Amor De Mi Vida

Capítulo 28: Pasos previos

NATALIA POV

Me despierto y veo a mi izquierda a Alba sobando con la boca abierta colgada a mí como un koala. Me pone feliz que haya dormido bien y sea gracias a mí, no me voy a quitar mérito pero tengo el brazo dormido ya. De repente veo a Marina pasar y:

-Tss, tss-le chisto

-Buenos días, fiera-me saluda

-Necesito un favor, Marina-le pido

-¿Así de buena mañana? Suelta prenda

-Como puedes ver, tu hermana está durmiendo plácidamente con mi brazo y tenía planeado hacerle el desayuno para traérselo a la cama

-Y quieres que yo lo haga-adivina

-Aciertas. Dos vasos de jugo de naranja, otros dos de café con leche y unas galletas

-Esto necesita algo a cambio, un placer hacer negocios contigo-se va y me río

Tras un par de minutos aparece Marina con una bandeja

-Tiene croissants-formo una o con mi boca

-Sí, mi madre ha comprado en la panadería antes de irse con sus amigas

-Pues déjalo en la mesita. ¿Tienes algo que hacer? Todavía es temprano

-Me voy con mi padre, me va a comprar todos los regalos que no ha podido este año por navidades-sonríe

-A ti lo que te interesa son los regalitos eh

-Lo que pasa es que mi madre no ha podido comprarnos tantos regalos al ser solo una y le dije en su día que la ropa me la compraría él. Así que eso. A mí me dan igual cuántos regalos tenga en esta casa porque al fin y al cabo es mi madre, la veo todos los días.

-Yo soy igual-comparto su idea

-Pero Alba es diferente, ella ama los regalos en esta época del año. Me acuerdo el año de la crisis que no hubo muchos, se puso super triste y vale, ahora es más mayor pero estoy segura que también se pondrá así. Porque que además vaya a estar nuestro padre y haya esa frialdad, pues...

-Tranquila, Marina. Por eso no te preocupes porque va a tener todos los regalos que ella quiere-sonrío mirando a mi maleta

-Ostia, pues si que la quieres de verdad-se sincera

-Pues claro-frunzo el ceño

-Es que Paola odiaba la navidad y le importaba tres pimientos que ella la amase, pasaba de llamarla o enviarle regalos y Alba durante los dos años siempre esperó algo pero nunca llegaba nada. Entonces claro que de repente seas su pareja y seas totalmente diferente me choca

-A mí tampoco me gusta, pero tu hermana lo hace todo diferente, especial-sonrío al recordar el momento-la carita que se le pone al hablar de estas fechas te contagia y sé que a partir de ahora va a ser mucho más feliz

-Porque a caballo entre Navidad y fin de año está vuestro aniversario, eres lista Natinat-me da un beso en la mejilla y se va. WOW

Oigo una voz despertando y dándose la vuelta, por lo que aprovecho para estirar mi mano e ir al baño. Al volver veo una carita sonriendo

-Buenos días-parece que está un poco dormida todavía

-He traído el desayuno-lo señalo

-Tantas molestias te has tomado-sonríe muy grande

-No era menos para empezar bien el día-me siento en la cama con la bandeja en mis piernas

Mientras desayunamos, suena el teléfono de Alba. Son Lidia y Hanna, que si le gustaría quedar hoy antes de comer, así que nos hemos apuntado y por fin conoceré a mis cómplices. Estoy deseando que llegue la hora

ALBA POV

Nos vestimos y antes de que salgamos de casa nos llama mi madre por teléfono

-Chicas, quedamos para comer con vuestro padre a las 13.30 en el Pomodoro del centro comercial L'Aljub, así que nos vemos por fuera del recinto sobre las 13.15

-Perfecto, Rafi-responde Nat por las dos y cuelga. Ella abre la puerta pero...

-Nat-la llamo

-¿Sí?-viene

-¿Puedes ponerme esto?-le enseño nuestro collar, digo nuestro porque he comprado uno a la misma medida para regalárselo por reyes, pero no sé si dárselo en año nuevo

-El collar que te regalé-sonríe-Te lo pones

-Pues claro, Nat

-Es que no me suele pasar-me besa el hombro

Tras caminar unos minutos, llegamos al punto de quedada. Natalia va corriendo a saludarlas, se ve que ha hablado mucho estas semanas. Yo voy detrás

-Pero bueno por fin nos conocemos-comenta Hanna emocionada

Nos pedimos las 4 unas cañitas y empezamos a charlar sobre temas banales hasta que llega el tópico que no quería: el de mi padre.

-Entonces hoy ves a tu padre después de un año y medio-dice Lidia

-Sí-respondo seca

-¿Tendrás ganas, no? Al fin y al cabo es tu padre-dice Hanna convencida

-Bueno...-me interrumpe Lidia

-Lo que daría yo por ver a mi padre de nuevo-me revuelvo incómoda en la silla

-Voy al baño-digo seca y me llevo mi bolso

Al llegar le escribo a Nat, estoy demasiado nerviosa y decepcionada. No me siento con ganas de ver a mi padre de nuevo con todo lo que me han dicho. Me miro al espejo, a las heridas emocionales y mentales que me dejó. Es entonces cuando empiezan a salir lágrimas una detrás de otra sin parar.

Oigo unos toquecitos en la puerta, yo solo hago un gimoteo y me escondo más. La puerta se abre y se cierra en un plis plas. No escucho nada más y me asusto. Una silueta se pone frente a mí

-Siempre te voy a salvar de ataques de ansiedad o qué-Natalia hace que suelte una risita y me abrace a ella, a su pecho mientras ella me acaricia

-No hace falta que me digas nada. Lo he entendido todo-me responde tranquilizandome

-Y... ¿Dónde están?-pregunto sorbiéndome los mocos

-Han pagado la cuenta y se han ido cuando les he dicho que yo iba al baño también

-Ah... Es que no es su culpa pero-me interrumpe

-Te ha entrado la rabia y el miedo a la vez. Y no querías ni pagarlo con ellas, ni que te vieran así. ¿A que sí?-me coge del mentón

-Sí-sonrío con la boca chica

-¿Ya estás mejor?

-Chi-le doy un pico

-Pues vamos, que nos queda nada

Ella se levanta pero a mí solo me sale una mueca, me ayuda a levantarme.

-Estoy nerviosa-la miro

-Mira Alba, cuanto antes te quites el encuentro mejor. Si sale bien, sigue habiendo esa conexión de la que hablabas ayer y puedes ver realmente que tu padre ha cambiado, perfecto. Y si es al contrario, te vas pero con la autoestima bien alta, sabiendo que lo has intentado

-Mi psicóloga me dijo lo mismo, que no la retrasase...

-Además, si quieres podemos esta tarde ir a lo del patinaje ese y...-la interrumpo

-¡SÍ, PORFA!-grito-Podemos llamar a mi tía y a mis primas-se emociona

NATALIA POV

Comenzamos a caminar mientras ella me cuenta toda ilusionada las tardes de navidad en el Patiland del recinto ferial que ponen todos los años. Cuando termina de hablar, se da cuenta de que ya hemos llegado y se tensa

-Y cuando lleguemos a casa, puedo enseñarte la canción que he estado componiendo y me ayudas-sugiero

-¡SIII!-grita como una niña pequeña sin darse cuenta de que estamos pasos previos al GRAN ENCUENTRO tan esperado por la familia Reche y amistades.