El Deseo Que El Subconsciente Oculta

Le palpitaba el clítoris

Recuerdo que ese día llegué un poco más tarde de lo habitual al apartamento, las luces estaban apagadas y la luz de la luna se metía a través de los cristales de la casa, asumí que mi compañera estaba dormida, así que no encendí las luces, al entrar a la sala y llegar a las escaleras note que había un resplandor en las habitaciones de arriba, mi compañera seguía despierta, no quería molestarla porque sabía que debía estudiar para sus exámenes, así que subí silenciosa y sigilosamente para no  asustarla, estando ahí, noté que su puerta estaba entre abierta, me causo curiosidad ya que siempre permanece con sus puertas cerradas, así que me asome para percatarme de que hacía.

Para mí sorpresa, mi compañera la estaba pasando muy bien, tenía una blusa top gris y un short pijama gris que le encanta usar mientras está en la casa, tenía el celular en la mano izquierda, mientras con la derecha, sobeteaba sus labios vaginales con sus dedos de arriba abajo, metía los dedos a su boca y jugueteaba con su clítoris mientras cerraba los ojos e imaginaba que era ella la de aquel video porno que tanto estaba gozando ver.

Me quedé un rato ahí viéndola como voyerista de las circunstancias, no voy a negar que fue excitante verla ahí masturbarse con tanto goce, después de lo que hicimos la noche anterior, verla ahí disfrutando de sus propias caricias y toqueteos me puso de muy buen humor.

Continuó masturbándose así un rato, metiendo la yema de sus dedos en la vagina, luego metiendolos a su boca para manosear su clítoris mientras con su mente al cerrar sus ojos, se transportaba a la escena de aquel video que veía con tanto placer, el de una mujer tan excitada que cuyas eyaculaciones mojaban todo el lugar, a la cual le estaban haciendo tantas maldades placenteras que muy a pesar de saber que es falso y que mucho de ahí no puede hacerse tan fácil, provocaba emular, y eso era lo que ella tenía en mente, quería ser aquella mujer que humedecía todo el lugar con su nectar de placer, quería ver si podía llegar a ese nivel de excitación y placer, orgasmos tan húmedos que hicieran charcos en sus sábanas, estaba tan arrecha que no podía controlar sus movimientos lo noté por como temblaba, me recordó la noche anterior, cuando después de tanta estimulación entre en su interior con con cada centímetro.

Al final si logró hacerlo, arqueandose y utilizando sus dedos para estimular su punto G mientras apretaba sus hermosos senos con una mano y la otra llevándose al éxtasis ella misma toqueteando su flor de Venus, que parecía más una flor de loto por lo hermoso de sus labios, pronunciados, carnosos, un hermoso capuchón que cubría esa zona de miles de sensaciones por segundo, era delicioso de ver cómo gozo, parecía ser su primera vez en lograr ese nivel, al ver su cara de sorpresa al llegarse a chorro, lubricar tanto en un orgasmo fue extasiante para ella, pero quería más, quería sentir algo dentro de ella, quería sentir como ese jugoso toque al cielo se obstruía por algo grande y grueso hasta hacerla sentir que iba a estallar en gozo y desenfreno, la brisa de afuera entra por una de las puertas que da a la playa y abre la puerta por completo, dejando que la luz me enfoque y ella pueda verme, ahí, sorprendido, y muy excitado, tenía un jean industrial puesto y aún así mi erección se notaba a leguas, sorprendida y asustada se tapa y me dice lo siguiente

- ¡Por Dios Jose casi me matas de un susto!, ¿Que estabas haciendo ahí?

*Acabé de llegar Ivana, estaba tratando de no molestar, pensé que estabas estudiando, le dije para que no pensara que la vi gozando.

- Si, en eso estaba, pero me aburrí, me sentí algo excitada, decidí ver un video porno que me gusta mucho, y masturbarme para sentir ese placer qué tanto me gusta. ¿Me viste eyacular? Ya relajada y algo excitada de imaginar que yo la haya visto.

* No sabía que podías hacer eso, me encantan las mujeres que pueden lograr un squirting al nivel de mojar todas las sábanas, me excita la idea de llevarlas a esos niveles de placer.