La Caída Del Héroe

Capitulo 10: El héroe Sanador sucumbe

-Guren, espera tenemos que ir por él, por favor!

- No, camina!

- Te lo pido, en serio vas a abandonarlo en las manos de ese hombre?!... Guren lo destruirá... Por favor tenemos que volver!

-Dije que NO , él ya me ha dado sus últimas órdenes y debo cumplirlas, así que no te detengas y sigue caminando

-Ultimas órdenes? De que hablas?

-Camina y cállate!!

-Dime que te dijo, volverá? Él está bien? A qué te refieres con que te dio sus últimas órdenes!!
por favor, Guren, necesito que me digas que pasó!!!!!

Eve estaba llorando, se resistía a seguir los pasos de Guren quién la sujetaba por la muñeca jalandola cuesta arriba en aquella montaña

-Eve Resse Basta!!! No podemos volver, ya no hay vuelta atrás, todo esto salió mal y no podemos cambiar nada, no podemos volver... no podemos ir a salvar a alguien que ya no existe...

Dijo la joven rubia con algo de melancolía en la voz, mientras unas cuantas lágrimas caían de sus ojos

-Qué?

La de cabello color plata se quedó pasmada sin ser capaz de entender las palabras de su acompañante

-Bien... Cómo quieras... No pensaba decírtelo pero... Su conexión conmigo se ha roto

-No, acaso eso es mínimamente posible??!!

-Lo es, cuando el poder del amo... No, cuando el maná de la persona con la que fui creada es destruido o corrompido, la conexión automáticamente se corta.

-Estas diciendo que él... Murió?!

-Físicamente, no, pero su poder ya no existe, él ya no es más el héroe sanador

-Pero... Qué pasó, cómo algo así fue posible?

-Es mejor que no lo sepas, hay que seguir moviéndonos!

Guren tiró de nuevo de la muñeca de Eve, obligándola a caminar nuevamente, ambas caminaron en silencio, solo el crujido de las hojas siendo aplastadas por sus pies eran el único ruido que podía percibirse

.
.
.
.
.

Horas después

Ambas se detuvieron en un oscuro paraje que se encontraba en lo alto de una de la cadena de montañas que se encontraba al sur del territorio demoníaco, justo frente a la entrada de lo que parecía ser una cueva

-Por qué me trajiste a este lugar?

-Porque debo cumplir sus últimas órdenes

-Maldicion, Guren, dime qué fue lo que pasó,  dónde están Setsuna y las demás? Que órdenes te dio?

Guren se giro para poder tener de frente a la chica demonio, mientras su maná aumentaba cada vez más y a la vez una enorme luz blanca se formaba entre sus manos

-Su última orden fue... Protegerte a toda costa, hasta que él vuelva

La demonio se desconcertó, estaba a punto de pedir explicaciones a su compañera cuando aquella enorme esfera de luz que llevaba haciéndose más y más grande en su mano su lanzada a ella

-NO, ESPERA, GUREN!!!

Fue lo último que atino a decir antes de que su frágil cuerpo se desvaneciera sobre el piso lleno de hojarasca.

†*†*†*†*†*†*†

Bullet se había detenido, todo estaba en silencio, nada se escuchaba, el eco de la caída de ese pesado trozo de hierro se había ido, ese silencio sepulcral indicaba que algo peor estaba por pasar cuando esté fue interrumpido por los pesados pasos de ese alto y fornido hombre, que después de poco se paró en seco cuando estuvo frente a su víctima, se hinco admirando su mirada llena de miedo y sus ojos casi desorbitados, su rostro inerte y casi tan blanco como una hoja de papel salpicada por aquel tibio y dulce líquido rojo junto a unas cuantas partículas de carne que adornaban aquel juvenil rostro, Bullet se hincó sin quitar su vista de él y sonrió... Sonrió por lo que estaba creando, por lo que sus ojos veían, porque sabía que aquello que tanto había anhelado estaba cerca, tal vez demasiado de lo que para él había sido una simple fantasía durante tanto tiempo, así que no pudo resistirse y en un instante selló sus gruesos labios en los suaves y pálidos del chico, el cual ni siquiera se movió, aquel beso comenzó siendo tierno y cálido, casi como aquel que un amante le da al amor de su vida, pero poco a poco fue mezclándose con la lujuria, el sadismo, lo grotesco y lo asqueroso, Bullet se dejó llevar, ese horrible beso le sabía a sangre, pero lejos de serle  desagradable le sabía a gloria, su boca ya no era gentil con el castaño sino violenta y más allá de parecer un beso ahora parecía que él buscaba alimentarse del chico ya no quedaba ni un solo rastro de la suavidad con la que comenzó, su lengua había comenzado a asfixiar al chico, inundaba absolutamente toda su boca sin si quiera darle paso al oxígeno, su amante se estaba desesperando y luchaba inútilmente con su débil cuerpo para tratar de alejar a ese hombre que no solo lo estaba ahogando sino que también estaba maltratando su cuerpo, Bullet no era consciente de la fuerza que estaba aplicando en su retorcido beso y sus violentas caricias, el hombre tenía aprisionada su delgada espalda con sus fuertes manos y presionaba tanta fuerza que lo estaba lastimándolo, todo se volvió más grotesco cuando el hombre sacó por fin, su lengua de la boca del chico, el cual comenzó a toser ante la inesperada y tan necesitada entrada de aire a sus pulmones, ahí, su verdugo comenzó a lamer el rostro y el cuello del castaño, saboreando la sangre e ingiriendo las migajas de carne que tenía adheridas al rostro, la escena era simplemente repulsiva, era casi como ver a un león lamer con paciencia a su presa, mientras, que este, con cada lamida imagina su sabor y lo bien que sabrá en su boca, para justo después engullirla de un solo bocado