Destinos (Omegaverse/Btsxtn)

4

Yoongi irrumpió en la habitación, observó la forma en la que su hermano miraba a su alpha, aún no sabía cómo sentirse al respecto, era demasiado extraño y que además el exquisito olor de su destinada lo tenía distraído casi siempre, y sabía que no era el único, Jimin también lo sentía.

—Es hora de comer — le avisó— el almuerzo está listo, mamá quiere que vayas, yo me quedaré.

— Está bi...

Un leve y bajo quejido los hizo voltear, los puso nerviosos y en alerta al mismo tiempo, se quedaron quietos y miraron con detenimiento como la chica se removía en la cama, estaba despertando.

Lentamente abrió los ojos acomodando su vista a la luz que entraba por la ventana. Aquellos hermosos orbes se pasearon desorientados por la habitación hasta caer en ellos. Un escalofrío los recorrió de pies a cabeza cuando sintieron esa mira en ellos.

— ¿Quienes son ustedes? — preguntó con el ceño fruncido, confundida.

Ellos la miraron fijamente sin poder responder, si quiera se movieron. Ante el pasmo de los chicos la joven les miró aún más confundida, trato de incorporarse en la cama sintiéndose débil.

En ese instante la señora Min se asomó al ver que sus hijos no llegaban a la mesa.

—¿Por qué no vienen? La comida ya...— se interrumpió al ver a la joven despierta; con una cara de asombro y amabilidad se acercó a ella pasando de los jóvenes que aún se encontraban paralizados —¡Despertó! Que gusto me da. Dígame ¿Como se siente? ¿Le duele algo? ¿Necesita algo?

La joven se sintió aturdida por las palabras rápidas de la señora.

— Yo...

— Oh, disculpe mis modales, su Alteza, olvidé presentarme, mi nombre en Min Nari, para servirle— hizo una pequeña reverencia. En ese momento recordó que sus hijos se encontraban ahí y sonrió abiertamente, emocionada por lo que podría pasar — Y ellos son mis hijos, Yoongi y Jimin.

Los chicos recibieron la mirada de la joven y salieron de su trance al ver las señas de su madre para que hablaran.

— Mucho gusto... M-majestad. — habló Yoongi, haciendo también una reverencia, ciertamente sorprendido ¿Majestad? Su madre definitivamente no había mencionado nada. Estaban muy confundido, pero solo repitió lo que su madre había hecho.

—Si, igual mucho gusto — le imitó Jimin con el mismo rostro de sorpresa y confusión que su hermano.

La joven les miró con ligera sorpresa pero aún con gran incertidumbre, se aclaró la garganta.

—Mucho gusto —una suave vos rasposa llegó a sus oídos, hizo una mueca al sentir su garganta seca. Al notarlo, la señora se apresuró al servirle un poco de agua que yacía en una jarra en la pequeña mesa junto a la cama. — Gracias. Yo soy Lee Tn

— Se preguntara qué hace aquí, y talvez esté algo confundida ¿Verdad? — habló amablemente la mayor, la chica asintió. — ¿Recuerda algo de lo que pasó?

— No mucho en realidad — dijo dubidativa. Pero poco a poco todo comenzó a ordenarse en su memoria. — No, si, ya recuerdo.

—¿Que recuerda?

—Estaba dando unas rondas en la región, terminé la ronda y dejé a mis soldados haciendo guardia y decidí dar una ronda por una zona más alejada — rememoraba la joven, sintiendo como las imágenes se acomodaban en su mente — Llegué por unos caminos que me dijeron que iban a una región de cosecha, en el camino me topé con unos campesinos que dijeron que habían visto a unas personas sospechosas en el área, por lo que decidí avanzar, me encontré con unos caballos así que supe que sus dueños estaban por ahí, había avanzado un poco cuando escuché unos gritos, mis sentidos son más agudos por lo que hice ir lo más rápido a Rayo, entonces fue cuando los ví — miró fijamente a los dos jóvenes.— unos alphas intentaban hacerles daño, así que me apresure a ayudarlos pero luego... — pastañeo tratando de recordar lo más posible —  Recuerdo que ya todos estaban en el suelo pero me sentí mal, era como si de repente todo comenzará a dar vueltas y sentía mucha calor... Después de eso no recuerdo más.