, tratando de vivir.

Ese mismo día se festejaba el cumpleaños de ___, su madre le hacía esperar en una de las mesas del restaurante diciéndole que iría por algo especial, sabía que se trataba de un pequeño regalo de cumpleaños y eso ponía algo intrigada a ___.

— ¡Feliz cumpleaños a ti, feliz cumpleaños a ti!— Comenzó a cantar suavemente Elizabeth desde lejos mientras se acercaba con un pastel pequeño, entrando por la puerta del restaurante.— ¡Feliz cumpleaños querida ___! ¡Feliz cumpleaños a ti!

Se sentó frente a ___ sonriéndole de oreja a oreja luego de terminar de cantarle el feliz cumpleaños, le emocionaba a su propia madre el solo extenderle el pastel de chocolate.

— ¡Vamos! Pide un deseo cariño.

—Ay mamá, no debiste hacer eso, es tan lindo que quiero abrazarte todo el día, ¿Crees que pueda?

—Solo si pides un deseo, anda, se hará tarde y la hada madrina se cansará de esperar.

Ambas rieron con dulzura.
___ cerró los ojos y sopló la vela con una gran sonrisa sin pensar en ningún deseo, estaba muy contenta que no quiso pensar en ninguno.
Enseguida la chica escuchó como su madre aplaudía emocionada, al mirarla de nuevo solo veía felicidad.

— ¿Te gusta? Lo aparte hace unos días en la pastelería que está enfrente, iba a ser más grande pero no quería gastar todo mi dinero.

—No hay problema mamá, me encanta. Todo lo que me das es hermoso.

—Cariño déjame terminar, todavía no estamos en la parte gloriosa de mi explicación.— Elizabeth mordió su labio y rió con emoción.— No quería gastar mi dinero porque hay una cosa más que quise darte, o bueno... Son dos.

—Mamá, no tenemos mucho dinero, con el pastel bastaba ¿Por qué se te ocurren esas cosas si estamos en esta situación?

—No te preocupes preciosa, pedí un préstamo y apenas lo obtuve. No es relevante si trabajo horas extras o me descuentan mucho dinero a partir de algún día, solo quiero que seas feliz.

—Ah, en ese caso... No recibiré nada, no puedo hacerlo. Es importante que estemos equilibradas además de que la...-

—Es un boleto para ir a Gravity Falls.— Interrumpió sin dejar de sonreír.— Estuve pensándolo por muchos meses, demasiados meses, y es mejor que vayas solo dos días.

—...¿Qué dices? Mamá eso es una locura, ¿Solo pediste dinero para que fuera allá?

—Mira, no sé que conexión tienes con Bill, si lo quieres como a tu mejor amigo o si lo ves como un hermano, pero se que has deseado ir con él para ayudarle a ir a casa desde hace mucho tiempo.— La mujer retiró el collar de su pecho y lo puso sobre la mesa con mucho cuidado.— Además de que si esas cosas se salen de aquí, Bill recuperará su poder y dejará de estar en la tierra. Regresará a su dimensión para nunca volver, por eso siempre cuidé de que jamás se rompiera.

Moon | Bill CipherDonde viven las historias. Descúbrelo ahora