- Puede parecerte una ternurita, pero será todo un engaño, no te atrevas a abrir esa jaula Jisung...
- Está bien, está bien, entiendo, es tan solo un conejito, ¿Qué podría hacerme?
- No es un conejito cualquiera...
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Jisung sonrió y asintió dirigiéndose a la habitación, dejó a Jisung con cuidado sobre la cama y se fue hacia el armario para dejar ropa cómoda del menor sobre la cama. A los minutos, Jisung ya se encontraba todo cambiado sobre la cama, esperando a que el mayor terminara de cambiarse, el menor se encontraba totalmente embobado por el cuerpo del mayor, hasta no se había dado cuenta cuando Minho se encontraba ya listo, y justo frente a él.
El camino hacia el parque había sido algo tranquilo, y... bastante lento, razón principal: A Jisung aún le dolía su trasero y piernas. Por esta razón Minho tuvo que cargarlo en su espalda y caminar de esa manera con el menor, todo el camino. Jisung no era pesado, pero los brazos de Minho tampoco soportaban mucho. Una vez que llegaron, Minho pagó por ambas entradas al parque, y se adentraron.
- A cuál iremos primero Minnie?. - Pronunció el menor con curiosidad y observó al mayor.
- Que te parece... La casa del terror?. - Minho observó al menor negar de inmediato -. La montaña rusa?
- Oh! Ese si~ vamos, vamos.
Ambos se dirigieron a la zona donde se encontraba la montaña rusa y observaron lo grande que era Jisung tragó en seco pero no sé detuvo. Ambos se habían subido en el primer vagón, y mentiría si dijera que Hyunjin no tenía miedo, ya que sí, el menor comenzaba a temer.
- Minnie... Dura mucho...?. - Dijo observando al mayor mientras tomaba su mano.
- No lo sé la verdad, es la primera vez que vengo aquí. - Pronunció Minho mientras dirigía su vista al menor -. Tranquilo, puedes apretar mi mano cuando quieras.
Jisung asintió y mantuvo la mano del mayor entre las suyas, cosa que las apretó apenas el juego comenzó a moverse con lentitud, se aproximaba a una gran bajada, Minho se encontraba emocionado, a lo contrario de Jisung, el solo quería que todo acabase.
Subidas, bajadas, vueltas, y todo eso a una gran altura, al bajar de la atracción, el menor aún se encontraba mareado, y al tocar el suelo al fin, se tiró a abrazarlo. Minho solo reía y pronunciaba algo bajo "Dramático".
- Vamos al siguiente Hannie?. - Pronunció Minho extendiendo su mano a la del menor. Éste asintió levemente y se levantó, tomando la mano del mayor.
- Vamos... - Observaron cada una de las atracciones hasta que ambos observaron un gran carrusel dorado con caballos y carruajes -. Allí... Vamos allí. - Dijo Jisung tironeando de la mano del mayor. Ambos se encontraban llendo a la atracción que Jisung eligió, al llegar, se acomodaron sobre unos caballos que estaban uno al lado del otro, y tomaron sus manos antes de que la atracción comience a girar de a poco, y los caballos comenzaran a subir y bajar con lentitud. Jisung y Minho se sonrieron y entrelazaron sus dedos.
El resto de la tarde se la pasaron en diferentes tipos de juegos, la mayoría los dejaban algo mareados, pero para ellos valía la pena. Minho quería llevarlo a la vuelta al mundo, así que no dudó en dirigirse hacia aquella atracción.
Ésto sería divertido.
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