Y hoy en mierdas de una mente neurodivergente quemada hasta los putos cimientos:
Queridos padres, profesores, familiares, queridos adultos:
Yo era une niñe.
Mi entusiasmo nunca fue molesto.
Mi alegría no era malvada.
Mi sonrisa nunca fue una carga.
Mi risa nunca fue vergonzosa.
Yo no era el monstruo que me hicisteis creer que era.
Yo era una niña.
Y ahora soy lo suficientemente mayor para empezar a curar el daño que causaste.
Ahora puedo reír sin miedo.
Yo era una niñe.
Y vosotros sois unos mentirosos.
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La Cabeza De Stellae
DiversosSólo eso: un desahogó, tal vez una forma de que algunos entiendan mi comportamiento. También suelto muchas opiniones e ideas inconexas por aquí.