Con Rías y Akeno.
Bueno, ahora los que se rebelan contra mi reino, como tú, ya están condenados. -- hablo el de gabardina con sombrero que le tapaba la mayor parte de su cara. --
Prepárense para caer. -- la que hablo ahora fue su acompañante --
Ambos sacaron sus alas de caídos y emprendieron vuelo, Rías y Akeno solo los miraban.
Akeno. -- hablo la pelirroja y la mencionada con una pequeña sonrisa se da vuelta. -- con mucho gusto, buchou.
Alzando la mano izquierda, más arriba de ellos se empezó a generar unas nubes negras con rayos y le cayó encima uno, cambiando su vestimenta de batalla. --
Que?! ¿Ella es parte de un show fetiche de cosplay? -- pregunto mientras la apuntaba al ver el cambio en su vestimenta. --
Haciendo una posición de mano, la iginoro por eso, no es cosplay a su criterio no tan correcto.
Pero levanto ahora ambas manos, género varios círculos rojos con el emblema Gremory, todo se movieron haciendo una barrera para que no pudieran ir a ningún lado.Una barrera... -- hablo aún estando elevado por su alas alado de su acompañante que igual se quejó por la misma. --
Es grande la barrera. -- ahora dijo mittle mirando hacía izquierda y derecha rápidamente. --
No escaparan de esta barrera. -- soltó una pequeña risa Akeno con su mano derecha generando electricidad. --
Maldita! Era tu intención desde un inicio! -- Kalawarner miraba a ambas enojada desde arriba. --
Si, llegamos aquí para limpiar la suciedad, gracias por invitarnos otra vez. -- mirando a todos por pocos momentos si alguien se movía, la pelinegra entraría en acción. --
Están siendo ya muy molestos, los eliminaremos ya. -- esta vez hablo nuestra pelirroja ya ligeramente molesta y aún preocupada por la presión de hace un momento. --
Devuelta con Issei
B
ienvenido demonios -- saludo Raynare al ver entrar al castaño de golpe. --
Asia! -- el ver qué estaba colgada de una cruz con una vestimenta que no tapaba nada y mostraba algunas partes de su cuerpo su sangre hirvio del enojo, sentía una gran odio que estaba creciendo adentro suyo, pero no normalmente, como si no parará de crecer, por algo Meliodas es el pecado de la ira y eso le estaba afectando en gran medida en este momento.
Issei... San... -- levanto su vista viendo cómo los tres habían llegando. --
La ceremonia ya terminó, llegan tarde. -- en sus manos estaba una esfera de color verde claro y adentro suyo en el centro estaban dos anillos. --
[ Issei, le han quitado la Sacred Gear y lamentablemente morirá, aunque la rescates, no podrás salvar su vida. ]
En su cabeza se escuchó hablar a Dark, llegó muy tarde, otra vez no pudo hacer nada por ella, de que sirve tener esta arma extremadamente poderosa si no puede salvar a alguien cercano a el, se sentía inservible en ese momento pero la ira que sentía no tenía punto de comparación con nada que hubiera sentido, tanto odio, tanta repulsión hacia todos los que están en esta sala, tanta irá le está haciendo perder el juicio poco a poco.