Llegamos a la casa de Alan, cuándo ve a Adry queda impresionado, y pone una cara que dice "trajiste una callejera" pero luego socializan y el nos apolla.
- Bueno, lisel, no pensé que me saldrían con estas.
-Alan, Adry me puede ayudar, por favor.
-bien, pero tiene que ayudar con varios gastos, así que tiene que buscar algo con lo cuál ganar dinero.
-Bien, par de tontos, sigo aquí, no se preocupen, ayudaré. Dice Adry.
Entonces noto que hay un día precioso y antes de irme Alan hace algo que me estremece.
-Hey Lisel, lo olvidaba, feliz cumpleaños, vamos a mi cuarto, te tengo un regalo.
- En...serio? No puedo creer que Alan lo supiera, y menos que me diera algo ¿que será?
Subimos hasta su cuarto, en el segundo piso. Y ahí está, una viola hermosa que en lugar de tener el típico caracol tiene un león precioso, noto que se me vienen las lágrimas y me siento porque me da mareo
-Alan, es... En ese momento rompo a llorar ¿por qué?
- Es tu regalo Lisel, te lo mereces.
-Gracias, pero no puedo aceptarlo, es muy costosa, no se si pueda...
- por favor lisel, es tuya! Adelante
En ese momento llega Adry, creo que ya estaba ahí mirándonos hace mucho y lo que hace me deja muy tensa.
-Lisel, no sabia que cumplias años, ten, mi regalo. Me da una pistola, negra y muy... Fina, si, es como esas que veo en películas de ficción. Cuando la recibo me sudan las manos, pero por otra parte me siento feliz, o agradecida, porque, quizá ayude.
-Adr..y que es esto?
- Ay Lisel, la necesitas.
- De donde la sacaste? No puedo usarla. No se como.
-Eso es lo de menos, y yo te enseñare a usarla cariño
Alan! Por un momento olvidé que estaba con el, y que el estaba observando todo, cuando lo miro por el rabillo del ojo se ve nervioso e impresionado, como yo.
- ¿que opinas? Le pregunto.
- Que que opino? Lisel, trajiste no solo a una callejera si no a una callejera bandida!
Eso que dice me hace enfurecer, no hay derecho de insultar así a Adry, además ella me quiere ayudar, no es justo. Noto que se me encienden las mejillas y salgo de esa casa.