OJOS ESCARLATA

Perfume de rosas

*Mirar sus ojos, reflejándome en ellos, era como ver el mismísimo infierno, seduciéndome, haciéndome caer en las espinas de su voz. Quizá fue mi imaginación, el poder oír esa palabra "Mírame", ¿me la decía realmente a mí? Pero, ¿entonces a quién?. Todas esas dudas se disiparon cuando vi esa rosa delante mío, podía sentir el odio de todas las chicas alrededor de mi pero no me importaba, el estaba prestándome atención , tome la rosa con ambas manos y por un solo instante, por un solo segundo su dedo roso con el mío, fue como una descarga eléctrica que viajo por todo mi cuerpo, y cuando alce la mirada ahí estaba, esos ojos, esa sonrisa, esos colmi..¿Esos colmillos? , pude haberlo imaginado, no, realmente eran unos colmillos, pude apreciarlos más cuando Gilbert sonrió y al instante de sonreírme y tocar nuestros dedos el quito la mano y cerro los labios para volver a cantar y a moverse con la gracia de un cisne, como siempre bailando mientras tomaba aquel micrófono y seguía con su ritual musical enfrente de todos. Yo me paralice, mantenía la rosa tan aferrada a mi cuerpo que no me di cuenta que me clave las espinas en mis manos, simplemente no tenía dolor, era mayor mi gozo, mi felicidad de haber tan siquiera tenido un encuentro con él, Tanta fue mi fascinación, pero, después de eso, el dejo de verme, dejo de prestarme atención. Mi mirada a pesar de ya no estar clavada a Gilbert, se encontraba soñando con ese momento mágico hasta que una mano conocida me movió, y cuando desperté ya nadie estaba enfrente del escenario excepto yo.

Kiku, Kiku!! Despierta! –gritaba el amigo rubio, obviamente preocupado por el japonés- ayy!! Mon cherie!! ¿Cuanto tiempo vas a estar ahí parado? –el francés suspiro pesadamente hasta que se acercó y le soplo aquel oído-

Ahhh! –apenas soltó un suspiro, y volteo hacia el francés algo asustado y a la vez perdido- Francis... ¿Qué sucede? ¿Cómo llegaste hasta acá? Empujaste a las chicas...-estaba realmente perdido en el tiempo-

¿¡Cuales chicas?! Todas ya se fueron... oye realmente te cayo muy bien que ese tal Gilbert te haya dado esa rosa ¿verdad? –señalo la misma que sostenía el japonés, pero al ver la sangre realmente se preocupó- ...kiku tu...

Entonces no fue un sueño..- dijo en un susurro aquel japonés que se aferraba más a esa flor con espinas- pensé que todo lo había imaginado ¿Francis? –el blondo alzo la mirada hacia su amigo- ¿cuánto hace que termino el concierto?

Hace como diez minutos, en cuanto termino todos se fueron a sus casas y otros siguen aquí usando las habitaciones –Asintió un poco mientras veía al menor pensar- kiku, debemos irnos si no vamos hacer nada aquí entonces vámonos, si no Yao me va a matar –Francis tomo el brazo del japonés y lo jalo hacia el para irse de ahí pero kiku forzó su brazo haciendo que el mayor no pudiera llevárselo- kiku!!

Francis...Tengo que verlo! –Volteo el japonés sacándole un susto al blondo- ¿no lo entiendes? El me dio esta rosa, el me pidió que lo viera. ¡Si voy a casa, es más seguro que Yao sepa que escape! ¡Jamás me va a volver dejar ir a uno de sus conciertos!! Francis no voy a obligarte a seguirme, es cierto, soy un miedoso y no tengo confianza en mí mismo, y te necesito, pero, eres mi amigo y no quiero meterte en problemas por mi culpa –el menor alzo la mirada y Francis solo lo veía con cariño y le puso la mano en el cabello- tengo que ir ..

Lo se Kiku, y yo voy contigo, ¿Qué clase de amigo soy, si no acompaño a mi mejor amigo a ver a su amor platónico? Quizá te seguiría hasta la cárcel, pero, ¿Qué importa? Anda ¿cuál es tu plan?

Vamos a ..vamos a meternos en su camión! –le grito al blondo, este casi dio un salto hacia atrás con la tremenda noticia- ellos aun están cambiándose!! ¡Siempre tardan a una hora en poder volver a su camión! Podemos entrar y..-fue interrumpido por el francés que le puso la mano en la boca haciéndolo callar-

¡Alto ahí, no me parece mal idea! ¡Pero no vamos a esperar a que ellos entren al camión solo para que hables con el! Vamos se realista kiku, si nos ven en su camión entonces van a llamar a la policía ¿no crees?, tengo una mejor idea, escucha, entramos a su camión tomas una camisa de el o algo personal y lo guardas para toda tu vida, si gustas puedo ayudarte a eso pero a otra cosa mas ¿entiendes? –suspiro al ver la cara de molestia de su amigo- Kiku...