Sirius... Enamorado De Remus

La mentira de Remus

25 de diciembre de 1995

Como ya solía ser costumbre para todos, los Potter eran los que prestaban su casa para hacer la fiesta y cena de Navidad y este año no iba a ser la excepción, por supuesto que todos ayudaban a la causa y por supuesto que los primeros en llegar eran Sirius Black y Remus Lupin.

De nada ayudaba que el primer contacto con la chimenea de la casa Potter fuera la casa del contrario, es decir, si entrabas con polvos flu y los dejabas caer estos te llevarían de inmediato a la casa de la pareja y viceversa. Sirius ni siquiera se podía esperar hasta la noche para darle sus obsequios a Harry, nada más llegar a la casa abarrotaba los brazos del chico con numerosos regalos, Lily agradecía a Remus que por lo menos la mitad de estos no eran peligrosos y algunos incluso eran libros.

Ya entrada la noche se encontraban todos reunidos: Mary con su esposo muggle, Dorcas y Marlene, Peter con una chica que recién había conocido en el ministerio, Regulus y algunos otros conocidos y compañeros de trabajo que se unían a la velada. En un punto de la noche se reunieron Lily, James, Harry y Sirius mientras que el resto de amigos bailaban o estaban por allí hablando.

- Lo que yo no entiendo - comenzó Harry con el ceño un poco fruncido-. Es cómo Moony y tú llegaron a estar juntos? - Sirius rió con su risa perruna -. No me malinterpretes pero fueron amigos toda la vida, no se les hizo... No sé, raro?

Sirius volvió a reír y negó con la cabeza.

- Seguimos siendo los mejores amigos y lo más raro de todo Harras, es que no fué raro, fué lo más natural y cómodo, no sé cómo explicarlo - concluyó encogiéndose de hombros-.

- Yo te digo por qué - habló James con una sonrisa traviesa, Lily también sonreía a su lado-. Esos dos imbéciles eran pareja desde que pisaron Hogwarts, solo que hasta casi el último momento lo notaron.

- Siempre actuaron como una pareja Harry, todos pensamos en un momento que nos ocultaban su relación - Confesó Lily y Harry abrió los ojos sorprendido-.

- Entonces ya se gustaban desde siempre? No, no puede ser, siempre me haz dicho que eras popular con las chicas.

- Y lo era! Lo sigo siendo! Cuando andaba con chicas aún no me atraía Lunático, no de esa manera - aclaró Sirius -.

James bufó ante lo dicho y Lily y Harry rieron.

- Claro que sí! Tuviste todo un año llorando por él en lugar de hacer algo.

- Y lo hice!

- Porque te lo traje hasta la casa de mis padres Canuto! De lo contrario estuvieras hoy aquí borracho y llorando por él todavía.

Sirius se sonrojó un poco para sorpresa de Harry quién se mordía el labio para no burlarse aún más de su padrino, Sirius podía ser muy sensible en cuanto a su ego, en cambio a su padre no le importaba.

- Recuerdo que incluso tuve que ayudarte con el muérdago - confesó James -.

- Con el muérdago ? - preguntó Harry interesado-.

Sirius sonrió con el recuerdo.

- Tu padre nos dejó solos y conjuró un muérdago sobre nosotros pero fué Moony y su tradición muggle que nos ayudó con nuestro primer beso.

Harry hizo una mueca de asco al pensar en sus padrinos besandose, no era que no lo hicieran siempre pero Sirius siempre lo hacía para molestarlo porque el chico se sonrojaba avergonzado.

- Que tradición muggle?

- Una en la que tienes que besar a la persona con la que estás porque de lo contrario te dará mala suerte todo el año.

Harry frunció el ceño y negó repetidas veces, Lily sonreía divertida porque ya presentía lo que se venía.

- Canuto, no hay tal tradición muggle.

- Claro que sí, Moony sabe sobre cosas muggles.

- Padrino, Hermione es muggle y nos obligó a Ron y a mí a tomar Estudios Muggles, créeme no existe esa tradición - explicó Harry con calma-.

- Pero... - Sirius miró a Lily en busca de ayuda pero la mujer ocultaba su risa en el pecho de su esposo-.

Sirius abrió la boca sorprendido y sintiéndose un completo tonto, después de tantos años.

- Lunático! - llamó casi enfadado o mejor dicho, fingiendo enfado. Remus que hablaba con Regulus y con el esposo de Mary, volteó a mirarlo, se disculpó con su compañía y se dirigió hasta donde su pareja se encontraba con los otros tres Potter que parecían muy divertidos-.

- Qué sucede? - preguntó sentándose junto a él, un poco nervioso la verdad, Sirius lo miraba con intensidad-.

- Podrías por favor decirle a Harry sobre la tradición del muérdago ? Es que al pobre le están dando una mala educación en Hogwarts - comentó irónico y las mejillas de Remus se sonrojaron-.

- La tradición del muérdago? - preguntó nervioso-.

- La tradición del muérdago, por favor ilumina al chico, Lunático.

Remus tragó grueso y miró a Harry quién se mordía los labios para no reír, ahora sentía pena por él.

- Es una tradición muy vieja Harry, casi extinta, quizás por eso no está entre los temas del colegio.

- Eres increíble para salir de los problemas - elogió Sirius mirándolo con ojos entrecerrados-.

- Es un Merodeador - recordó Lily-.

- Ok, ok... No hay tal tradición - se rindió el castaño con sus manos en alto en son de paz-.

- JA! Entonces me engañaste - acusó Sirius-.

- Fué una pequeña mentira piadosa.

- Por qué?

- Solo buscaba una excusa para poder besarte ya que no parecías decidirte.

- JA! - gritó James está vez ganándose una mala mirada por parte de Black-.

- Iba a besarte solo que no sabías si tú querías! Pudiste haberme dicho luego.

- Ya pero entonces yo no hubiera ganado una apuesta - confesó Lily y Remus suspiró-.

- Que apuesta? - preguntó James curioso-.

- Tiempo después de eso Regulus se enteró y dijo que Sirius bien podría notar esa mentira y yo aposté a qué pasaría mucho tiempo antes de que lo supiera, gracias a eso acabo de ganar cincuenta galeones.

- Cincuenta galeones? - exclamaron Harry, James y Sirius al mismo tiempo, Remus negaba con la cabeza-.

- Los cincuenta galeones más fáciles que he ganado en la vida - corroboró la mujer-.

- No me creía esa apuesta y mucho menos que Lily la haya ganado tan fácil.

- Muchas gracias por eso, hermano - comentó Regulus quién se había acercado y escuchó a Lily decir lo último mientras miraba a Sirius -. No me lo puedo creer.

- Pero que iba a saber yo? - exclamó Sirius-. Solo fuí víctima de una trampa.

- Una que te convenía - gruñó Regulus haciendo reír a Harry-.

- A veces ser un sangre pura no es ninguna ventaja - dijo Lily recibiendo cincuenta galeones de un Regulus muy decepcionado de su hermano-.

***

Ahora sí es el fin de esta historia, a no ser....

Nah mentira, ahora sí es el fin de verdad, escribiendo la última parte del otro capítulo se me ocurrió escribir la escena de cuando Sirius por fin se entera de la mentira de Remus.

Espero haya sido divertido porque es la idea principal de la historia y si no pues... F por mí XD

Besos💕