Clan Kim

Extra IV: Finalmente

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—¡Kim Taeyeon! Te he dicho que recojas tus cosas— exclamó Jungkook molesto —No puedes dejar que los demás recojan tus líos, si no lo haces no habrá postres después de cenar.

—Pero mami— hizo un puchero la niña de diez años.

—Nada de mami ni pucheros, arregla tu habitación si no quieres ser castigada— exigió —De lo contrario tendré que decirle a papá V.

—¡Ya voy mami!— exclamó mientras corría alrededor de la habitación limpiando.

—Mami, Hobi-hyung se siente mal— lo llamó un pequeño de siete años.

—Gracias Soobinnie, ahora iré a ver a tu hermanito— asintió mientras caminaba rápidamente a la habitación de su hijo de trece años.

—¿Hoba? ¿Cariño estás bien?— cuestionó entrando a la habitación.

—Mami me duele mucho— susurro mientras se revolvía en la cama —No me gusta, siento mucho calor y mi boca duele, me pican los dientes.

—Oh por la diosa Luna, finalmente te estas presentando como un alfa— murmuró sorprendido, porque su pequeño solo tenía trece años y la presentación era usualmente a los catorce o quince años.

—Mami— sollozo.

—Tranquilo Hobi, mami está aquí— se acercó para mimarlo mientras el dolor pasaba levemente saco su teléfono y decidió llamar a sus alfas —Taehyungie, Hobi se está presentando ¿pueden venir y traer a un doctor?... se presentó como alfa... por eso quiero que traigas a un doctor, no sé qué pueda darle, los supresores no son recomendados para menores de edad... bien, aquí los veo.

—¿Papá?— cuestionó Hoseok calmándose levemente gracias al olor de su madre.

—Si cariño, tus padres ya vienen en camino— asintió —¿Te sigue doliendo?.

—Ya no tanto, solo mis encías pican mucho, como si quisiera morder algo— suspiró sintiendo las caricias en su cabello.

—¿Mami?— cuestionaron tanto Taeyeon como Soobin.

—Taeyeon, princesa ¿podrías pedirle al señor Ahn que deje salir a todas las omegas que trabajan aquí? Diles que tienen tres días libres y que no pueden acercarse a la mansión, si tienen algún problema porque no tienen donde quedarse, entonces dile que les arregle una habitación en algún hotel y que pagaremos por los días que se queden allí.

—Sí, mami— asintió saliendo corriendo para hablar con el mayordomo, taeyeon era una niña muy inteligente.

—Soobinnie ¿puedes ir al baño y mojar una toalla de manos? Con agua fría por favor— pidió.

—Sí— asintió caminando al baño del cuarto de su hermano mayor.

—Cariño ¿viste a alguien que te haya llamado la atención hoy?— cuestionó curioso.

—Hoy llego un niño nuevo— murmuró intentando mantenerse despierto —Venía de la manada de Seúl, creo que sus padres son embajadores, hablamos todo el día de los lugares que había visitado— comentó con una pequeña sonrisa —su olor era dulce, muy lindo, olía a las galletas que papá Taehyungie hace para navidad.

—¿Cuál es su nombre?— cuestionó.

—Jackson— susurro para después caer dormido.

Jungkook recibió la toalla mojada de su pequeño hijo y la acomodo en la frente de Hoseok, después de lo que escucho, estaba seguro que Jackson sería el omega destinado para su hijo mayor. Estaba feliz, pero seguro Vante no estaría de acuerdo con eso porque su hijo apenas tiene trece años, lo entendía pero no era algo que ellos pudieran controlar.