ℜ𝔞𝔟𝔟𝔦𝔱𝔠𝔞𝔤𝔢 🐰 𝔪𝔦𝔫𝔰𝔲𝔫𝔤

🐇 Extra 🔓

Hyunjin se encontraba dando vueltas en la casa esperando a que su novio llegase.
-Hyung?- preguntó un Jeongin que entraba por la puerta de entrada.

-Oye en donde has estado?! No tienes idea de cuánto me preocupe!- dijo exaltado y cambio su expresión cuando se dio cuenta que faltaba alguien.

-Espera, y Felix?- preguntó un hyunjin preocupado.

-Eres una basura Jin, Félix se enteró que tú y yo no éramos hermanos, dijo que ya no quería nada, y se fue- dijo tranquilo Jeongin.

-Ja ese niño no va a poder vivir sin mi polla, sabes cómo me rogaba que se la metiese? Sabes pequeño hora deberás pagar las consecuencias Jeongin porque no creo que el se enterase solo- dijo acercándose al menor para tomarlo de la cintura.

-Hyunjin hoy no... Me sigue doliendo- dijo para después soltar un gemido de dolor cuando el mayor apretó su trasero, hizo puchero.

-Asi que te duele? Que mal pero con ese puchero y ese gemido la despertaste, tampoco la voy a dejar así y a ti tampoco te gusta que esté así no?- dijo mirando el gran bulto que se había creado en su pantalón corto, para después pegarlo hacia la pared y comenzando a besarlo.

Al inicio Jeongin se trato de librar de el pero el mayor le ganaba en fuerza.

-V-vayamos a mi cuarto, hyung -pidió, separándose para respirar-. Aquí n-no.

-Vayamos al baño -sugirió en cambio Hyunjin-. Necesitamos una ducha caliente, ¿no crees?
Antes de que intentara responder, Hyunjin ya había tomado su mano y se encaminó escaleras arriba, llevándolo a él. Jeongin tampoco opuso mucha resistencia, igualmente, y lo siguió de cerca hasta el baño, porque de haber podido responder, hubiera dicho un rotundo <sí, sí lo creo>. Una vez que estuvieron en el cuarto de baño Jeongin se encargó de cerrar la puerta detrás de ellos y Hyunjin volvió al ataque, tomándolo del cuello con ambas manos para besarlo con la misma voracidad de siempre. Jeongin llevó las manos al pantalón de Hyunjin para bajarle la cremallera, y con algo de dificultad debido a que este se había pegado a las piernas bien formadas del mayor, finalmente logró bajarlo junto con el bóxer negro. Hyunjin lo imitó y no pasó mucho tiempo para cuando los dos se encontraban completamente desnudos y con el cabello hecho más bien un desastre, aunque poco les importó. Entonces se metieron juntos a la ducha, y mientras que Jeongin regulaba la temperatura del agua abriendo y cerrando los grifos, Hyunjin se había abrazado a su cuerpo por la espalda y se encontraba repartiéndole besos en la nuca y en los hombros, logrando sacarle más de un jadeo. Y apenas el agua estuvo tibia y aceptable Jeongin mandó la cordura al diablo y se dio la vuelta para apropiarse de la boca del mayor, tomándolo del trasero para acercarlo más a él y sentir cómo sus erecciones se rozaban. Empezó entonces con los movimientos circulares de siempre para crear esa fricción tan deliciosa al frotar su miembro contra el de Hyunjin, gimiéndole en la boca y deleitándose cuando el mayor hacía lo mismo, ahogando esos gemidos roncos en el beso.

Entonces Hyunjin llevó una mano a los dos miembros que se rozaban y los rodeó con ella, comenzando a masturbarse y masturbando a Jeongin al mismo tiempo. El pelinegro, por su parte, presionó con fuerza los muslos de Hyunjin, separándose de la boca ajena para llevar los labios al cuello del mayor y comenzó a repartir besos suaves para no dejar marcas. El baño entero se lleno del sonido de los gemidos que los dos dejaban salir, combinándolos con el ruido del agua cayendo sobre sus espaldas y la lluvia desde afuera que seguía sin detenerse. Jeongin no pudo contenerse y comenzó a simular embestidas a la mano de Hyunjin, aumentando la fricción, y hubiera seguido así hasta correrse si Hyunjin no lo hubiera soltado repentinamente.

-Vayamos a tu habitación -ordenó el mayor entre jadeos-. Te necesito, pero quiero hacerlo en una cama.

Jeongin asintió torpemente, medio aturdido todavía, y se apresuró en cerrar el grifo para salir de la ducha. Tomó una toalla para envolver a Hyunjin con ella pero el mayor apenas le dio tiempo para hacerlo antes de cargarlo, tomándolo de los muslos al mismo tiempo que los apretaba dejándose llevar por el placer. El pelinegro tuvo que rodear el cuello del mayor y aferrarse a él para que Hyunjin pueda caminar hacia su habitación cargándolo, todo esto mientras que el mayor no soltaba sus labios, succionando y jalando con los dientes, dejando que su erección chocase contra los testículos de Jeongin en el proceso. Cuando finalmente llegaron a la habitación del menor apoyó la puerta empujándola dificultosamente con una pierna y se dirigió directamente a la cama para dejar caer a Jeongin sobre esta, y antes de que intentara algo el mayor lo tomó de la nuca y atrapó sus labios nuevamente, incapaz de darle tregua. Como pudo se colocó a horcajadas sobre el mayor, poniendo una pierna a cada lado del mayor, sin romper nunca aquel beso que comenzaba a dejarlo sin aliento. Y una vez que se acomodó sobre Hyunjin supo lo que debía hacer: comenzó a frotar su trasero contra el miembro del mayor, haciéndolo gemir y gimiendo él también. El mayor llevó las manos a su trasero tomándolo con fuerza y separándolo un poco de modo que Jeongin acabó prácticamente masturbándolo con el trasero. Sentía cómo la erección del castaño se acercaba a su entrada y esta vez sí estaba preparado, tenía un pote de lubricante sin estrenar guardado en su cajón, de modo que en cuanto la necesidad de sentir a Hyunjin dentro suyo fue demasiado, le bastó con estirar una mano hacia la mesita de noche junto a la cama para tomarlo.