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Habían pasado cinco días después de haberme alejado de todo y de todos, necesitaba pensar, necesitaba alejarme del exterior para pensar que hacer después de tantas cosas que pasaban por mi cabeza.

Mi decisión fue egoísta, pero no me sentía bien, no iba a fingir que estaba todo bien cuando no era así, tenía miedo y no sabía que hacer en estás situaciones.

No había vuelta atrás como si Sunoo me fuese a perdonar por mi reacción tan inmadura, o si mis amigos me ayudarían a buscar una solución, era mi responsabilidad hacer que todo vuelva a la normalidad antes de que Sunoo se vaya a Córdoba.

Mi aspecto era miserable, tenía en mi cabeza ese pensamiento de que si iba a llorar a los brazos de Sunoo, él me rechazaría después de ser tan boludo -cosa que yo haría si estuviese en su lugar-.

Alguien llamó a mi puerta.

Que conveniente

Apenas abrí la puerta, mis amigos empezaron a acercarse sigilosamente hacia mi.

- Tenés que despedirte -Jungwon me tomo de la muñeca sin dejarme hablar- Sunghoon, por favor, date cuenta que estás arruinando la relación que tenés con Sunoo.

Lo miré con una expresión de culpa, yo era el que más sabía eso ¿No era obvio?

- Ya sé, reaccioné muy mal -me quejé al recordar cómo me había escapado de su casa- pero nunca me dijo nada, ese viaje estaba planeado hace dos semanas y nunca se atrevió a decir algo relacionado a eso.

- Entre más trates de buscar una explicación, más te vas a confundir -Jay agregó- Por culpa de nuestras inseguridades, podemos llegar a auto-sabotear nuestras relaciones alejándonos ante el error más estúpido.

Por un momento, Jay me miró de una manera comprensiva, quizá había pasado por lo mismo que yo.

- ¡Sunoo te ama! -bufó Jake- Desde el lunes está rogando a qué prendas tu teléfono, preguntando a tus allegados si estás bien, esperando para ver si llegarías a darle una explicación.

Era inevitable, las lágrimas ya brotaban por mis ojos descontroladamente, cerré los ojos para controlar estás pero fue peor ya que empezaron a salir más.

Entré sollozos trate de justificarme:

- ¿Creen qué es fácil para mí? Yo también lo amo. El hecho de que me haya ocultado algo me hizo sentir que no era nada para Sunoo -hice una pausa para sorber mi nariz- Sí ¿Y qué si me presento como su novio? ¿Acaso cambia el hecho de que no me haya tenido la confianza para contarme algo tan... Tan innecesariamente dramático?

Todos nos quedamos en silencio, lo único que se escuchaba era mi intento de parar de sollozar, pero era imposible.

Ni-Ki se acercó a mí para apoyar mi mano en su hombro.

- Te entendemos, nunca dudamos de que los dos se gustaban -suspiró- Estás por terminar Sexto año de secundaria con un promedio excelente, amigos que te adoran, gente que te banca para lo que sea, y a nada de empezar la universidad... ¿De verdad vas a tirar a la basura tantos momentos que viviste con Sunoo?

Entonces, por fin lo había entendido, era eso, Sunoo era lo que me motivaba realmente a seguir esforzándome, nunca sentí otra cosa por Sunoo aparté de enamoramiento, siempre fue eso y era lo que me impulsaba para seguir.

Momentos con Sunoo llegaron a mi cabeza, cuando nos conocimos, cuando lo ví en el colegio por primera vez, cuando me ayudó con historia, todas las tardes que hacíamos las tareas juntos estos últimos meses para después dormir juntos hasta que él se volvía a su casa.

¿Por qué no lo pensé antes?

- Siendo sincero, me da envidia como los dos se miran a los ojos -Heeseung soltó una risita- Y sin mencionar la vez que cogieron en el auto de Jay y pensaron que no nos dimos cuent-.

tarado ! sunsunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora