Mientras estaba emancipado con ella, en los pensamientos de Nyux rondaba todo lo incorrecto que hacía, había roto la línea entre su trabajo y a quienes le servía y sobre todo había traicionado la confianza de Zeno Sama.
Aun no se lo había dicho pero sabía que tenía que hacerlo o si no se enterarian de una manera peor, sin embargo la culpa era reemplazada por placer y una sensación extraña cuando estaba con Illumi. Disfrutaba coger con el pero también disfrutaba los momentos de paz y de frías caricias que le revolvian el estómago de manera positiva.
Mientras ignoraba todos sus pensamientos Illumi se separó de ella lentamente y el hilo de saliva quedó colgando entre ambos. - Me gustaría intentar algo...
Illumi verifico que la ventanilla del auto del lado del conductor estuviese bien cerrada. - ¿Podrías ayudarme con este problema?
Illumi se sentó de lleno en el asiento, por sus piernas abiertas podía verse que estaba acalorado y bastante desesperado. - ¿Cómo se dice?
La mujer se burlaba con una sonrisa tan iluminada, torturaba a Illumi con la presión que ejercía en su pecho.
- Por dios... No seas así - Illumi rogaba por placer - Te lo suplico mi Querida Tekubi...
Justo cuando estaban a punto de tener un ligero encuentro entre sus bocas el auto se detuvo.
- Illumi Sama hemos llegado al hotel - Anuncio la voz del otro lado de la ventanilla.
- Vaya... Mierda - Illumi acomodo su postura al igual que ella y salieron del auto.
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Llegando al hotel al momento de la recepción, Nyux se mantenía serena y callada, simulando su nerviosismo pues sentía varias miradas puestas en ella. Cosa que sí, era cierta, muchos que pasaban le.obrsevaban sin disimulo incluso algunos susurraban a sus espaldas cosas obscenas que le incomodaban y le hacían recordar odiosos momentos.
- Gracias - Mencionó Illumi quien quedó sorprendido ante la inercia de Nyux. - ¿Te pasa algo?
Sono algo distante, pues no era de recurrir a cariños y apodos dulces en público. Nyux negó con la cabeza. - Illumi Sama deberíamos apurar el paso si queremos llegar a tiempo con su socio.
Intentaba evadir el tema, pero el Zoldyck no confiaba de su palabra.
Soltó un suspiro y chasqueo los dedos. Ya en elevador el silencio era incómodo y la tensión se sentía. Ese era un problema para ella, momentos atrás podía tenerlo casi pidiéndole matrimonio pero en otros momentos podía ser tan frío y distante.
Una vez llegaron al piso que le correspondía Nyux no salió del elevador. - Illumi Sama... Yo le esperare abajo.
Su mirada estaba apagada y había nulo sentimiento en sus ojos. - Como quieras.
La puerta del elevador se cerró y mientras Nyux sentía el leve cosquilleo producto del movimiento del elevador, Illumi estaba que se moría del enojo y la rabia se apoderaba de su ser.
