"Tus encantos" (Deku¡Híbrido! x Male reader)

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“¿Tendremos que irnos...?”

—A un lado, necesito respuestas —mencioné enojado, seguido de sacar del camino a algunos policías, dirigiendome hacia la habitación.

—Joven, no puede estar aquí —dijo un policía, empujándome lejos de la puerta— Le pido por favor que se retire y espere pacientemente a nuestra llamada. Vaya a casa y descanse su hombro.

—En serio necesito pasar, tengo que hacerle preguntas a esa chica, por favor déjeme pasar.

—Lo siento mucho, pero no puedo permitir eso —negó— Ahora mismo está en interrogatorio.

—Dudo mucho que le saquen siquiera algo —intenté de nuevo pasar pero fue en vano, ya que volvieron a empujarme— Tal vez si yo entro, pueda-

—Escucha chico, deja que la policía se encargue —habló otro oficial con un tono enojado— Ve a casa, déjanos el trabajo a nosotros.

—Que yo sepa, la policía no ha podido hacer nada durante los últimos 15 años —hablé con seriedad— No pueden garantizar algo que no pueden hacer!, Supongo que lo haré yo sólo.

Dí media vuelta para empezar a caminar lejos, sin embargo, el oficial me detuvo, tomó mí hombro y hizo que lo mirara.

—Mira chico, entiendo que quieras hacer algo al respecto —mencionó— Pero está situación no es como las estúpidas películas de ficción, puedes morir si te metes en esto. Te pido por favor que vayas a casa y no salgas.

—Yo no-

—Señor —se acercó otro oficial— Se nos informa que debemos llevar al híbrido, ellos lo están buscando. Tal vez nos dé pistas para encontrarlo, y solo tal vez, tengamos una esperanza para lograr atrapar a esos mal nacidos.

—No pueden llevárselo —me metí a la conversación.

—Claro que podemos.

—¡No si no tienen el permiso del dueño oficial! —no podía negarlo, tenía miedo— ¡Lo que están haciendo es un delito!.

—Desgraciadamente, usted no es el dueño oficial —sacó unos papeles y me los mostró, pero no dejó que los tomara— se nos ha informado que su firma está falsificada, creo que tendrá que acompañarnos usted también Señor (T/N). Lo que usted hizo también es un delito, ponga las manos contra la pared.

—¿¡Cómo?!, ¡No!, ¡Sueltenme!.

—Tiene derecho a guardar silencio, todo lo que diga puede ser usado en su contra —tomó mis manos y las esposo— Y por supuesto, tiene derecho a un abogado.

—Siento mucho interrumpir —escuché una voz familiar, volteé la cabeza y lo miré soprendido— Soy el agente Hawks, trabajo con la policía de Japón —mostró su placa, luego la guardó— Les pido por favor que suelten al Caballero, él no hizo nada malo.

Se nos hacerco y me alejó de los policías, que no hicieron nada, yo los miré confundidos.

—Él viene conmigo —Hawks me acercó a él, tomándome de la cintura— Trabajo en su caso, será de mucha utilidad tenerlo. Más tarde hablaremos sobre su firma falsificada, que tengan buena noche, oficiales.

—¿Que estás haciendo? —le susurré.

—Sólo sígueme la corriente, dulzura —me susurró al oído, seguido de mirarme de reojo con... ¿Seducción?.

Nos fuimos de ahí de inmediato, me metió al coche y conducio hacia mí casa. Al final decidí invitarlo a comer, como una muestra de gratitud por haberme salvada de casi ser arrestado.