Sabado de cita pt. 2

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—Bruno, llegaste un poco antes de lo que pensé que llegarías, aun no termino de arreglar unas cosas, pasa y espérame en la sala mientras encuentro lo que falta.

Había estado muchas veces en casa de Melanie, pero esta vez había algo diferente en el ambiente, éramos nosotros dos solos, dos jóvenes adolescentes con las hormonas alborotadas, trate de calmarme un poco haciendo un poco de platica

—¿Y qué tal tu día?

Desde otra habitación Melanie me responde

—Bien, estuve arreglando mi casa en la mañana y luego me puse a ver una serie en Netflix, ¿qué tal tu?

—Igual bien, me levante un poco tarde por lo de ayer, pero en general fue una mañana tranquila

Era un poco raro platicar con ella sabiendo en la situación e la que estábamos, pero era aún más raro el silencio incomodo que había entre nosotros dos en este momento, por lo que seguí con la platica

—Y tu papa?

—El salió a ver un partido de futbol con sus amigos ya sabes como son los hombres. Y mi hermanita esta en su campamento.

Bruno no había tenido mucho tiempo últimamente de ver los partidos de futbol que a el tanto le gustaba por lo ajetreado que había estado su vida estas ultimas dos semanas, pero al mirar la fecha en su celular recordó que hoy era la gran final del torneo de su país, era un evento único para cualquier amante del futbol y algo imperdible. Se Moria de ganas de verlo, pero también quería estar con Melanie así que decidió aguantarse por el momento y seguir con su cita, por lo que respondió un poco desanimado.

—Oh ya veo

—No debe de llegar hasta por ahí de las 12:00 así que tenemos toda la noche para nosotros dos solos

Bruno se sobresalto un poco y comenzó a sentir calor en su cuerpo por las palabras de Melanie sin embargo se sorprendió un poco al ver lo que trajo Melanie y lo puso frente de el

—¿Qué es todo esto?

—¿Cómo que que, esto es lo que necesitamos para nuestra gran noche?

En la mesa había varios botes de esmalte de uñas de diferentes colores, había varias cremas una bata de baño, rodajas de pepino cortadas, una plancha de pelo y muchas otras cosas que no identificaba pero que sin duda usaban las mujeres

—No entiendo

—Esto es lo que nosotros dos haremos toda la noche cariño

Enojado, Bruno le respondió

—tu me prometiste una cita para nosotros dos

—y eso es lo que vamos a tener

—pero yo me refería a las citas que teníamos siempre, donde salíamos a algún lado y yo te besaba y luego teníamos sexo

—Escucha Bruno, aunque esas citas me gustaban ahorita que eres mujer me gustaría intentar otro tipo de citas

—Pero esto es lo que hacen las mujeres en sus pijamadas

­—Mira podemos intentarlo solo esta vez y si vemos que o funciona te prometo otra cita tal y como tu la quieres, hazlo por mi por fi

Bruno se quedo pensando un momento, a pesar de que el odiaba este tipo de cosas no quería hacer enojar a Melanie y que ya no pudiera hablarla así que decidió acceder a hacer todo lo que Melanie tenia planeado

—Bueno, solo esta vez

—yeiii te prometo que te vas a divertir

—lo dudo

¿La señora de a lado?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora