Maldiciones En BNHA

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La pelimorada observa como los niños juegan en los columpios,había pasado un año ya desde la muerte de la Señora Fushiguro y su funeral en dónde había visto por primera y  única vez al padre de Megumi

Actualmente ambos menores poseen 8 años mientras que Tsumiki posee 10,habían pasado por un periodo de duelo del cual se iban recuperando poco a poco.Pero sin duda era algo que los dejaría marcados durante toda la vida

En ese momento un maldición comenzó a salir del suelo delante de ella,está tiene intenciones de atacarla pero la pelimorada se mantiene impasible lista para hacerla explotar

Pero antes de que pueda hacer algo la maldición comienza a ser absorvida por alguien unos metros detrás de ella,al voltearse se encuentra con un hechicero de unos 20 años y cabello negro el cual sostiene una esfera negra con toques dorados en su mano

—no hacía falta que la absorvieras,fácilmente podría haberme desecho de ella.Pero de todas formas muchas gracias– hablo de forma calmada con un sonrió,el hechicero le miró algo sorprendido

—así que puede verlas– ella asintió para volver su vista a dónde estaban los niños.El hechicero se sentó en el banco junto a ella

—tiene un ritual maldito vastante interesante.Hace mucho no veía uno de ese tipo.Es poco común que los Hechiceros puedan absorber y controlar maldiciones.Aunque deben saber horrible– comentó

—si,no son algo que disfrute de Ingerir,pero es algo que debo hacer– hablo tragando aquella esfera como si nada.La pelimorada busco en su bolso y saco una paleta la cual le tendió al Hechicero que vio dicha acción confundido

—para que te quites el sabor– sonrió divertida

—Gracias– la aceptó y quitando el envoltorio se la comió,era de manzana

—no es nada,aunque debo decir que me da algo de curiosidad saber porque un Hechicero se pasea por esta parte de Tokio la cual casi nunca tiene maldiciones– comentó viendo cómo entre su hijo y la castaña jalabán al azabache que se negaba a levantarse del columpió

—solo necesitaba meditar sobre una misión próxima– ella le miró de reojo notando Rápidamente que aquello iba más allá que la duda por una misión

—no soy nadie para meterme pero te daré un consejo que aplicó desde hace años.No hay necesidad de salir al exterior a apreciar si está lloviendo cuando puedes confirmarlo desde dentro,de todas formas aunque salgas seguirá lloviendo y solo conseguirás haberte mojado– el la observo confundido y ella río levemente –lo que quiero decir es que ha veces es mejor mirar todo desde el interior hacia el exterior que desde el exterior hacia el interior.Será mucho más eficaz si ves a lo que te enfrentas desde adentro y lo vas cambiando sin que se den cuenta,así cuando se den cuenta que cambiaste todo como querías ya será demasiado tarde y no podrán acerté nada porque ya habrás ganado– le explicó calmada haciendo que el comenzará a meditar sus palabras –me tengo que ir.Ten un buen día Hechicero y suerte en tu misión– tomo su bolso y comenzó a alejarse hacia donde estaban los niños para volver a casa

Quien le diría que por esa simple y corta conversación cambiaría el destino y la forma de ver las cosas de aquel Hechicero?