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Había estado preocupado y perdido durante esos días, Hyejin no respondía a mis mensajes ni llamadas, tampoco había ido a la escuela, tenía muchas ganas de escuchar su voz o ver su cara para poder estar tranquilo.
Ya pasaban dos días desde el rumor de que ella y Byeol se habían peleado, los susurros no había cesado, la gente estaba esparciendo rumores tratando de difamar aún más su reputación, unos hablaban de como supuestamente había atacado a Byeol sin razón alguna, ahora era una bravucona.
—¿Estás bien? Llevas sentado al frente del piano por varios minutos sin tocar nada— la voz de Yeona lo saco de sus pensamientos y salió del trance y se reincorporo en el asiento.
—Lo siento.
—Podemos tomar un momento si quieres pareces perdido— Yeona se veía preocupada pues Heeseung había estado distraído e impasible estos días.
—Estoy bien gracias.
—No lo parece— Lo miro con detenimiento y se detuvo a pensar si debía decir lo que quería— ¿Cómo está ella?
—No se, no hemos hablado y dudo que quiera hacerlo.
—¿Por qué?
—Porque fue mi culpa y ella cree que yo fui quien publicó esa estupidez— Yeona lo miro pensativa parecía ser algo más grande de lo que podía ayudar.
—Pero no fue tu culpa ¿Por qué no hablas con ella? Podrías visitarla se debe sentir muy sola, necesita un amigo— Heeseung la miro con intriga considerando las palabras de su amiga.
(...)
No sé porque sentía la necesidad de verla ni tampoco porque me sentía tan mal al pensar que ella estuviese pasando un momento horrible, así que estaba en frente de su casa tomando impulso para timbrar.
Lo hice, no hubo respuesta por unos minutos así que volví a hacerlo con mucho más ansiedad, esta vez la puerta se abrió dejando ver la figura débil de Hyejin, estaba en pijama, sus ojeras eran lo que más resaltaba de su apariencia, definitivamente no me gustaba verla de esa forma, no se si era culpa u otro sentimiento que me hacía pensar de esa forma.
Al verme frunció el ceño e intento cerrar la puerta pero puse resistencia con mi brazo mientras ella seguía forzando la puerta.
—¿Qué quieres? ¿Por qué estás aquí?
—Vas a darte por vencida, sabes que vas terminar perdiendo el año si sigues ocultandote como una cobarde— eso no era lo que realmente quería decir, quería decirle que realmente lo sentía y que todo estaría bien y que realmente la extrañaba, pero no pude decir nada de eso.
—Es mi asunto, no finjas que te importa, eres igual que ellos, yo podré ser una mentirosa y horrible persona pero todos ustedes no son mejores que yo— inhaló un poco de aire
—Nadie dijo eso, por eso mismo deberías dejar de esconderte, nada va a cambiar si sigues así, solo actúas como una cobarde— parecía que hoy solo estaba soltando un montón de estupideces que no quería decir.
—¿Eso es todo? ¿O tienes algo más que decir?
Si, lo tenía
—No, ya me voy.
Lo había arruinado, sin embargo estaba pensando en la forma de arreglar este asunto.
