Buenos días -Rosario y su hija saludan mientras pasan por el lado de dos bellas mujeres y un guapo muchacho-
Buenos días -Responde el único chico, las dos mujeres se dan la vuelta y sus caras son de sorpresa y desagrado- ¿Qué pasa? -Juan David mira a su madre y tía- hey ¿y esas caras? Parece que vieron un fantasma ¿la... la conocen? -Las hermanas no responden-
¿Y esas señoras qué? -Valentina le dice confundida a su mamá- Si las miradas mataran, estaría cavando tu tumba ahora.
Esas son las hermanas Elizondo, de buena familia pero unas salvajes poco educadas.
Ah... con razón... -Dice pensativa-
Si, y la peor de todas es Sara Elizondo, sí te contara como era ella antes.
Mamá, me refiero a que con razón te miraron así, gente chismosa me contó algunas cosas tuyas... eres casi que famosa en este pueblo. -Sonrie de lado al ver la cara de enojo que tiene su mamá- Pero para nada son como dices, realmente son muy bonitas y elegantes -Dejan de caminar y mira a las mujeres disimuladamente-
¿Bonitas? ¿Elegantes? -Se burla- Yo las veo muy normalitas.
Bueno, aún así una de ellas a pesar de ser "normalita" se quedó con el supuesto amor de tu vida...
Ay hija, como se nota que no conoces a los hombres, ellos no saben cómo enfrentarse a su soledad y necesitan a una nueva mujer para olvidar a quien tanto amaron, hasta les da igual la que sea. -Dice tranquilamente y después intercambia miradas con el chico Reyes-
Y aquí vemos a una futura asaltacunas -Valentina se burla al notar las miradas que su madre le da al chico-
Cállate, no digas esas tonterías, los niñitos para no me gustan -Rosario le dice con seriedad- y respeta que soy tu mamá.
¿Entonces si me meto con él no te enojas? -No habla en serio, solo quiere ver la reacción de su mamá-
Inténtalo, pero no te hagas muchas ilusiones, seguro ni la hora te da -Mira a su hija de arriba a abajo- te falta mucho para ser una verdadera mujer. -Sonrie y sigue su camino junto a Hunter que escucho todo-
Te falta mucho para ser una verdadera mujer -imita a Rosario con voz chillona y con mala cara-
Definitivamente la relación de madre e hija no es muy buena, pero Valentina está acostumbrada, Rosario siempre ha visto a sus hijas como a una competencia. Aunque eso sí, se lleva un poco mejor con Valentina que con Muriel.
-Valentina llega al bar que le recomendaron y mira el lugar con fastidio. Definitivamente ha estado en mejores lugares -disculpa- Le dice a un muchacho que sale del lugar acompañado de otro- ¿Este es el famoso bar de Felix Carreño?-
-Ambos muchachos dejan su cara de seriedad a un lado por lo sucedido minutos antes en el bar y le sonríen a la joven-
-El mismo señorita, pero le recomiendo que no entre ahí, es un bar de mala muerte- León le dice-
Sí, de eso me doy cuenta –hace una mueca– definitivamente que mal gusto tienen los que recomendaron esto.
-Podemos llevarla a un mejor bar -Sonrie de lado-
Es muy amable, pero no salgo con extraños.
Bueno, yo soy Erick y el es mi hermano León, ya no somos extraños –Erik se une a la conversación y la mira coqueto- ¿Eres nueva en el pueblo? Jamás te había visto por aquí.
Sí, hoy llegue -Le responde con aburrimiento mientras mira a su alrededor-
Con razón, nunca podría olvidarme de una mujer como tú.
Estamos a sus órdenes señorita, no todos los días encontramos a una mujer tan hermosa en este pueblo. –Leon se le adelanta a su hermano, quién tenía pensado decirle lo mismo-
-La joven se aguanta las ganas de reír por el intento de coqueteo cliché- Eso seguro se lo dicen a todas -los mira por un momento pensativa, sus nombres le recuerdan los sucesos de la mañana- Esperen, ustedes son los famosos mellizos reyes ¿verdad?
Los mismos -asiente Erick con orgullo- ¿y... no piensas decirnos tu nombre?
-Soy Valentina-
Bonito nombre, ¿Valentina qué?
Valentina sin apellido, gracias por la ayuda muchachos, nos vemos por ahí -Dice Valentina con diversión y coquetería para después alejarse de ahí bajo la mirada de los mellizos-
Está buena la condenada... se ve que es ese tipo de mujer que le gusta entusiasmar a los hombres para luego hacerlos sufrir –Dice Léon sin dejar de ver cómo un tonto a la chica–
A mí eso no me importa, yo sí que me aguanto malos tratos –Erick sonríe igual de atontado que su hermano-
-Los mellizos finalmente salen de su trance cuando Valentina se sube a un automóvil convertible rojo y desaparece de su campo de visión-
Volví. 😘
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Pasión de gavilanes ² || Andrés Reyes
AléatoireAndrés Reyes se enamora perdidamente de Valentina Caballero Montes. Una ambiciosa, indiferente, talentosa, y hermosa joven que ama el canto y la música. ¿Será que la historia de Rosario y Franco se repetirá? ¿O sus hijos no seguirán los mismos pasos...