Amor De Mi Vida

Capítulo 30: Familia

-Marina.. ¿Tú podrías reservar una noche en un karaoke que hay..-me interrumpe

-¿En el que son como habitaciones para cada uno pero que a la vez es un bar donde puedes cenar?-me pregunta

-Sí, ese

-Vale pero... Está un poco escondido-se preocupa

-Esa es la intención, no quiero que nadie nos moleste. Quiero que Alba tenga por lo menos, un buen final de año

-Reserva en el hotel B&B Hotel Elche, es solo adultos y Alba siempre ha soñado con quedarse una noche, antes de irnos a Madrid había conseguido un trabajo como cantante de shows en ese hotel pero lo rechazó para irnos y se le quedó la espinita clavada.

-Siempre es un placer hacer negocios con usted-la abrazo sonriendo

Llegamos a su casa, abre y va corriendo a su cuarto a coger su mochila porque se va a quedar con su mejor amiga.

-Si quieres que ella venga también pues reserva para 4-le digo mientras nos dirigimos a buscar algo de comer

Intentamos llamar a Alba pero salta el buzón, mientras Marina avisa a su madre de que la casa se quedará a solas esta noche.

-¿Vamos al burguer king? Que hay opciones vegetarianas-digo

-Vale pero pago yo que bastante vas a pagar tú para que mi hermana pueda vivir tranquila

-Ay Mini...-digo abrazándola mientras entramos al burguer king

Pido dos menús long vegetal y unos nuggets para Alba y para mí. Marina pide un happy meal de esos. Ahora sí, nos dirigimos a la vivienda de Ana, que me cuenta un poco cómo es ella y dónde se conocieron.

Al dejarla y despedirme de ella, repitiendo por 300 vez que sé dónde está Alba. Y ella diciéndome que la encontrara rápido por favor. Mientras voy camino de la búsqueda de mi chica, una llamada entrante salta en mi teléfono: Rafi Suegri

-Natalia, dime qué estás con ella, por favor

-Estoy llegando, tranquila

-¿Cómo sabes dónde está?

-Porque la conozco, Rafaela.

-Cómo le haya pasado algo a mi chiquitina, no me lo voy a perdonar jamás en la vida. Es que vamos como si me tengo que ir a vivir con ella yo. Cómo se atreve ese desgraciado a decirle eso, sin ni quisiera preguntarme

-Ya la estoy viendo, luego te hablo. ¿Sí?

-Dime dónde está, por favor-me suplica

-No, si ha venido hasta aquí es porque no quiere veros, lógica aplastante. Hasta luego-cuelgo y me mentalizo de lo que pueda pasar, pero me paralizo al escuchar a Alba Reche cantar una canción que nunca había oído en mi vida.

-Esa también fui... yo...-termina sentándose en el banco, quitándose un par de lágrimas

Me acerco a este silenciosamente, no quiero asustarla, suelto mi forro de la guitarra lo más cuidadosamente posible y me siento sin hacer ruido. Empiezo a rasgar las cuerdas, haciendo que me salga una canción conocida, es entonces cuando empiezo a cantar

-No ha cambiado nada, ya decido yo por ti-la miro empezando a cantar y ella muestra un ceño fruncido, una sonrisa y unas lágrimas cayendo por sus mejillas. Me dan ganas de quitárselas pero...

-Y aunque cada dos días me acuerde de tus pecas, agarraré esta cuerda, me queman las muñecas-canta sorbiéndose los mocos, haciendo el momento más soft y especial, yo me sorprendo de que se la sepa por lo que continuo