Kazutora volvió asu casa, recordó lo sucedio de ayer y junto a él iban las chicas de la empresa para llevarse las cosas como evidencias
Rebuscaron todo, kazutora estaba viendo como estas observaban una cinta de grabación y se le hizo raro porque tardaban
—¿Que hacen? —observo la pantalla y abrió los ojos, estaban viendo la grabación del día de su boda, eso hizo que se molestara.
—Estamos anotando si hay algo sospechoso.
—ahí no hay nada, ya pueden irse de esta habitación —fastidiado.
Las chicas asintieron agarrando sus cosas para luego irse a otra habitación, kazutora se fijo en la pantalla y escucho todo que decían
—Yo Baji Keisuke, prometo respetarte, amarte, y cuidarte hasta que la muerte nos separe.
—Yo Kazutora Hanemiya... —rápidamente agarró el control para apagarlo de una buena vez.
—Tks... —se mordió las uñas.
Las chicas habían sacado todo lo importante para el peli-negro colmilludo, luego se fueron junto a kazutora que estaba estresado
En ese momento llegó baji, este al ver las luces prendidas hizo que sacara su arma, para luego sacar sus llaves e abrir la puerta
Al ingresar rebusco por toda casa, pero los rastros de su esposo se hacían nulos, ya que no habían y también pudo notar que faltaban algunos cosas de él. Eso hizo que corra hacia el sótano secreto que había en la casa
—Mierda, se llevó todo... —golpeó la pared.
No tuvo de otra que ir a hacerle una visita a su querido esposo
Al día siguiente, kazutora se encontraba en la oficina junto a sus compañeras, pero la alerta de los sensores de movimiento entre las tuberías (o como se llamen) hizo que se alertaran y sus chicas escanearon rápidamemte todo el lugar
El bicolor suspiro pesado, sabía que era su esposo y eso no le cabe duda
Lo llamo y sus sospechas fueron ciertas al ver como contestó con una risa
—Cariño, ¿Cuántas veces te dije que no vengas de visita cuando trabajo? —hablo.
—Tuve que ir a ver lo que hacías, y también quería verte. —soltó con burla.
—¿Puedes largarte de una buena vez?
—Pero si recién estoy llegando, no me hagas regresar. —el oji-miel se fijo en la cámara del sensor.
—Amor.
—Idiota.
—Auch, estas agresivo. —se apoyo en las paredes del ascensor.
—Amor, ¿Te puedes ir a la mierda?
—Quisieras. —el gruñido de baji lo hacia molestar mucho y tuvo que advertirle algo al peli-negro.
—Si te rindes, no te mataré. —sonrió.
—Déjame pensarlo.... No —soltó con ironía.
—Bueno lo pediste cielo. —hizo una señal a yuzuha y esta asintió.
Apretaron los botones de evacuación, avisando a todo el edificio que huyeran, ellas también con su rapidez agarraron su pistola que podía extender una cuerda para otro edificio, dispararon y esta se quedó intacta en las ventanas, con las arneses que tenían se lanzaron para irse resbalando con la cuerda, asimismo huyeron y kazutora estaba haciendo lo mismo pero justo llegó baji
Este solo le sonrió y con su mano se despidió para luego tirarse, el peli-negro empezó a dispararle, pero fallaba
—Carajo, Manjiro me matará.
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