Volviendo a soñar despierta...
Vi la hora en mi celular, eran las 11:31 de la noche.
Estaba triste, y no lo sabía.
Mi cerebro no registraba que lloraba hasta que sentí mi cabello empapado de lágrimas y caí en la cuenta de lo abrumada que me habían puesto esos pensamientos que tenía a esa hora, y bueno... A todas las horas, en verdad.
¡Ya hace 2 años!
Hundí la cara en la almohada y como a menudo... Lloré y lloré. Quería esconderme en un sótano, quería huir a China, quería irme, huir de la miserable conciencia que tenía.
Pero lo que más deseaba en ese entonces: retroceder el tiempo, encontrarme en ese mismo 13 de mayo y esta vez... ¡frenar!
ESTÁS LEYENDO
No hay título para la historia
Teen FictionLali Quintero, una venezolana. Adriano Puia, un boricua. No hay título para la historia, es un libro fresco y juvenil que nace de la historia de dos adolescentes latinoamericanos que no saben nada de la vida, pero ellos creen que sí. Cada uno con s...