¿Temes Amar? Adaptación Larry

Capítulo 8

Los chicos se iban a dormir tras haber pasado el resto de la tarde en la sala de cine improvisada, aunque Louis se puso un poco raro y callado después de la primera película, Harry no le dió mucha importancia (ó eso creía pensar).

- ¿A dónde vas? - preguntó el mayor desde la cama.

- Me voy a duchar rápidamente - le regaló una pequeña sonrisa (la cuál no le llegó a los ojos) y se metió al baño.

Harry decidió no preguntar y dejarle su tiempo.

¿Y si tiene razón y vamos muy rápido? - Se preguntaba sentado en el centro de la cama sin dejar de mirar la puerta del aseo - A lo mejor lo he agobiado... no sé... no creo.

Louis, por su parte, se encontraba delante del espejo, observando su reflejo con desprecio. Un par de lágrimas brotaron de sus ojos y un sollozo se escapó de entre sus labios. No quería que Harry lo escuchase por lo que se metió bajo el agua caliente y mientras se enjabonaba tanto el pelo cómo el cuerpo, dejó resbalar todas las lágrimas que había retenido durante la tarde.

Cuándo salió, se secó el pelo y pensó si ponerse su pijama de Stitch ó no. Decidió ponerse una sudadera larga y un pantalón de chándal.

Al salir vió a Harry sentado en la cama y (segundos después) delante suya, con un pantalón gris y el torso desnudo.

- ¿Qué te pasa? - lo miró con una preocupación que hace mucho nadie usaba para dirigirse a él mientras sujetaba sus hombros con las manos.

- No me pasa nada - dijo con una sonrisa sin dientes que escondía un millón de cosas.

Harry llevó una mano hasta su mejilla y acarició ésta con el pulgar, a la altura del pómulo.

- Tus ojos dicen lo contrario - lo contradijo con paciencia.

Louis miró hacía abajo, esquivando la preocupación del mayor.

- ¿Te puedo dar un abrazo? - preguntó en un leve susurro roto.

El mayor lo atrajo hacía sí, haciendo que hundiese la nariz en su cuello y rodease su cintura con los brazos mientras Harry tenía una mano en el pelo de su novio y un brazo sobre sus hombros, abrazándolo con fuerza.

- Shh... me tienes aquí para lo que quieras, ¿sí? - le decía en el oído.

A los segundos, el mayor comenzó a notar como se le humedecía el cuello y unas gotas resbalaban por su pecho; luego se percató de que la espalda del más joven subía y bajaba rápida y temblorosamente.

Cuándo Louis se tranquilizó lo suficiente, levantó la cabeza separándose del torso de su acompañante y se quedó con los brazos a los lados de la cintura de éste; sorbiendo por la nariz e hipando cómo un niño pequeño.

Harry le puso las manos en la cara y secó con los pulgares sus mejillas inundadas.

- ¿Mejor? - preguntó con inquietud.

Louis asintió con la cabeza y le regaló una débil, pero sincera sonrisa.

- Oye, ¿y tu pijama de Stitch? - preguntó cambiando de tema y mirándolo por todos lados.

- Pues... - tragó saliva - encontré ésto antes - mintió, creyendo que sería mejor así.

- ¡Ay! Pero a mí me gusta verte con él - hizo pucheros.

Louis se rió, pero sin soltar ninguna carcajada y sin mover los labios ni un milímetro; sólo soltó aire por la nariz cómo si no tuviese fuerzas para reír en condiciones. Fué hacía el baño y se cambió de ropa.