Su Sonrisa... Mi Musa - HuaLian

VII-Besarlo

Qingxuan no lograba entender por que Xie Lian se veía tan deprimido mientras caminaban las pocas calles que había desde su casa hasta la casa Hua Cheng, incluso Ban Yue que siempre jugaba en la calle, corría o recogía cosas del suelo, se encontraba obedientemente caminado a su lado sin desviarse ni un solo paso. Lo más extraño y que más ruido le causaba es que He Xuan también actuaba un poco extraño a lo normal.

-Amor... ¿tu sabes que le pasa a Xie Lian cierto? -preguntó en voz baja.

-¿Cómo...? Bien, a ti no te puedo ocultar nada... Así que puede y solo puede ser que le haya dicho algo que no debía -respondió con una sonrisa nerviosa.

-¿Algo como qué?

-Detalles... Quizás algo sobre Hua Cheng...

Ambos venían un poco más adelante que los otros dos, ya que era He Xuan el que sabía como llegar a casa de su amigo desde cualquier punto de la ciudad, pero en ese momento Qingxuan se detuvo abruptamente, rápidamente Xie Lian se acercó preocupado por si algo había pasado.

-¿Pasó algo? -preguntó con cierta preocupación.

-No, tranquilo, solo creo que olvidé mis llaves...

Lo bueno es que realmente no era mentira, la mayoría de veces que salía de su casa sus llaves quedaban dentro de ella. Así que en lugar de sentirse culpable por mentirle a su amigo, simplemente había disfrazado y ocultado la verdad.

-Oh, bueno no te hagas problema, puedes quedarte en casa esta noche -dijo con una sonrisa.

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Su sonrisa se fue apagando poco a poco mientras veía el frente de la casa de su amigo, trató de lucir tranquilo, pero incluso Ban Yue lo notaba extraño, podía sentir como ella acariciaba su mano inconscientemente con tal de calmarlo, y si quedaba alguna duda, lo confirmó cuando Hua Cheng abrió la puerta y la niña lo miró con desprecio, cosa que no hacía con nadie a no ser que la insultaran u ofendieran a ella o a su gege.

-A-Yue no seas maleducada y saluda correctamente -regañó Xie Lian.

-No voy a tolerar que nadie lastime a mi gege -dijo la niña cruzada de brazos.

-¿Pero que dices? -una risa nerviosa salió sin pensarlo- A-Yue, Hua Cheng no me hizo nada.

-Estuviste tenso todo el camino ¿seguro que no hizo nada? -preguntó frunciendo el ceño y mirando despectivamente al otro.

Solo quedaban ellos tres afuera, Shi Qingxuan y He Xuan habían entrado para escoger la película, proceso que siempre tardaba más tiempo por lo que habían decidido adelantarse mientras Ban Yue seguía decidiendo si golpear a su anfitrión o dejar pasar sus sospechas por un rato.

-Pequeña no hizo nada, solo estoy estresado por un examen de economía que tengo mañana, venía tenso por eso -explicó.

Dudaba que Ban Yue le creyera mucho, pero que le mintiera solo significaba que por el momento debían dejar el tema de lado y fingir que se creía la mentira. Ambos eran un libro totalmente legibles ante los ojos del otro. Ban Yue sabía cuando algo andaba mal con Xie Lian y viceversa, lo peor era que muchas veces podían adivinar que era lo que los tenía mal, y muchas veces cuando se trataba de Xie Lian pasando por un mal momento, Ban Yue no se limitaba ni con sus palabras ni acciones y generalmente los metía en situaciones incómodas.

-Bueno... ¿Quieren pasar? -preguntó Hua Cheng levemente incómodo.

Con una última mirada asesina Ban Yue ingresó en la casa.

-A-Cheng, lo siento mucho. Ban Yue es muy sobreprotectora conmigo y malentendió la situación... Yo...

-No te preocupes a-Lian, yo también me pondría así si alguien hiciera sufrir a mi gege.