Capitulo 6 [K&L]

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[NARRA KARA]

Al llegar al restaurante luego de ignorar las llamadas insistentes de Nia para no estrellar el auto y morir.

-Lo siento mucho. Se me pasó la hora trabajando. - Murmuro besando los labios de mi prometida y la mejilla de mi suegra. - Mariah, un placer verte. Luces radiante.

-Gracias, cariño. ¿No traes vestido? Es extraño verte de traje. - Murmura y me avergüenzo levemente.

-No, lo lamento. Salí del trabajo y no pude... Vestirme acorde a la situación. - Mi novia me regaña con la mirada y suspiro. - Para la próxima prometo traer un vestido.

-Bien. - Gruñe Nia. - Es momento de pedir para cenar.

-Sí... Tengo hambre. - Murmuro.

La cena va tranquila, Nia ordena un menú vegetariano para ambas. Aunque yo no soy vegetariana, lo intenté, pero amo las hamburguesas, admiro a la gente que logra dejar la carne y todo eso, pero yo soy... Más salvaje... Y la pizza con carne es de mis favoritas, Nia no me deja comer carne.

Pero Nia no vive conmigo y Winn suele comprarme pizza.

-¿Cómo va lo de tu padre Nia? - Pregunta Mariah luego de un rato. - Supe que conseguiste un testigo.

-Mamá. No es momento. - Murmura.

La observo con detenimiento. Está ocultandome algo.

-¿Qué testigo, Nia? - Pregunto. - Sabes perfectamente bien que no quiero que te involucres con los Kent...

-Kara. Ya hablamos de ésto. Yo a mis asuntos, tú a los tuyos. - Gruñe molesta. - Mamá silencio, disfruten la cena, por favor.

Se levanta y va al baño molesta. Observo como mi rubia que siempre tiene un palo metido en el culo se aleja molesta.

Joder, que toca cojones es.

-Entiendela, cariño. Está algo estresada con lo de sacar a su padre de la cárcel. Fue duro para ella verlo irse tras las rejas.

-Debería dejarlo ahí, suegra. Con todo el respeto... Su negocio arruinó más de doscientas vidas, tenía una red de droga y prostitución de menores. No es para menos.

-Él cambió, Kara.

Suspiro. Claro que no.

Ese hijo de puta lastimó a Luthor. Eso jamás se lo voy a perdonar.

-Debo hacer una llamada. - Murmuro.

Es mentira. Me levanto rápidamente de la mesa y salgo a buscar un cigarrillo.

Estrictamente prohibido por Nia. Nada que un par de mentas no solucionen. Joder...

Cenar con mi suegra siempre es complicado por como Nia se pone a la defensiva en todo momento, de por sí Nia tiene un carácter difícil.

La amo, pero joder, en ocasiones acomodarle las ideas de un cabezado en la tierra, pues claro que se oye tentador.

Cuando luego de unos minutos he sentido que se me ha ido el olor y sabor a tabaco, he entrado nuevamente al restaurante.

Dios, librame de ésta noche tortuosa.

Tal vez debería haber contestado a sus llamadas para chocar y morir antes de llegar aquí.

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-¿Irás conmigo o prefieres ir a tu departamento?

-Ven a mi departamento y folla conmigo... - Murmura Nia en mi oreja. - Podríamos hacerlo toda la noche si quieres.

-Nia, no me provoques. - Gruño al sentir su mano en mi entrepierna mientras conduzco.

-Vamos... Tengo ganas de follar hoy, aunque no debería premiarte, porque no llevaste vestido y fuiste con ésta ropa horrible.

-Es formalidad casual. - Murmuro. - Sabes que odio los putos vestidos, prefiero las faldas y las usé hasta los dieciocho.

-Con una falda sería más fácil follarte aquí. - Murmura. - Quiero que uses vestido cuando cenemos con papá el día en que salga de la cárcel.

Suspiro y presiono mis manos contra el volante. No dejará el puto tema de su padre.

-Nia, no cenaré con tu padre, te lo he dicho... - Me interrumpe con un beso y luego limpia el labial de las comisuras de mi boca.

-Ya te dije. - Murmura. - Llévame a casa y quédate conmigo.

Suspiro y niego.

-Te llevaré y me iré a mi departamento. Debo cuidar a Max.

-No es tu culpa que a ese mocoso no lo quisiera su madre. No debes hacerte responsa...

-Quiero hacerme responsable y yo soy la única madre que necesita. Ahora silencio. - Gruño.

Ella me observa molesta. Jamás me había atrevido a hablarle así, usualmente suelo ceder, porque de alguna manera siento que pelear o discutir es inmaduro.

Y tengo un trauma con que me abandonen por inmadura... Y no quiero perder a Nia, porque la amo.

Realmente estoy enamorada de esta rubia insoportable, quiero taparle la boca con cinta para que se calle pero a la vez quiero besarla todo el dia cada vez que la veo.

Conduje hasta su departamento y ella me ignoró todo el camino. Al bajar del auto la seguí y la tomé por la cintura.

-Nia... No es justo que discutamos por los demás.

-Kara, es mi padre.

-Sabes todo lo que hizo, yo no comparto los ideales estúpidos de tu familia.

-Kara. Es mi padre y sí tu no lo aceptas no tiene sentido que nuestra relación continúe. - Se gira y vuelvo a jalarla para robarle un beso.

Ella se deja llevar y la presiono contra el auto. Ella pasa sus brazos por mi cuello y sonrío en medio del beso.

Por lo menos aún es fácil convencerla.

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[NARRA LENA]

-¿Qué te gustaría que fuese? - Pregunta Sara acariciando mi brazo. Acabamos de hacer el amor.

Hoy necesitaba hacerle el amor. Me volví una aburrida en el sexo, usualmente no tenemos más de una vez a la semana o cada dos semanas, pero hoy... Necesitaba hacerla mía.

Extrañamente llegué a casa con ganas de tener sexo.

-Espero que sea un bebé sano, supongo. Sabes que la maternidad me asusta, pero sí tu crees que debemos avanzar..

-Claro que sí debemos. - Sonríe y besa mis labios. - Lo de hoy fue excelente...

-Gracias. También me gustó. - Murmuro.

-¿Qué hizo que tuvieras tantas ganas? - Pregunta. - No te había sentido tan deseosa jamas.

-No lo sé, sólo pasó. - Murmuro.

Claro que sé. Kara me dejó las hormonas completamente desatadas y ese es mi jodido problema.

Necesito hablar con William, necesito saber que cojones me pasa.

Sé que la extrañaba, sé que jamás la superé totalmente, pero yo creí que mi amor por Sara y nuestro matrimonio sería anhelado por mí... Eternamente.

Ahora me veo deseando follar a la misma castaña insoportable que me enamoró hace seis años.

¿Y ahora qué hago? Sara y yo estamos jumtas y hacemos lo que ella desea.

El bebé es... Algo que quiero, pero... ¿Y sí ya no estoy tan segura?

Joder. No, no... Debo mantenerme firme.

Debo mantenerme firme y sólo recordar con amor a Kara, pero no volver a sentirlo por ella.

Eso ya no.

No puedo... ¿No?

Luthor | SupercopDonde viven las historias. Descúbrelo ahora